Esta vez no hay un candidato para arrasar en las urnas. Rumbo al 2024, no hay en realidad un candidato dominante que sume simpatías y que sea un claro ganador para la Presidencia de la República en México.
No hay un Vicente Fox, como en el año 2000.
No hay un Enrique Peña Nieto, como en el 2012.
No hay un Andrés Manuel López Obrador, como en el 2018.
Ahora solo tenemos aspirantes pequeños, con perfiles bajos, que no emocionan al electorado. De tal forma que tampoco hay un personaje que pueda perfilarse como un claro ganador en el 2024.
A estas alturas, en el 2000, Fox ya traía una inercia ganadora. A estas alturas, Enrique Peña Nieto ya tenía la ventaja a su favor en el 2012. Y a estas fechas, Andrés Manuel López Obrador ya era casi Presidente de México. Ahora, en cambio, no hay un claro candidato.
En Morena, hay cuatro corcholatas con posibilidades: Claudia Sheimbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal. Pero ninguno de ellos es claro puntero. Ni siquiera en Morena está claro.
En los partidos de oposición, está peor.
Santiago Creel quiere ser, pero no conecta con la gente. Lilly Téllez tiene tamaño y capacidad, pero no la quieren dejar competir.
Y todos los demás (Ricardo Anaya, Juan Carlos Romero Hicks, Mauricio Vila, Francisco García Cabeza de Vaca), son de broma.
Y los del PRI, Enrique de la Madrid, Beatriz Paredes, Alejandro Murat y José Ángel Gurría, están muertos, como su partido, pero no quieren aceptarlo.
No hay candidatos fuertes.
Y aún cuando las encuestas le dan ventaja a Morena, en realidad no hay un liderazgo aplastante y contundente como Fox, como Peña Nieto o como Andrés Manuel. Eso abre la posibilidad a que pueda crecerse alguno de los aspirantes pequeños. Al no haber un perfil dominante, la elección abre espacio a que pueda ganar el que haga mejor campaña y el que conecte mejor con la ciudadanía. Ahí está el ejemplo de Nuevo León en el 2021. Samuel García aparecía en tercer lugar al comenzar el proceso electoral y se coló hasta el primer lugar por una serie de circunstancias y por hacer una campaña inteligente y creativa.
Así que nada está escrito. Se solicita un Fox, un Cuauhtémoc Cárdenas o un Maquío.