Salamanca, Guanajuato-. Ambientalistas y expertos en energías alternas declaran las causas de la contaminación en Salamanca. Explican, se debe a la quema de combustóleo un proceso altamente costoso y cuyos residuos son contaminantes.
¿Para qué se quema el combustóleo?
La licenciada y experta en energías alternas, Paula Escalante, señala que la razón por la que están quemando combustóleo en la Refinería Antonio Amor en Salamanca es para alimentar turbinas que al moverse con el humo generado producen energía. En la Central Termoeléctrica de Salamanca (CTS) se utiliza el mismo proceso, estas termoeléctricas pertenecen a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que distribuye la electricidad en la ciudad pero que en su proceso genera grandes concentraciones de SO2, en pocas palabras, contaminación.
Humo negro en la refinería de Pemex en Salamanca.
¿Qué es el combustóleo?
La licenciada en energías alternas, explica que el combustóleo proviene de la refinación del petróleo crudo, o sea del proceso que se utiliza para la creación de gasolina.
Esta sustancia que “sobra” en el procedimiento no es viable para ser vendida, pues ya son pocos los países que la utilizan para la generación de energía por ser altamente contaminante. Para darle un uso, al final, el combustóleo se quema y el humo que produce genera energía, pero también altas cantidades de dióxido de azufre (SO2).
“Todos lo químicos que se utilizan en este proceso que, de por sí ya es contaminante, son tóxicos y aumentan la contaminación”
Todo este proceso es altamente costoso. “La producción de un megawatt hora con combustóleo fue de 138 dólares” informó Greenpeace de acuerdo con la información de Costos y Parámetros de Referencia para la Formulación de Proyectos de Inversión en el Sector Eléctrico (COPAR) en el 2019.
La CTS está obligada a informar de las emisiones contaminantes que producen, pero a pesar de las varias solicitudes de información de operación que el Gobierno Estatal ha emitido, no han tenido respuesta. Las autoridades ambientales del estado requieren conocer de las concentraciones e índices de dióxido de azufre que generan para advertirle a la población de la calidad del aire e invitarlos a tomar precauciones.
Todavía el domingo, la termoeléctrica de Salamanca no emitió respuesta ante la solicitud de información. Ese fin de semana las concentraciones de SO2 provocaron que la ciudad casi entrara en precontingencia ambiental.
Desde hace años los ciudadanos de esta entidad viven contingencias ambientales recurrentes, la primera del año fue justo el primero de enero.
Ayer por la tarde se aprobó la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, que tiene que ver con la compra de energía de la CFE .
PR