COATZACOALCOS, VER. – Un hombre identificado como Yoshio Guadalupe fue sentenciado a 20 años de prisión, por el delito de homicidio doloso en agravio de Fernando Cristopher Jiménez, luego que de el pasado 3 de abril del 2022, incendió un taxi cuando se encontraba el chofer y otra persona dentro, provocando la muerte del primero, al sur de Veracruz.
De acuerdo con las averiguaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz, aquella mañana, Cristopher se encontraba estacionado dentro de su unidad de transporte público número 86, en las inmediaciones de la colonia Santa María, municipio de Ixhuatlán del Sureste, al sur de la entidad.
Hasta ese lugar llegó Yoshio, quien también se desempeñaba como taxista, y tras lanzar algunas amenazas contra Cristopher, de inmediato roció de gasolina su unidad, y posteriormente le prendió fuego, huyendo de forma inmediata.
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Cristopher Jiménez intentó salir, pero después de varios minutos dentro del taxi sufrió quemaduras en el 80 por ciento de su cuerpo, por lo que fue atendido por paramédicos y trasladado al Hospital de Coatzacoalcos, donde murió 3 días después debido a las quemaduras.
La zona fue acordonada por elementos policiacos, y el fuego logró ser sofocado, aunque el taxi quedó calcinada por completo, sin que en el momento se diera con el responsable. El segundo ocupante del taxi, de identidad reservada, escapo a tiempo y ayudó con las averiguaciones tras salvar la vida, aunque presentó algunas quemaduras.
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Yoshio, logró escapar durante un mes de las autoridades, pero en mayo del mismo año fue detenido por elementos ministeriales, quienes dieron cumplimiento a la orden de aprehensión dentro de la causa penal 323/2022.
Tras ser presentando ante un juez, fue vinculado a proceso y a casi dos años, fue declarado culpable por el delito de homicidio culposo dentro del juicio oral 92/2023.
Durante varios meses los familiares del taxista asesinado exigieron a las autoridades que se diera con el responsable, del que se sabe, tenía conflictos con la víctima, hasta que decidió acabar con su vida. Cristopher era originario del municipio de Ixhuatlán del sureste donde fue sepultado.
Después de casi dos años, se determinó que Yoshio quedara recluido en el Cereso Duport Ostión de Coatzacoalcos, para cumplir su sentencia.
mb