León-. “Fui víctima a plena luz del día, aproximadamente a las 8 a.m. saliendo del gimnasio un tipo me arrinconó y me tocó horrible”, ese es el testimonio de Isabella, de 28 años. Como ella, hay otras 14 mujeres que relatan a La Silla Rota el lugar específico de León donde han sido acosadas. No hubo ninguna que haya dicho sentirse segura en la ciudad.
En el marco del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, este medio contactó a una docena de mujeres para hablar del acoso sexual en las calles. ¿Cómo lo viven y dónde? En la voz de 15 mujeres, compartiremos la ruta del acoso en León, es importante decir que la mayoría de las chicas entrevistadas se sienten inseguras en el transporte público, en las paradas de camión y en las calles del centro.
PLAN DE SAN LUIS, ZONA PIEL
Isabella fue “toqueteada” por un hombre “bien vestido” en la calle Plan de San Luis, en la Zona Piel. A las 8 de la mañana, cuando salía del gimnasio, el hombre del que nadie desconfiaría, como dice ella, la acorraló a plena luz del día para tocarla.
“Saliendo del gimnasio me arrinconó y me tocó horrible. Platicando esta experiencia con mis amigas me comentaron que ese tipo hace de las suyas desde hace mucho tiempo”.
CICLOVÍA JUAN ALONSO DE TORRES, LEÓN I
Laurel fue marcada por dos hechos que la intimidaron, ambos en la colonia León I.
En una ocasión un adulto mayor que iba en la ciclovía del bulevar Juan Alonso de Torres se atrevió a tocarla en un tramo bastante transitado.
“A un señor no se le ocurrió nalguearme, yo iba cruzando pero me esperé para ver la oportunidad de cruzar y me nalguea y todavía se va carcajeando”
VASCO DE QUIROGA, LEÓN I
En el bulevar Vasco de Quiroga un hombre la invitó a subirse a su auto, entró en pánico y no supo cómo reaccionar.
“Un wey me venía siguiendo en su carro y se le ocurre gritarme un buen de cosas, que estaba bien bonita, te llevo a tu casa, pero yo estaba con la idea de no hacerle caso, pero no se le ocurre abrir la puerta y decir que él me llevaba. Entré pánico y no supe cómo reaccionar”.
AQUILES SERDÁN, OBREGÓN
Paula se siente insegura cuando va de visita con su novio, sobre la calle Aquiles Serdán, que está en la zona centro. Prefiere que vaya a encontrarla porque es un tramo muy solitario.
A Monie, otra chica, le da temor andar por la calle en bicicleta, principalmente por las noches. En esta misma calle, en la colonia Obregón, un hombre la intimidó al pasar cerca de ella en la banqueta.
“Un señor venía en la banqueta dónde yo (de frente hacia a mí) y se me acercó tanto que me tuve que cruzar de banqueta. Una ya va asustada, tiene una que reaccionar antes de que nos hagan algo y aunque siempre traigo mi gas en la mano, no es suficiente para sentirme segura”.
A esto se suman las groserías y gritos que le hacen los hombres cuando circula por el Malecón del Río o las calles del centro. Incluso ha tenido que dejar de usar short si va salir de noche en su bicicleta.
PARQUE DE SAN JUAN DE DIOS
Luego de este hecho Monie fue víctima pero ahora de un indigente que llegó repentinamente a vaciarle su comida en la cabeza. El coraje y el susto pasaron por su mente. Un chico que fue testigo habló a la Policía, mientras ella se preguntaba por qué llegar a ese grado ofensivo cuando ella solo dibujaba en el parque de San Juan de Dios.
“Estaba sentada en una banca y me echó toda su comida (sopa aguada) en la cabeza, me saqué de pedo. Entre coraje y susto solo un chavo que iba pasando le dijo cosas y fue a buscar a un policía. El indigente se fue y aunque no me hirió, ahora ya le pienso ir a sentarme ahí”.
ASTURIAS Y ANDALUCÍA, VISTA HERMOSA
Columba es otra de las muchas mujeres que han sido acosadas, de hecho dos veces en la misma esquina: calle Asturias y Andalucía, en la colonia Vista Hermosa. Hombres han sacado su pene para intimidarla.
