XALAPA, VER.- El expolicía municipal de Medellín de Bravo, Clemente Noé Rodríguez Martínez, recibió una sentencia de 32 años y medio de prisión luego de que un juez lo encontró culpable del crimen del periodista José Moisés Sánchez Cerezo. El comunicador fue privado de la libertad y posteriormente asesinado en 2015, en la congregación El Tejar, perteneciente al municipio de Medellín de Bravo, en Veracruz.
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La Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz confirmó la sentencia este 22 de agosto, mediante un boletín oficial.
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"La Fiscalía Regional Veracruz logró sentencia condenatoria de 32 años y 6 meses de prisión en contra de Clemente Noé “N” como responsable del delito de homicidio doloso calificado en agravio del periodista José Moisés Sánchez Cerezo", dice el mensaje.
La participación de Clemente Noé Rodríguez Martínez
De acuerdo con las investigaciones, el ex-policía intermunicipal confesó días después del homicidio su participación en los hechos, asegurando que desconocía que Sánchez Cerezo era periodista y ofreciendo disculpas a su familia.
Clemente Noé fue señalado como el enlace al que recurrió Martín López Meneses para ejecutar el crimen del comunicador.
López Meneses, quien se desempeñó como subdirector de la Policía Municipal de Medellín de Bravo, está acusado de haber ordenado el secuestro y asesinato del periodista y activista social.
En el momento de los hechos, Meneses era chofer y escolta personal del entonces alcalde de Medellín de Bravo, Omar Cruz, exalcalde de Medellín de Bravo por el Partido de Acción Nacional (PAN), señalado como autor intelectual del asesinato, quien está prófugo desde el 2015.
En su declaración, Clemente Rodríguez Martínez mencionó que un hombre apodado “El Harry”, identificado como líder del grupo que atacó a Moisés, recibió de López Meneses la instrucción de desaparecer al periodista.
El juez además de dictar sentencia, estableció un pago por concepto de reparación del daño y suspendió sus derechos civiles y políticos, dentro de la causa penal 30/2019.
Crimen de Moisés Sánchez
El 2 de enero del 2015 Moisés Sánchez fue sustraído de su casa en la colonia Gutiérrez Rosas, en la congregación El Tejar, a las 6:50 de la tarde por un convoy de cinco camionetas; fue abandonado sin vida el 24 del mismo mes.
Moisés Sánchez Cerezo era director del semanario La Unión, que él solo escribía y donde incluía notas, principalmente, de quejas por deficiencias en servicios públicos, como lo eran el alumbrado, el drenaje, el servicio de agua y los baches, entre otros.
Cuando privaron de la libertad a Moisés Sánchez Cerezo el 2 de enero de 2015, Javier Duarte de Ochoa, quien era entonces el gobernador del estado de Veracruz, dijo que su desaparición no se debía a su profesión como periodista.
Javier Duarte minimizó el caso de Moisés y dijo que se trataba de un taxista y no de un reportero. Sin embargo, días después, la Fiscalía General del Estado (FGE) añadió a la línea de investigación su oficio como periodista.
Tiempo después, las investigaciones de la FGE identificaron a cuatro elementos de la Policía Municipal de Medellín como presuntos involucrados en la desaparición de Moisés, quienes lo habrían entregado a un grupo de la delincuencia organizada por instrucciones del entonces presidente municipal.
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