Gabriel Moreno Bernat, descendiente del icónico comediante mexicano Mario Moreno “Cantinflas” e hijo de Mario Moreno Ivanova y Sandra Bernat, no ha tenido una vida fácil. Desde temprana edad, lidió con fuertes problemas de adicción que lo llevaron a vivir en condiciones extremas, durmiendo en las calles y dependiendo de la caridad para sobrevivir.
Su camino en las adicciones comenzó a los 16 años, cuando su padre, le ofreció por primera vez un cigarro de marihuana. A lo largo de los años, enfrentó numerosas pérdidas: su hermano en 2013, su padre en 2017, y recientemente su madre en 2024. Cada una de estas tragedias lo empujó nuevamente al abismo del consumo.
En 2021, ya enfrentando una dependencia tanto a las drogas como al alcohol, tuvo varios intentos fallidos de rehabilitación en clínicas de México y Estados Unidos. Incluso huyó de la clínica de Julio César Chávez y pasó tiempo en las calles, lavando autos para poder comer. Con el tiempo, regresó voluntariamente al centro y logró estabilizarse.
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Moreno Bernat recordó con dolor los momentos en los que vivió en situación de calle.
“Era un infierno. Pasaba días sin comer ni dormir. Todo el dinero que conseguía lo usaba para drogarme”, relató.
Uno de los episodios más duros fue la muerte de su hermano Mario en 2013, quien siempre fue su mayor apoyo.
“Él me animaba, me decía que era el hombre de la casa, pero esa responsabilidad me asustó. Me dolió mucho perderlo”, expresó.
Su última recaída ocurrió en 2024, cuando falleció su madre. La noticia le fue comunicada mientras estaba internado en un centro de rehabilitación en Tijuana, lo que lo afectó profundamente.
“Fue un golpe durísimo. Me quedé paralizado durante dos días y terminé volviendo al consumo”, confesó Gabriel.
Tras una sobredosis que casi le cuesta la vida, Gabriel decidió cambiar.
“Vomité, sangré, estaba en estado de shock y había tomado demasiadas pastillas. Ahí fue cuando supe que debía hacer un cambio radical”, declaró en una entrevista para el programa “De primera mano”.
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¿Qué pasó con el nieto de Cantinflas que vivía en la calle por sus adicciones?
En una reciente entrevista con TVNotas, Gabriel Moreno Bernat, compartió que ha logrado mantenerse alejado de las drogas por más de un año y explicó cómo ha sido ese proceso de transformación.
“Con el respaldo de mis amigos, decidí retomar el control de mi vida. Hace tres meses salí de la clínica de rehabilitación de Julio César Chávez y desde entonces me he mantenido enfocado en mi recuperación. Me alejé de personas que no me hacían bien y he vuelto a trabajar en lo que me apasiona. Estoy agradecido con Dios por estar vivo y por esta nueva oportunidad”, relató.
Durante su proceso de rehabilitación, participó en espacios donde los pacientes comparten sus historias, conocidos como “tribunas”.
“Estar ahí es como hablar directamente con Dios. No puedes ocultarle nada. Ahí fue donde decidí no mentirme más. Había consumido marihuana, crack y alcohol. Hoy le pido a quienes pasan por esto que reaccionen antes de que sea demasiado tarde”, dijo.
Agradeció profundamente al boxeador Julio César Chávez, quien lo apoyó sin pedir nada a cambio.
“Me ofreció su ayuda sin fijarse en quién fue mi abuelo. Me dio la oportunidad de trabajar como guardia en su clínica y me trató como parte de su familia. Me enseñó a ser humilde y fuerte”, comentó.
Actualmente reside en Acapulco, donde colabora con el influencer Mostacho en la creación de contenido y también trabaja en un hotel junto a un amigo.
“Mantenerme ocupado es clave para no recaer. Si dejo mi mente libre, corro el riesgo de volver atrás”, afirmó.
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Respecto a temas legales y familiares, prefirió no hablar sobre la herencia de su abuelo, explicando que los abogados están revisando el caso. Sin embargo, destacó que mantiene una buena relación con su hermana.
“Nos hablamos todos los días y nos apoyamos mucho”.
Hoy, con más de un año limpio, tiene como objetivo inspirar y apoyar a otros jóvenes que enfrentan problemas similares al suyo.
