León, Guanajuato.- En un recorrido por los escombros de la antigua y abandonada discoteca "OSSYS" un perro vigila y ahuyenta a los visitantes desde el interior del lugar. Entre más te acercas, el perro aumenta su intensidad.
Por la parte dónde antes era la barra de bebidas, se escuchan pasos y otro perro intentando sorprenderte. El equipo de La Silla Rota, intentó adentrarse en el interior de la pirámide. Cuando el perro emitió un chillido de dolor, cómo si alguien detrás del muro le estuviese deteniendo para evitar que hiciera ruido y revelara su posición.
El reportero tuvo que salir rápidamente para evadir la mordida del canino o alguna amenaza inminente. Pero al intentar volver para concluir la exploración, un grito al fondo resonó: "Aléjate", fue el mensaje; dejando claro que el reportero estaba siendo observado.
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Al observar a detalle, la pirámide tiene pertenencias personales de alguna persona esparcidas por todo el lugar, los sonidos de los pasos que vienen desde el sótano evidencian esto. Es seguro que alguien tiene como base esta pirámide, que en su interior, cuenta con pasillos laberinticos en los que podrías perderte o quedarte encerrado fácilmente.
La pirámide no tiene alguna restricción de acceso o barda que impida a cualquier persona su ingreso, sin embargo, la exploración de la misma es compleja debido a sus residentes de comportamiento hostil.
"Son vagabundos o drogadictos, ese tipo de personas entran y salen de la pirámide, de por si la construcción es muy grande, tiene habitaciones y es fácil que alguien pueda esconderse ahí; si te fijas bien, hay partes del lugar que tiene hoyos gigantes que han ido formando estas mismas personas sin hogar, las han convertido en sus madrigueras", relató un residente de la zona.
La discoteca OSSYS fue un emblemático centro nocturno en León, Guanajuato, que operó durante la década de 1990. Su estructura distintiva, con forma de pirámide, se convirtió en un ícono de la vida nocturna leonesa. Ubicada en el bulevar Juan Alonso de Torres, en la colonia San José de las Piletas, OSSYS ofrecía a los jóvenes de la época un espacio para bailar al ritmo de artistas como Laura Branigan, David Bowie, Michael Jackson y Madonna.
Con el paso del tiempo, la popularidad de OSSYS disminuyó, y el lugar cerró sus puertas. En noviembre de 2020, el edificio sufrió un incendio que consumió gran parte de su estructura. Las autoridades determinaron que el fuego fue provocado, pero hasta la fecha no se han identificado a los responsables.
Actualmente, el inmueble permanece en estado de abandono, con evidentes signos de vandalismo y deterioro. La maleza crece en el suelo y los muros están grafiteados, lo que refleja el olvido al que ha sido sometido.
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