Si algo podemos decir del actual gobierno estatal a cargo del Ingeniero Cuitláhuac García Jiménez es que su preocupación nunca ha sido el bienestar de las y los veracruzanos. Y es que tanto en temas de salud, seguridad y bienestar social, la administración del ex catedrático de la Universidad Veracruzana ha pasado por alto las necesidades de todos los que habitamos el estado costeño.
Claro que no es novedad, en cuanto al tema de salud, pudimos ver que no era prioridad cuando en pandemia nunca se les brindó a los trabajadores de salud los equipos necesarios, las escuelas no recibieron apoyos, las campañas de concientización eran casi nulas y ahora, demuestran la desidia que tienen de atender la Torre Pediátrica ubicada en el Puerto de Veracruz. Con esto podemos entender que la salud no es relevante para la actual administración.
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El segundo punto es la seguridad que desde luego ha sido un punto que ha pasado por alto. Pues solo al llegar Cuitláhuac como gobernador del 2018 al 2019, aumentó en más de 10 veces las cifras de homicidios dolosos, pasando de 104 en 2018 a 1,431 en 2019. En los casi seis años de administración del morenista, tiene en su haber 5, 868 homicidios dolosos, con corte al mes de mayo del 2024. Posicionando a Veracruz entre las primeras diez entidades con mayor incidencia de delitos de alto impacto.
Pero desgraciadamente, existe una preocupación que hoy en día están viviendo todas las niñas, adolescentes y mujeres en nuestro Veracruz, las desapariciones. Y es que, a pesar que el gobierno trate de no admitir que Veracruz debe contar con una tercera alerta de genero por desaparición de niñas y mujeres, los casos son una realidad que a muchas mujeres las tiene con el temor de no saber si van a regresar a sus casas cada que salen.
En los últimos días, tan solo en la zona conurbada Veracruz - Boca del Río, las redes sociales se han llenado de fichas de búsqueda que van desde niñas pequeñas hasta mujeres desaparecidas, donde sus familiares suplican se compartan en espera de que alguien pueda dar información de ellas. Al respecto de esto, el Observatorio Universitario de Violencias Contra las Mujeres de la Universidad Veracruzana que coordina la Dra. Estela Casados, cuenta con un registro de 394 desapariciones con corte al mes de junio en todo el estado de Veracruz. La zona centro del estado cuenta con la mayor concentración de desapariciones, en estos 6 meses, más de 200, en otras palabras, más de una por día. También, Veracruz es el municipio que más desapariciones tiene registradas, pues cuenta con aproximadamente 70, más de 10 al mes.
Pero es que no solo el gobierno veracruzano ha demostrado su desinterés por las mujeres desaparecidas, un caso que también se está viviendo en el estado es el alza de suicidios en jóvenes a causa de depresión, pues el reporte epidemiológico de la Secretaria de Salud, posicionó a Veracruz como uno de los estados con más intentos de suicidio, 92 en los primeros cuatro meses del 2024, mientras que en este mismo periodo, en el 2023, el estado contabilizó 55 casos.
Haciendo zoom… aquí podemos ver tan solo 2 situaciones que son de primera atención o deberían de serlo para cualquier gobierno y desde luego, gobernante, pero pues, ¿Qué están haciendo Cuitláhuac, la gobernadora electa Rocío Nahle y algunos diputados de MORENA? Están enfocados en la remodelación del estadio de los extintos tiburones rojos donde invirtieron más de 400 millones de pesos. ¿Tener de vuelta el futbol profesional es una prioridad para un estado que se encuentra con miedo de perder a una mujer más?, ¿Es más importante el futbol que mejorar la estrategia de seguridad para que la próxima desaparecida no sea tu hija, hermana, esposa o amiga? Desde luego que a los políticos veracruzanos solo les interesa el beneficio económico que podría traer el deporte más querido por los veracruzanos, pero no se están dando cuenta que esos veracruzanos están muriendo por una estrategia de seguridad mediocre y unas campañas de prevención del suicidio inexistentes. Ya vimos que el tema de las mujeres le quedó grande al gobierno de Cuitláhuac, falta ver si la primera mujer gobernadora velará por la seguridad de las veracruzanas o si su feminismo solo era político, porque Veracruz está pintado de rojo y no por los tiburones rojos.
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