Salamanca, Gto.- En mayo de 2018, el reportero Israel Vázquez Rangel escribió una nota sobre las condiciones de la lucha libre en Salamanca.
En su información describía cómo un grupo de luchadores se esforzaban por organizar espectáculos gratuitos en distintos puntos de la ciudad. Relataba en su texto cómo estos deportistas viajaban a las arenas de otros municipios de Guanajuato gestionando sus propios gastos y agendando sus peleas.
De acuerdo con la información publicada entonces por Israel, había al menos 30 luchadores que además de pelear en las arenas, se esforzaban por promover este deporte. Uno de ellos, mencionado en la nota, se hacía llamar “Chico Salmantino”.
Su nombre es José Luis y un par de años después a la publicación de la nota se convirtió en el presunto asesino del autor: Israel Vázquez Rangel, periodista atacado a balazos mientras cubría el hallazgo de restos humanos en una colonia de Salamanca.
Israel Vázquez conoció a su asesino dos años antes de que este presuntamente atentara en su contra.
Durante 2016 y 2018, las redes sociales de José Luis reflejan a través de fotografías y vídeos una vida dedicada a la lucha libre, a estar con sus familiares, amigos y su novia. Compartía los carteles en los que aparecía su nombre de luchador, anunciando las próximas peleas.
De pronto, en 2020, las fotografías ya no eran recurrentes. Por el contrario, se leen mensajes de arrepentimiento y desilusión. Algunas publicaciones dedicadas a personas que fallecieron. La mayoría de actividad en Facebook compartía narcocorridos.
“Siempre me he preguntado de este maldito vicio y de José Luis. Si José Luis tenía sueños, tenía metas en la vida. Ilusiones. Solo pasaron las cosas y no pude controlarlas. Que la vida que yo quería no pude hacerla”, escribió José Luis hace tres meses.
DE LUCHADOR A SICARIO
“Chico Salmantino” nació el 2 de diciembre de 1994 en Salamanca.
Con un peso de 70 kilogramos y un metro 74 centímetros de altura, se lee en su ficha de luchador, obtuvo el título de Campeón de Parejas junto al Astro Infernal. Sus maestros fueron Rey Muerte y Séptimo Dragón (luchador salmantino de alcance internacional).
El debut de José Luis fue en 2006. Pero viejas aflicciones desde pequeño pudieron arrebatarle el sueño en el ring y llevarlo al mundo de las drogas, platicó un viejo compañero de cuadrilátero sobre el pasado de “Chico Salmantino” a La Silla Rota.
“Sentí feo y a la vez lástima. No creo que el haya hecho eso. Era más cobarde que nada, para empezar evitaba problemas, aunque se metía en ellos muy fácil. Sí tenía un problema de drogadicción y por juntarse con malas juntas, yo siento que lo pusieron”, recordó el luchador que prefirió mantenerse en anonimato.
El viejo compañero de José Luis se dijo triste ante su captura. Apuntó que aunque no entrenó mucho con él, por la diferencia de edad, sí le compartió conocimiento y experiencia con el ahora capturado y en proceso.
“No luché con él, pero si le compartí mucha experiencia. Él no era constante en los entrenamientos. Entrenaba cuando quería”, dijo el antiguo compañero.
El viejo amigo de Jose Luis, le perdió la pista al joven ex luchador desde hace unos tres años.
Lo último que supo de él es que estaba anexado. Y ahora, la noticia de su captura lo tiene triste y desconcertado. Difícil precisar cuándo comenzó la caída libre de José Luis.
SP/AR