León.- En Guanajuato la gente puede llegar caminando a “San Antonio Texas”, también van a “La Nalga” y hay gente que incluso vive en “La Sandía”. Suena raro cuando las personas hablan así, pero no es mentira ni broma. Guanajuato alberga pueblos con los nombres más raros que algunos puedan imaginar.
Uno de los más conocidos es La Sandía, que es una comunidad localizada en el municipio de León en el que viven poco más de 2,000 personas. Hay universidades que tienen más población que este pequeño pueblo en el que son pocos los que terminan su educación.
Y entre los más conocidos está Pelavacas, cuyo verdadero nombre es Los Pinos. Esta comunidad se encuentra en Celaya y aunque no todos la conocen muchos de sus habitantes sí por ser escenario de una disputa armada entre dos cárteles. En enero de 2020 se libró una batalla por el territorio entre el Cártel de Santa Rosa de Lima y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Los Lorenzos eso otro de los que está en la lista de los pueblos con nombres raros. Este municipio tiene 1,300 habitantes y pertenece al territorio de Guanajuato capital. Es un pueblo muy pequeño en el que parece que no hay mucho qué hacer, pero en donde es imperdible hacer montañismo o bici de montaña. Además del nombre de la comunidad, algunas vialidades también se adaptan a su extrañeza guardando nombres como Mesacuata o Chocolate.
A partir de aquí, los nombres se van poniendo más extraños, pero lo mejor viene al final. Estancia de los Sapos, que está en el municipio de León tiene 772 habitantes y se encuentra a solo 36 minutos de la cabecera municipal. De las cosas que más destacan es su peligrosa presa donde se han registrado varios ahogamientos.
Y en Salvatierra, una de sus comunidades lleva el nombre del primer líder del movimiento agrario en Guanajuato. Gervasio Mendoza era originario de Valle de Santiago, peleó por la recuperación de las tierras de los campesinos en 1924 y murió 5 años después en la guerra cristera.
Y como queriendo imitar el nombre del personaje Cyrano de Bergerac, en Yuriria, justo en el límite con Michoacán, se encuentra Cerano. Este municipio no solo tiene su nombre extraño, sino el de sus colonias y barrios que fueron bautizadas con nombres como El Rodeo, Tingüindín, La Secundaria y La Garita. Su historia es una de las más interesantes, pues fue fundada por un grupo Purepecha y luego arrebatada por misioneros españoles que terminaron vendiendo la tierra a un italiano originario de la ciudad Cerano.
Pero antes de terminar, estos son los 3 pueblos con los nombres más extraños de Guanajuato
San Antonio Texas. Así, sin ni si quiera una “coma”, es el nombre de este pueblo localizado en el municipio de Silao en el que habitan 2,500 personas. Recientemente apareció en los titulares de algunos medios por ser la comunidad donde ocurrió un accidente con pirotecnia que dejó como saldo 4 lesionados, entre ellos un menor de edad.
En segundo lugar está La Nalga Ventura cuyo verdadero nombre es Rancho de Guadalupe y está ubicado en Valle de Santiago y cuenta con poco más de 200 habitantes.
Y por último: La Chingada que está en San Miguel de Allende, pero la historia de esta comunidad vale la pena contarse en un texto aparte, así que mantenerse atentos a la siguiente publicación de La Silla Rota.