León.- La convivencia constante del ser humano con animales domésticos como los perros o los gatos, ha hecho que ambos casos estén propensos a ser contagiados de rabia.
Esto debido a que los animales pueden ser contagiados, y por la cercanía con los seres humanos, también se puede trasladar.
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Pero es cuando una persona es atacada precisamente por alguno de estos animales, y éste ya está contagiado, cuando también puede quedar en riesgo de contagiarse.
Así lo expresó el coordinador estatal del Programa de Rabia, de la Secretaría de Salud del Estado de Guanajuato, Miguel Chavira.
Explicó que hay otra forma de que las personas se contagien de rabia por medio de la cercanía con un animal con la enfermedad.
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Ésta se da cuando la saliva de los perros o gatos con rabia tiene contacto con alguna lesión del ser humano.
Una vez que cualquiera de los dos casos ocurre, la persona debe de ser atendida en una unidad médica antes de que presente síntomas de la enfermedad.
Si presenta algún síntoma y no recibe una atención médica, la persona fallecerá, advirtió el especialista.
"Por la agresión, pueden morder a una persona cuando están enfermos y pueden trasmitir la rabia al ser humano. Si el ser humano es mordido y no recibe una atención médica antes de presentar síntomas, irremediablemente la persona morirá".
"La persona, cuando nos reportan que es mordida por un perro o por un gato, acude a la unidad de salud y en la unidad de salud se le valora para ver si se inicia o no un tratamiento antirrábico humano", comentó.
Cuando la persona fue mordida por un perro o un gato, se buscará tener la certeza si en animal está vacunado o no.
Si no está vacunado, se realiza una observación al animal por 10 días, periodo en el que puede manifestar signos de la enfermedad.
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Si no se presentan estos signos, ya no se hace un tratamiento antirrábico.
Los perros y los gatos se pueden contagiar de la misma manera, a través de tener contacto con otro animal o haber sido agredidos.
JP