ECONOMÍA

De Silao, el origen desconocido del Palacio de Hierro

En la casa número 18 de la calle 5 de mayo, un niño de nombre Raúl de ascendencia francesa nació y creció. Es padre de quien fue uno de los hombres más ricos de México, Alberto Bailléres Gonázalez, dueño del Palacio de Hierro

Escrito en GUANAJUATO el

Silao.- El coloso Palacio de Hierro se erige en medio de ciudades caóticas como Monterrey y Ciudad de México. Ahí, en medio de las localidades con más poder económico, está la tienda departamental donde solo un sector de México puede consumir y que, paradójicamente, tiene su origen en una ciudad mediana de Guanajuato: Silao de la Victoria.

En la casa número 18 de la calle 5 de mayo, un niño de nombre Raúl de ascendencia francesa nació y creció. Raúl Bailléres, padre de quien fue uno de los hombres más ricos de México, Alberto Bailléres Gonázalez, se crío en la entonces pequeña ciudad de Silao.

La familia no era del tipo citadina y, aunque tenían su hogar en la zona urbana, se dedicaban al campo, de acuerdo a la cronista de Silao, Paola Trujillo. El padre de Raúl, también de nombre Alberto, era un francés migrante adinerado que se convirtió en campesino.

Crédito: Cuartoscuro

Y aunque si historia suene como la de una familia migrante común de la época, una situación política en el país cambió su rumbo cuando el periodo de bonanza que llegó con el porfiriato impulsó su poder económico. Se dedicaron a la agricultura y al comercio y fundaron su hacienda en Rancho Nuevo, relata la cronista.

Su vida en la pequeña ciudad de Guanajuato terminó a sus 20 años, cuando en 1915, con el apoyo de su padre Alberto, se mudó a Ciudad de México. Se dedicó a la iniciativa privada creando instituciones financieras, industriales y culturales. Allá, con una carrera ya construida, promovió la compra de empresas de origen extranjero y apoyó la estabilización de la nación después de la Revolución.

Pero sus raíces guanajuatenses lo llamaron y se terminó casando con un joven de León llamada Celia González, con quien tuvo cuatro hijos, Raúl, Alberto, Celia y Susana. El segundo fue el genio económico que construyó el Palacio de Hierro.

Crédito: Crisóforo Martínez

“Una mujer hermosa, de una gran personalidad y sencillez”, describió alguna vez Alberto sobre su madre leonesa.

El empresario Alberto Bailléres, de ascendencia guanajuatense nació el 22 de agosto de 1931 en la Ciudad de México, donde fue criado de una manera tradicional y católica, muy de acuerdo al pensamiento de Guanajuato.

Estudió la licenciatura en Economía, y siete años después recibió el título profesional del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), universidad fundada por su propio padre Raúl Bailléres. El primer trabajo de Alberto Bailléres fue como vendedor en la Cervecería Cuauhtémoc, luego fue gerente de la empresa. Alberto siempre hablaba de negocios, era su principal tema de conversación.

Lo demás es historia de un coloso bautizado Palacio de Hierro, pero que tuvo sus raíces en Silao de la Victoria, Guanajuato.