El año pasado la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebró 75 años de existencia desde aquél 1948 cuando los países se unieron y fundaron esta organización para promover la salud, preservar la seguridad del mundo y dar atención a los grupos vulnerables con el objetivo de que todas las personas puedan alcanzar el grado más alto de salud y, consecuentemente, de bienestar.
En este lapso la OMS ha tenido importantes acciones en materia de salud entre las que destacan “… la erradicación de la viruela; la reducción de la incidencia de la poliomielitis; una mayor cobertura de la vacunación infantil; descenso de la mortalidad materna, la mejora de la salud y bienestar de millones de personas…”, entre otras.
Bajo este contexto, cada 7 de abril se conmemora el Día Mundial de la Salud. Para este 2024 la OMS preocupada porque el derecho a la salud de millones de personas está cada vez más amenazado ha propuesto el lema: “Mi salud, mi derecho” en el marco del Día Mundial de la Salud, con el objetivo de defender el derecho de la población mundial a su salud, así como para contar con aire limpio, agua potable, buena nutrición, vivienda de calidad, condiciones ambientales óptimas, trabajos decentes y no discriminación.
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Asimismo, la OMS reporta el estancamiento del progreso de la salud en general en el mundo e indica alertas sobre la creciente amenaza de enfermedades no transmisibles: cambio climático y los costos de la pandemia por covid-19 principalmente.
Así lo demuestran las estadísticas. Por ejemplo, las enfermedades no transmisibles siguen registrando la mayor carga de morbilidad en el mundo. “De 2000-2019 la cantidad de muertes aumentó de 31 millones a 41 millones.”
En México, de acuerdo con el INEGI en una publicación de julio de 2023, las enfermedades en 2021 que más afectaban a la población de 53 años y más fueron la presión arterial (43.3%), diabetes (25.6%) y artritis (10.7%).
Del mismo modo, las personas de 53 años y más, el 62.3% percibía un estado de salud de regular a malo.
A estos datos hay que añadirle algunos registros preocupantes de nuestro país. En México el 70% de las y los mexicanos padece sobrepeso; la tuberculosis se ha presentado como una enfermedad infecciosa importante seguida de los padecimientos de enfermedades del cerebro (cefalea tensional, cefalea migrañosa, cefalea crónica diaria, epilepsia, enfermedad vascular, demencia, Parkinson y esclerosis múltiple). Tan solo en 2020 la Cefalea tensional registró más de 81 millones de casos.
Por su parte, en las Estadísticas de Defunciones Registradas de acuerdo con el INEGI a finales de enero pasado, reporta que, de enero a junio de 2023, “… las defunciones por enfermedades del corazón fueron la primera causa de muerte a nivel nacional con 97,187 casos…”; seguida de la diabetes mellitus, con 55,885 casos y tumores malignos con 45,409 casos.
Para el caso de nuestro Estado de México, de acuerdo con registros administrativos del INEGI de 2020, además del covid-19, las principales causas de muerte de la población fueron: enfermedades del corazón, diabetes mellitus, tumores malignos e influenza y neumonía.
Respecto a la obesidad, nuestra entidad ocupa el segundo lugar a nivel nacional en prevalencia en adultos y rebasa la media nacional respecto a la prevalencia de obesidad infantil.
Esto nos permite ver que es necesario que nuestro sistema de salud cuente, entre otras propuestas, con las siguientes:
- Diagnósticos actualizados a nivel nacional y entidad federativa, sobre el estado de salud de la población.
- Fortalecimiento de la infraestructura hospitalaria.
- Mayor apoyo a los centros de investigación de enfermedades que afectan a la población.
- Dotación suficiente de medicamentos para atender la salud de la población, entre otras.
México y sus gobiernos en sus tres niveles, así como los cuerpos legislativos tanto federal como los locales, deben ser un referente obligado del cumplimiento constitucional del derecho a la salud que esté acorde con las principales directrices e indicadores de la OMS, con la intención de que la población tenga una vida plena, próspera y productiva.