León.- Hace 3 años, La Silla Rota descubrió a una elefanta viviendo en cautiverio en un terreno a un costado de la carretera. Hubo silencio de parte de los propietarios que hoy, tras este medio haber retomado el caso la elefanta, presentaron a la prensa a la elefanta.
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Se llama Susy, de acuerdo a lo que dijo el domador y también cuidador a La Silla Rota el sábado pasado (17 de febrero). Oscar Torres aseguró que, pese al cautiverio y a estar viviendo en un lugar no apto para su especie, la elefanta se encontraba en buenas condiciones de salud.
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Cuando La Silla Rota la descubrió, la gran Susy estaba encerrada en un corral improvisado hecho de fierros oxidados que antes eran mobiliario de circo, carros viejos y chatarra deteriorada por los años. Ese era el lugar en el que comúnmente se le veía a Susy que hoy presentan como Annie.
Esta mañana, después de La Silla Rota haber exhibido el caso de este animal, Héctor Jiménez, el representante legal de los propietarios de Susy (la familia Morales), demás cuidadores y encargados del rancho ofrecieron una rueda de prensa para darla a conocer a los medios.
La presentaron como Susy (como la había nombrado el domador) bajo el nombre de Annie, una elefanta que llegó a la familia Morales, dueños de una franquicia del Circo Atayde en Guanajuato, hace 20 años como artista de circo.
Así es como se refieren a ella, pues así es como la perciben. Annie era una artista, la estrella del circo, era la elefanta futbolista. Su gracia, la que les hacía ganar miles de pesos a los propietarios, era levantar la trompa y la patita para jugar con una pelota.
Se acabó todo cuando se aprobó la ley que prohibía a los circos tener animales. Se mudo a un terreno lleno de chatarra a vivir sola, lejos de su especie y de cuidados especiales para un elefante, pese a todo, sus cuidadores dicen que vive sana.
Annie vive bien: aseguran cuidadores
En entrevista con La Silla Rota, el encargado Pedro Mata aseguró que Annie vive bien, sana y salva.
De acuerdo con el señor Mata, la elefanta de León es alimentada con una dieta especial para ella. Le dan de comer palma achicalada (bañada en miel), avena deshidratada y una mezcla de granos y concentrados especiales para elefantes. Le dan fruta, verdura y pan también.
Al día, se invierten alrededor de 2,000 pesos en Annie.
“Es costoso mantenerla. El costo aproximadamente de su manutención es de 2,000 pesos diarios. Si estuviera abandonado para que hacen (la familia Morales) ese gasto”, indicó.
La elefanta se ve robusta y con energía, pese a estar viviendo en un rancho lejos de las condiciones apropiadas para un animal así.
¿Cómo llegó a la carretera de León – Lagos?
De acuerdo a lo explicado por Pedro Mata, Annie llegó a México desde Estados Unidos. A León llegó hace 20 años para ser uno de los shows principales del circo y hace 8 años al rancho.
“El señor Morales lo compró (el rancho) para compartirlo con su familia y su elefanta. Era artista de circo, era de él, cuando ya se prohibió pudo haber hecho cualquier cosa, pero como le tenía mucho cariño decidió quedársela”, comentó.
Annie fue sentenciada a morir ahí, rodeada de chatarra y alejada de cuidados especiales, por el cariño de su dueño.
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