DERECHOS HUMANOS

A 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos

La Declaración Universal de los Derechos Humanos ha sido traducida a más de 500 idiomas. | Ingrid Schemelensky

Escrito en OPINIÓN el

La Declaración Universal de los Derechos humanos fue promulgada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en París, un 10 de diciembre de 1948 a través de su resolución 217 A (III) en donde, en su preámbulo determino que “… la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana;”

La Declaración conformó, por primera vez, los derechos considerados fundamentales, es decir, aquellos que gozan del máximo nivel de protección para las personas, mismos que se rigen por ser inviolables e irrenunciables y se basan en proteger la integridad y dignidad de las personas.

Asimismo, la Declaración integrada por representantes de todas las regiones del mundo consta de 30 artículos y ha sido traducida a más de 500 idiomas y, entre sus principales fortalezas está en la de considerar a todos los seres humanos como “… libres e iguales en dignidad y derechos y dotados como están de razón y conciencia…” debiendo para ello contar con un comportamiento fraternal entre ellos.

La misma Declaración determina que “Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión pública o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición…”.

De igual forma la Declaración considera que todo ser humano debe contar con el pleno reconocimiento de su personalidad jurídica, la protección de la Ley, a la protección contra la discriminación, derecho a la igualdad, a la vida privada, su familia; ninguna persona debe ser objeto de ataques en su honra o reputación; derecho a la circulación libre y  a elegir su residencia; derecho a una nacionalidad, a la propiedad, a no ser privado arbitrariamente de su propiedad; derecho al libre pensamiento, conciencia y de religión; derecho a la libertad de opinión, de reunión o pertenencia a alguna asociación u organización.

Asimismo, resaltan los derechos de toda persona a participar en el gobierno de su país, a condiciones de igualdad, a la seguridad social, a la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, derecho al trabajo, a una remuneración equitativa y satisfactoria, a la educación, al descanso y disfrute del tiempo libre, entre otros.

Por ello, a 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos podemos afirmar que ha sido un documento rector que ha orientado constituciones políticas, normas secundarias y directrices de sistemas políticos que han dado como resultado la protección de los derechos fundamentales de hombres y mujeres que conviven las distintas sociedades del mundo.

Cuando fue adoptada la Declaración Universal de los Derechos Humanos en 1948, contaba con tan solo 58 miembros de las Naciones Unidas, de donde originalmente solo 26 estados miembros habían firmado dicha Declaración.  Hoy, más de 190 naciones han suscrito la Convención y ratificado los tratados jurídicamente que vinculan los principios de esta Declaración

Es importante referir que, a 75 años de la Declaración, diversos países como México, han potenciado otros derechos tales como el del principio de paridad de género que busca establecer una igualdad sustantiva, o bien, la prevención, atención y sanción de la violencia política contra las mujeres en razón de género.

México, como parte integrante de las Naciones Unidas tienen un compromiso con los principios de esta Declaración que le han dado a la población, protección de su vida, de su seguridad, de su salud, de su educación, prosperidad y desarrollo que constituye el principio básico de cualquier nación democrática como la nuestra.

 

Ingrid Schemelensky

@IngridKSC