“Una vez a plena luz del día un wey en coche me preguntó una dirección, él iba en su coche. Cuando me acerqué a la ventanilla se bajó el cierre y se empezó a masturbar. En esa misma esquina, ya de noche, venía de la escuela y un señor en bici empezó a seguirme preguntándome si me acompañaba a mi casa”.
VASCO DE QUIROGA RUMBO AL HILARIO MEDINA
En la colonia León I, a un costado de la preparatoria Conalep, Lucy fue acosada por un hombre que estaba a punto de enseñarle su miembro, pero otro hombre llegó a ayudarla.
“Un tipo me estaba esperando en la esquina, estaba a punto de sacar sus partes íntimas, pero por suerte salió un chavo de unos 36 años, me vio asustada y me acompañó todo el bulevar Guanajuato. Para mi suerte el que me acompañó vive cerca de mi casa”.
LÍNEA 2
El transporte público es señalado como uno de los lugares más inseguros por las mujeres, principalmente las orugas. Las entrevistadas cuentan que muchos hombres aprovechan el tumulto de gente para acercar su miembro o incomodarlas.
A Michelle le intentaron tocar las bubis un hombre que se hizo pasar por ciego.
“Un día un hombre ciego, según… no lo dejaban bajar de la oruga porque pues todos apretados en la puerta y yo ahí voy a ayudarlo y que veo que me quería agarrar una bubi. Había otro en la parada del bulevar López Mateos que según vendía chicles y pues no, solo era para agarrar y repegarse a las mujeres”.
MÉRIDA, EL COECILLO
Jessica fue acosada a los 13 años, lo recuerda diez años después, pero siente el mismo temor. Fue víctima sobre la calle Mérida, en El Coecillo, cuando esperaba el transporte para ir a la secundaria.
“Específicamente en la calle Mérida un tipo llegó por atrás y metió su mano bajo mi falda. Por esa colonia hay muchas fábricas y muchos trabajadores, así que se podría decir que es un punto dónde hay mucho acoso. Creo que ha sido de los hechos más traumáticos, pero a decir verdad no hay un solo día que salga a la calle y no pase por acoso, ya sea una mirada, un piropo, que te sigan”.
FRANCISCO VILLA, CEMENTOS
El tramo del bulevar Francisco Villa a la altura de la colonia Santa María de Cementos es otro punto que causa temor a las mujeres, cuenta Larissa, pues es una zona solitaria y poco alumbrada donde víctimas han sido acosadas por un hombre que va desnudo en su automóvil. Aunque este hecho ocurrió hace seis años sigue causando temor en las mujeres.
“De hecho varias amigas han sido acosadas por un hombre que viaja desnudo a bordo de su auto y se estaciona justo al frente del paradero para mostrarles el pene y gritarles obscenidades mientras esperan el camión”.
LÍNEA 4
Larissa también ha sufrido acoso en el transporte público, específicamente recuerda que en la Línea 4 un hombre que asaltaba a otra mujer la amenazó con una navaja para que no pidiera ayuda.
“Me siento insegura en el transporte público, principalmente en las unidades de la oruga, porque en varias ocasiones he sido acosada por hombres que aprovechan que el camión va lleno para empujar su entrepierna contra mi cuerpo o para tocarme. Incluso una vez viajaba en la Línea 4 y me tocó ver un asalto a una pasajera y uno de los asaltantes me amenazó con una navaja para no hablar o pedir ayuda”.
FRAY DANIEL MIRELES, ENTRE SIÓN Y VASCO DE QUIROGA
Andrea cuenta que sobre la calle Fray Daniel Mireles es inevitable no sentirse insegura, entre las calles Sión y Vasco de Quiroga, pues es un camino solitario donde hay fábricas y hasta hace un mes apenas fue pavimentada la calle.
“Hay un tramo donde no hay casas, hay una fábrica y en frente es una pensión, aunque no me ha pasado nada me pone nerviosa caminar por ahí porque no pasa mucha gente”.
CICLOVÍA JUAN ALONSO DE TORRES RUMBO A PLAZA MAYOR
A pesar de ser una ciclovía ubicada en la zona norte donde transitan muchas personas, Patricia ha sufrido acoso desde que era una adolescente.
