Celaya-. A la una de la madrugada de este martes se cumplieron 15 años de las explosiones en los ductos de Pemex en la zona sur de Celaya, al pie del Libramiento Sur y a unos pasos de la comunidad de Crespo. Las llamaradas alcanzaron más de 250 metros de altura y eran visibles desde cualquier punto del municipio.
La contingencia provocó pánico entre buena parte de la población, quienes a esa hora de la madrugada tomaron sus cosas y huyeron hacia otros municipios. Hubo quienes llegaron hasta la Ciudad de México y Toluca para resguardarse con familiares, pues había el falso temor que el fuego podría correrse por los ductos y llegar a los hogares y fábricas.
Protección Civil y Bomberos de Celaya acudieron en primera instancia, pero nada pudieron hacer. Afortunadamente no hubo víctimas mortales aunque la comunidad de Crespo sí fue desalojada por la fuerte radiación de calor que emanaba de la zona de la fuga, a menos de 300 metros de distancia.
Durante dos días ardió la fuga hasta que se consumió el combustible en el interior. Una vez apagada acudieron a la zona personal de seguridad de ductos de Pemex, autoridades de la entonces PGR, estatales y municipales. Ahí los funcionarios de Pemex examinaron la zona y dieron un primer informe: no fue un accidente, sino que había sido provocado pues en la parte de abajo de los ductos había un pequeño cráter, lo cual evidenciaba una explosión que reventó los tubos.
Las autoridades de ese entonces no daban crédito. El presidente municipal Gerardo Hernández y el director de Caminos y Puentes Estatales, José Rivera se miraban atónitos al informe de las autoridades.
Dos días después, el Ejército Popular Revolucionario (EPR) se adjudicó el atentado no nada más en Celaya, sino también en ductos de Pemex en Salamanca, Valle de Santiago y Querétaro donde también colocaron bombas, a manera de protesta hacia el gobierno del entonces presidente Felipe Calderón.
IO