León.- Década de los 70, campos de beisbol de la Deportiva del Estado. Un niño originario de Lagos de Moreno se acercaba a entrenar en la Liga León de Beisbol Infantil y Juvenil, y desde entonces demostraba sus dotes para este deporte.
Alto, robusto y bien plantado, su posición natural era en el montículo. Una derecha poderosa con la que se imponía incluso ante bateadores de mayor edad. Sabía también jugar otras posiciones defensivas y era hábil en el fildeo, pero definitivamente lo suyo era el picheo.
Así se fue forjando Armando Reynoso, tremendo pitcher que durante más de una década, entre 1991 y 2002, formó parte de equipos como los Bravos de Atlanta, Mets de Nueva York, Diamondbacks de Arizona y Rockies de Colorado.
Te podría interesar
Pero antes de brillar en la Gran Carpa, Reynoso Gutiérrez destacó en el beisbol nacional. Particularmente con los Saraperos de Saltillo, donde su fina actuación en la temporada 1990 llamó la atención de los visores extranjeros. 20 juegos ganados y 170 ponches en ese año, en el que por cierto los campeones fueron los Bravos de León, de la mano del mánager Paquín Estrada.
En los diamantes leoneses
La Liga León, forjadora de jugadores y de personas, ronda las cinco décadas de atender a los niñez y juventud no solo de este municipio –principalmente comunidades rurales y colonias marginadas-, sino de ciudades vecinas.
Así, llegan pequeños jugadores de San Pancho, Romita, Silao, Lagos… Algunos, de acuerdo a sus necesidades, reciben apoyo para sus viáticos por parte de la Liga, que encabeza Pedro Medina Hurtado. Ahí han surgido jugadores que luego continúan desarrollándose en el semiprofesionalismo o siguen en el ramo amateur, pero llevando inculcada la filosofía del deportivismo.
Ninguno, sin embargo, ha alcanzado los logros de Reynoso, quien tuvo una carrera que lo vio ser compañero de Tom Glavine y John Smoltz en Atlanta a principios de los 90, pasar cuatro temporadas en Colorado entre 1993 y 1996, y contar con una marca de 13-3 como miembro de los Mets de Nueva York durante dos campañas. Luego, 4 años con los Diamondbacks hasta su retiro de Ligas Mayores a los 36 años de edad.
Reynoso, quien radica en Lagos de Moreno (allá el estadio de beisbol no podría llevar otro nombre que el suyo), se mantiene apegado a la Liga León de Beisbol Infantil y Juvenil, donde ponchó a sus primeros bateadores y comenzó a mostrar el poder de su derecha.
Es asiduo asistente a los eventos de la Liga, como inicios de temporada, premiaciones y aniversarios. No se aleja de sus raíces y siempre es puesto como ejemplo a seguir para los niños y jóvenes beisbolistas.
Cv