MADRID

El profesor en su hábitat

El senador, Ricardo Monreal, en su encuentro con estudiantes de origen mexicano de la Universidad Complutense de Madrid

Créditos: Ricardo Monreal @RicardoMonrealA
Escrito en NACIÓN el

Esta vez no fue en el recinto del Senado, ni en tribuna política alguna. Por momento pudo haberse asemejado al aula, allí donde el senador, Ricardo Monreal, puede sentir la vibra de su otra pasión, además de la política: La docencia.

De hecho, sigue fungiendo como profesor de Derecho Constitucional en la UNAM.

No obstante, a prudente distancia de claustro alguno, la excusa fue el encuentro que los estudiantes de origen mexicano de la Universidad Complutense de Madrid, habían organizado para conocer el pensamiento de Monreal en temas centrales del acontecer mexicano.

Bien temprano, para un domingo, Monreal se encontró con decenas de historias y de vínculos con el país. Mexicanos, alemanes o españoles, hijos de mexicanos, extranjeros que vivieron en la Ciudad de México y a los que México se les metió en el alma. Coordinados por el secretario Técnico del Senado, José Manuel Del Río, se fueron presentando de a uno, contando los esfuerzos que muchos de ellos tuvieron que hacer, primero para estudiar en el país, sin contar con los medios necesarios, luego poder continuar con una maestría aquí, en España, como pequeñas muestras de un universo de jóvenes que buscan un escenario que varias generaciones anteriores parecen haberles negado.

Estudiantes de postgrado, en su mayoría, en diferentes disciplinas, fueron lanzándole preguntas al senador, como si fuera un político en plena campaña. El propio Monreal lo reconoció. “El país está polarizado y las campañas con vistas a las elecciones se han adelantado casi un año”.

Entre café y café, fue un joven ingeniero, con casi una década viviendo en Madrid, “después de haberme ido de mojado a los Estados Unidos y venir de mojado aquí”, que abrió la cesión de preguntas al ex gobernador de Zacatecas, señalando la necesidad de unificar a “los dos Méxicos”, no sólo por la grieta política que vive el país, sino también por las diferencias sociales, políticas y de oportunidades “para unos y otros”.

“Yo me inclino más por la diversidad. México vive desde hace décadas un proceso de desigualdad que se ha ido acentuando. Hay que trabajar y mucho, y respetar la diversidad”, explicó Monreal quien recordó la marcha de hoy en México como la de la semana anterior,  en defensa del INE, por lo que llamó a “respetar todas las opiniones”:

 

La desigualdad por un lado y todo lo que genera esa desigualdad. Por ejemplo la carencia de apoyo a la cultura por parte del gobierno, que remarcó Paula, una estudiante de actuación, los temas de género, y el rol de la mujer, el flagelo de la seguridad que atraviesa a buena parte del país, y cómo lidiar contra las imperfecciones de la obra pública, tema por el que hizo caminar sus inquietudes un estudiante de Ingeniera.

Monreal fue respondiendo de a una. Pero puntualizó en los tres grandes problemas de México. “Una asignatura pendiente que es la inseguridad pública que se fue deteriorando en los últimos 25 años. El presidente López Obrador recibió un país muy difícil. Yo vengo trabajando a su lado hace 26 años y creo que no valoramos o no medimos el enorme impacto que la inseguridad pública ha causado en el país. Territorios completos bajo control,  con la presencia muy fuerte de la delincuencia organizada. No valoramos con suficiente fuerza lo que había pasado en los últimos 20 años”.

“Ahora el presidente de la República modificaciones a la Constitución para que las fuerzas armadas operen en la seguridad pública, y hay un gran debate. Es el tema más importante que tenemos ahora. Hoy voy a tratarlo con un grupo de inversionistas que quieren invertir en México y vamos a abordar este tema. Se ha creado la Guardia Nacional, que se está consolidando. Este será un proceso lento porque se dañó mucho el tejido social y por eso la solución no será de un año hacia otro”.

 

Coincidió con el estudiante que observó las irregularidades en las obras de ingeniería civil, y rescató “la excelencia de la ingeniería mexicana”, para marcar diferencias con el ingreso de las Fuerzas Armadas en el sistema de obra pública.

Antes de cerrar el encuentro con los jóvenes, se refirió a los problemas ambientales que podría ocasionar la construcción del Tren Maya, una de las inquietudes planteadas en las preguntas.

“Uno de las grandes preocupaciones que tiene el mundo es el cambio climático. Es una gran preocupación de ustedes, los jóvenes porque nuestra generación no ha hecho nada al respecto. Estuvimos dedicados a un modelo de industrialización salvaje destruyendo, ríos, selvas y les tocará a ustedes y a sus hijos, enfrentarlo. Estamos trabajando a nivel legislativo para reducir el daño y mañana será uno de los temas a abordar con los parlamentarios españoles”, argumentó.

La agenda (con reuniones con empresarios por la tarde) encendió la alarma de la premura y así el encuentro se fue hacia él final. Una suerte de preámbulo en su propio hábitat, para Monreal —antes de  participar mañana junto a Santiago Creel y el resto de la delegación de legisladores mexicanos en la XVI Reunión Interparlamentaria España- Mexico, en el Senado—, que no se trató de curso o clase alguna. Pero si concluyó como terminan los alumnos cuando la labor del docente fue de su agrado. Antes de que una estudiante mostrara sus excelentes dotes artísticas, llegó el consejo del maestro: (“ahora aprovechen a desayunar que yo también fui estudiante y se lo que es…”), los aplausos y la foto de familia, posando y pensando, todos juntos, en el futuro.