León-. Esta es parte de la vida de las aves en la presa de El Palote: un águila pescadora eleva con el vuelo con rapidez y cae fugazmente en picada rompiendo la superficie del agua para atrapar un pescado; un grupo de flamencos descansan sobre una de sus patas y una bandada de pelicanos aterrizan extendiendo sus alas después de un largo viaje.
La presa de El Palote es vital para la supervivencia de la avifauna que reside, ya sea de manera temporal o permanente, en este gran embalse y cuya construcción fue para contener la precipitación del agua que baja de los bosques de Sierra de Lobos, desde entonces cada llegan diversidad de especies a buscar refugio y alimento a la presa, un hábitat indispensable que requiere protección y cuidado.
El Parque Metropolitano de León es un Área Natural Protegida estatal (ANP) que es visitada constantemente por fotógrafos y observadores de aves de todo el mundo, su labor fotográfica ha permitido el conocimiento de la diversidad de aves que habitan en la presa de El Palote.
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Luis Mauricio Mena Páramo, mejor conocido como Luis Ave, es fotógrafo, apasionado por la naturaleza, suele caminar en los alrededores del cuerpo de agua con el fin de perpetuar la vida de las aves a través de sus fotografías: alguna rapaz como el Carcara posando sobre la rama de un árbol o en busca de alguna presa o un costurero pico largo buscando alimento entre las piedras a la orilla de la represa. De acuerdo a la plataforma íNaturalist Luis Ave tiene 6,442 observaciones en la presa de El Palote.
En el Área Natural Protegida Parque Metropolitano se han registrado 244 especies, 177 se consideradas aves migratorias. Del total de especies migratorias, aproximadamente, 50 especies son aves acuáticas migratorias y dependen del agua para para poder desarrollarse, estas son aves de las familias de los patos, las garzas, los pelícanos y las gaviotas, informó la Secretaría de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial (Smaot)
El Parque Metropolitano de León brinda hogar, refugio, y alimento, a miles de aves que emprenden el viaje cuando los bosques de Canadá y Estados Unidos empiezan a tornarse gélidos. El biólogo José Augusto Ojeda Orranti explicó que la mayoría de estas especies son migratorias de invierno: “Es decir que durante el invierno llegan a los humedales de México y durante la primavera regresan a los lugares donde anidan como Canadá y Estados Unidos, por lo que en este momento (mes de abril) la mayor parte de las aves acuáticas migratorias ya migraron a sus sitios de anidación en el norte del continente”.
“Es importante mencionar que en el Parque Metropolitano también habitan aves acuáticas residentes, es decir aves que pueden permanecer durante todo el año en un sitio y que necesitan agua para sobrevivir, sin embargo, estas aves son bastante adaptables y pueden realizar migraciones cortas, por lo que estas especies pueden moverse en los diferentes humedales de una ciudad o los alrededores” Precisó José Augusto Ojeda Orranti