León.- En la actualidad para los ahorradores existen varias opciones además de los bancos, una es las cajas de ahorro que otorgan crédito y ofrecen mecanismos de inversión.
Señala la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), que las Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo, llamadas cajas de ahorro, son sin fines de lucro que tienen por objeto realizar operaciones de ahorro y préstamo únicamente con sus socios.
Las Cajas de Ahorro autorizadas, son una alternativa muy demandada, ya que además de ofrecer servicios como el ahorro, inversión y créditos a la población común, se ubican mayormente en localidades alejadas de las zonas urbanas o localidades medianas y pequeñas que no son atendidas por la banca tradicional. Algunas de ellas cuentan en la actualidad con aplicaciones digitales, tarjetas de crédito y pago de remesas.
“Cuentan con un seguro de depósito para proteger el patrimonio de sus ahorradores (similar a los bancos), son uno de los mejores medios para promover el uso de servicios financieros formales por parte de grupos vulnerables o excluidos, principalmente para las personas de bajos ingresos, mujeres y/o micronegocios. Al cierre del 2021 atendían a poco más de 13.2 millones de personas”, señala la Condusef.
Para tener acceso a los servicios, las personas deben de ingresar como socios, lo cual les da derecho a tener una cuenta de ahorro y crédito.
Para ingresar como socio se debe de realizar una aportación conocida como parte social, la cual determina cada cooperativa, y se queda en la cuenta del socio.
Al motivo que la persona decide retirarse se le regresa dicho monto, y las cuentas quedan canceladas, por lo que no está clasificada como un cobro.
A decir de Lucy Zermeño, gerente de mercadotecnia de Coop, Cooperativa Financiera, la empresa está regulada ante la Comisión Nacional Bancaria, y leyes que regulan los servicios financieros.
“Es como una sociedad donde sus miembros actúan para beneficiarse entre sí. Todos sus miembros actúan para beneficiarse, esto es, si alguien tiene dinero y quiere ahorrar, lo puede hacer, pero si otro de sus miembros necesita un crédito, ese dinero que la otra persona ahorró, sirve para otorgarle a la persona que necesita el crédito”, dijo.
“Es sin fines de lucro. Obviamente, con todo el dinero que se mueve, tiene que haber alguna ganancia para sostener a la cooperativa, pero todo eso se vuelve a reinvertir en beneficio de la cooperativa y de los mismos socios”.
Señaló que la cooperativa tiene la obligación por ley de contar con un fondo que garantice que los recursos de los socios están seguros.
“Estos fondos son los que nos exige la ley, nosotros tenemos que exponer y contar con varios fondos para que los ahorros estén protegidos”, comentó.
Agregó que los socios tienen algunos beneficios de pertenecer a este tipo de sociedades como un seguro para no heredar una deuda por un crédito, en caso del fallecimiento del titular, hasta cierta cantidad.
Además, los ahorros obtenidos en la cuenta se le otorga a sus beneficiarios, y adicional, otra cantidad.
CM