Guanajuato.- Debido a que a través del testamento se heredan derechos y obligaciones de la persona titular, entre ellas, están las deudas que deja quien fallece, mismas que pueden venir incluidas en el testamento.
De acuerdo con el doctor Raymundo Francisco Olmedo Rivera, coordinador de la Maestría en Derecho Constitucional y Amparo, de la Universidad Ibero León, quien fallece y deja un testamento, no solamente hereda derechos sino también obligaciones.
“Con las obligaciones me refiero a que con mi muerte no se terminan las obligaciones que yo tenía, por ejemplo, con la Caja Popular, o con mi compadre”, dijo.
“Yo ya no voy a estar, pero hay alguien que sí va a estar representándome, pero mi sucesión, así se le llama, mis bienes, van a estar representados por el albacea, y él va administrar y a otorgar los bienes que o dejé, él va a pagar mis deudas, etcétera”.
Señaló que dicho representante se denomina como albacea, y se determina directamente en el testamento que deja el titular.
“El albacea va a ser quien yo decida en el testamento, pero el testamento va a ser aprobado por el juez en una junta de herederos, es decir, que deben de estar de acuerdo o nombrar uno.
“Las deudas pueden ser de cualquier tipo y hasta que alcance la masa hereditaria, que es los bienes, los derechos y las obligaciones”, comentó.
Esto, por ejemplo, no aplicaría en casos de créditos de casas que ya están contratados con un seguro de vida, los cuales absorben la deuda y se libera a los familiares.
El Contar con un testamento otorga a las familias certeza jurídica, pero, sobre todo, que la unidad familiar permanezca y no haya una desintegración por no contar con una última disposición.
De acuerdo con el doctor Raymundo Francisco Olmedo Rivera, coordinador de la Maestría en Derecho Constitucional y Amparo, de la Universidad Ibero León, no contar con uno, puede provocar futuros conflictos innecesarios.
“Es importante quitarnos la idea de la cabeza de que, si haces un testamento, te vas a morir. Hacerlo nos permitirá dejar algo muy importante a nuestra familia que es la certeza de que los bienes, los derechos las obligaciones, que en vida pude poseen, van a tener el destino que yo quería cuando yo ya no estuve.
“Permite también la unidad familiar. Hay veces que las familias se desintegran por no tener una última disposición, en este caso el testamento, y provoca que haya conflictos innecesarios”, explicó.
El académico manifestó que en el documento del testamento que se hace ante un notario público se disponen derechos y obligaciones.
Esto quiere decir que el patrimonio que se puede ver y el que no se puede ver, es decir, el patrimonio tangible e intangible de una persona, entran al documento.
Bajo ciertas condiciones, las personas que dejan un testamento pueden otorgarle estos derechos y obligaciones a quienes deseen, agregó el abogado.
KD