Celaya, Guanajuato.- En medio de un ambiente triste, sombrío, con una mezcla de coraje y exigencia de justicia hacia las autoridades, familiares y amigos dieron el último adiós a la buscadora Teresa Magueyal Ramírez de 66 años, tras ser asesinada por sujetos en motocicleta el martes pasado a unos metros de un preescolar.
Poco antes del mediodía, decenas de personas se dieron cita en la parroqua de San Miguel Arcángel en esta comunidad en la zona norte de Celaya, en donde al final sus seres queridos aprovecharon para observarla por última vez y despedirse de ella. Después emprendieron la caminata hasta el panteón de la comunidad donde depositaron su cuerpo.
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Teresa Magueyal era integrante del grupo de madres buscadoras “Una Promesa Por Cumplir”, ya que desde el 2020 había iniciado la búsqueda de uno de sus hijos que desapareció en 2020 cuando salió a buscar víveres para darle de comer a su hija en una tienda cercana. Nunca más regresó.
Desde ese entonces, Teresa lo buscó desesperadamente y se incorporó al colectivo para ayudar y recibir ayuda a su causa.
El martes de esta semana, dos sujetos a bordo de una moto se le acercaron cuando ella iba en sus bicicleta y le dispararon en varias ocasiones y escaparon. Ella quedó tendida en el piso malherida. Cuando llegaron los servicios de emergencia ya no contaba con signos vitales.
Su muerte causó indignación entre sus compañeras del colectivo, e incluso el asunto llegó hasta el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, quienes exigieron a las autoridades estatales dar con los responsables y presentarlos ante la Ley.
Con su muerte, dejó en la horfandad a 5 hijos más y varios nietos. Sus compañeras del colectivo han prometido que seguirán buscando a su familiar desaparecido en su ausencia.
KD