“Cuando caminaba por ahí con mis amigas no pasó ni un hombre en bicicleta que no me acosara. Desde entonces decidí caminar dentro de las colonias, rodeo más, pero es lo que tengo que hacer si no quiero que me falten al respeto o me toquen, como esa vez cuando apenas estaba creciendo”.
MERCADO COMONFORT
Daniela sufrió el acoso de dos hombres que venden discos en un puesto ambulante, cerca del Mercado Comonfort. Ambos le empezaron a gritar “piropos” a pesar de que no tenía “ropa provocativa”, causando que se sintiera incómoda y no volviera a bajar del camión en esa parada.
“Un chavo y un señor, los dos se voltearon a ver y empezaron a chiflar y hacer un ruido como de "tssss". Ni siquiera traía vestido o "ropa provocativa" y no debería importar eso, pero me hicieron sentir muy incómoda y ya no querer tomar esa ruta para no tener que bajarme ahí y encontrármelos, eso pasó un martes a las 9 de la mañana, el acoso no tiene horario”.
LÍNEA 1
En la Línea 1, de la base Delta a Centro Max, otro hombre acosó a Daniela frotando su miembro en su mochila, aprovechando que estaba llena la ruta, ella lo enfrentó, luego se dio cuenta que el hombre así operaba en varios paraderos.
“Un señor como de unos 50 años se puso atrás de mí, yo entendía que no había suficiente espacio pero traté de hacerme a un lado para que no estuviera así. No le importó y empezó a frotarse en mi mochila que yo había bajado para cubrirme. Al dar la vuelta del bulevar Delta al Aeropuerto aprovechó el movimiento e hizo a un lado la mochila. Yo tenía miedo, asco, pero tuve más valentía y le dije que se hiciera a un lado porque me estaba incomodando, me volteó a ver de una manera rara y se dió la vuelta. En la estación de cerrito de jerez vi como le estaba haciendo lo mismo a otra chava”.
RUTA 66
Paula sufrió el acoso de un hombre que acercó su miembro erecto cuando iba en la ruta 66, que va de la estación Delta a colonia Haciendas San José. Ella le pidió que se alejara y él acosador la juzgo de “loca”, además los pasajeros se portaron indiferentes.
“Estaba sentada en el bus del lado del pasillo y un señor que iba parado junto a mí me acerco su miembro erecto, le pedí que se alejara de mí, pero me dijo que estaba loca, que no era cierto. La gente solo se me quedó viendo como si yo tuviera la culpa, afortunadamente se acercaba mi bajada, y cuando baje del bus todos voltearon a través de las ventanas”.
BULEVAR HIDALGO E IBARRILLA
Lupita ha sido incomodada por ciclistas y automovilistas que transitan por el bulevar Hidalgo e Ibarrilla-
”Me ha tocado acoso en reiteradas ocasiones, las veces que he ido caminando por Libramiento a la altura de Villa Magna (entre bulevar Ibarrilla e Hidalgo) (…) la mayoría de las veces se sienten miradas turbo acosadoras, algunas veces palabras”.
PROVINCIA DE SAN JUAN, VILLAS DE SAN JUAN
Monserrat ha sido acechada las pocas veces que ha salido sola, aunque siempre trata de ir acompañada de su esposo, cuando espera el camión en la avenida Provincia de San Juan, en la colonia Villas de San Juan, siente la mirada de muchos hombres.
“El solo hecho de estar esperando el camión y sentir las miradas o estarte cuidando de personas que se miran sospechosas es muy incómodo, creo que hoy en día ya nada es seguro”.
Los 15 testimonios aquí presentados reflejan el temor que hay en las mujeres al circular por la ciudad, principalmente por ciclovías, calles céntricas y el transporte público. El acoso sexual no tiene horario, relatan.
En León hay más mujeres que hombres, de acuerdo con el censo del Inegi del 2020, son 874 mil 542 mujeres y 846 mil 673 hombres,
De enero a diciembre del 2021, se contabilizaron 30 presuntos feminicidios en Guanajuato, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
PR