HISTORIA DE GUANAJUATO

Tarandacuao, el verdadero y extraño nombre que al día de hoy sigue peleándose

Se trata de una población nacida de la cultura Chupícuaro, de las más antiguas de Mesoamérica, que se extendía desde Tarandacuao por la cuenca del río Lerma, hasta lo que es hoy La Piedad, Michoacán

Créditos: Especiales
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Tarandacuao.- La palabra Tarandacuao, algo difícil de pronunciar para quienes por primera vez leen este nombre, significa en lengua tarasca “lugar de juego de pelota”, nombre original que prevaleció hasta la actualidad, pese a que tuvo otros nombres, como Tarandaquao, Tarandacuaro, Taranducuau, Tarandacuao de la Constancia, Santiago Tarandacuao y más recientemente algunos tarandacuenses pedían que sólo se llamara Taranda.

Aunque hay otra traducción de que la palabra, cuyo significado es “lugar por donde entra el agua”, aunque ésta no tiene sustento histórico.

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Algo de su historia

Este municipio se localiza al sureste del estado de Guanajuato, pertenece a la región hidrológica Lerma-Chapala y la Presa Solís ocupa parte de su territorio.

Se trata de una población nacida de la cultura Chupícuaro, de las más antiguas de Mesoamérica, que se extendía desde Tarandacuao por la cuenca del río Lerma, hasta lo que es hoy La Piedad, Michoacán.

Antes de la Conquista de México, la región fue ocupada por la cultura Otomí y posteriormente los purépechas tomaron el control de este poblado en 1472, el cual perteneció por un tiempo al reino de Pátzcuaro, aunque no fue sino hasta el 27 de abril de 1612 que se le dio la legalidad de fundación, y el 14 de julio de 1861 el Congreso Local le dio al pueblo el nombre de Tarandacuao de la Constancia.

Tras el control purépecha, el pueblo de Acámbaro fue considerado como cabecera y tenía bajo su dominio a 46 poblados, entre los que estaban las comunidades de Tarandacuao, Iramuco y Jerécuaro.

En el año de 1521, a la llegada de los españoles, purépechas y mexicas mantenían gran hostilidad en los territorios intermedios (donde estaba Tarandacuao). En las fortificaciones habitaban otomíes, pames, mazahuas y matlatzincas, quienes vigilaban las fronteras y se sumaban a los ejércitos en tiempos de guerra.

La primera refundación española de la región fue la de San Francisco de Acámbaro en el año de 1526, por don Luis de Montañez y Tarandacuao se encontraba sujeto a la cabecera de Acámbaro.

Junto con los españoles llegaron con ellos los misioneros franciscanos, quienes rebautizaron a los principales pueblos indígenas, por lo que se le nombró Santiago Tarandacuao.

También llegó con los colonizadores el ordenamiento de los poblados en congregaciones, para hacer concentraciones de indígenas que estaban dispersos.

Entre 1550 y 1564, Taradacuao estuvo asentado en la meseta del cerrito Ojo de Agua y fue trasladado al lugar conocido como El Plan, donde se edificó una iglesia con hospital para indios, de acuerdo a lo ordenado por el Obispo de Michoacán, Don Vasco de Qurioga.

De 1590 hasta 1605, los españoles eliminaron muchos poblados y sólo quedaron los que consideraron más importantes para lograr las reducciones de indígenas, por lo que quedaron sólo algunos que ya habían sido fundados, como Acámbaro, Jerécuaro y Tarandacuao.

En 1861 el Congreso del Estado de Guanajuato cambió el nombre de Tarandacuao por “Tarandacuao de la Constancia”; y más tarde en 1949, también el Congreso del Estado al elevar al pueblo a la categoría política de Villa, esto con motivo del paso por este lugar del presidente de la República Miguel Alemán, y se le denominó únicamente “Tarandacuao”.

Este municipio tuvo participación en la lucha por la Independencia de México, en la de Reforma y fue de los primeros pueblos en solicitar la creación de un ejido al considerarse agrarista y en favor de las luchas campesinas en tiempos de la Revolución.

Otros detalles

Cabe señalar que, de algunas interpretciones de la palabra Tarandacuao como en la lengua de los grrupos que habitaron la región le daban el mismo sigificado de "lugar de juego de pelota", como en el lenguaje náhuatl de los mexicas o aztecas que lo llamaban "Ollamaloyan" y para los chichimecas en su lengua matlazinca era "tarandukua". Un deporte que practicaban desde antes de la conquista española tanto mexicas como chichimecas y tarascos.

Además, en otros estudios de la lengua tarasca señalan que la palabra Tarandacuao se deriva de “tarandacua-chamacua” y que puede traducirse como “lugar de juego de pelota con las caderas”.

¿“Lugar por donde entra el agua”?

Para contestar esta pregunta, trascribimos los dicho por el cronista de Tarandacuao, Jaime García Ríos, en su trabajo de investigación titulado "Tarandacuao Historia de un Pueblo Michoacano Guanajuatense", en que señala lo siguiente:

"Respecto a la definición que se ha hecho en los últimos tiempos de Tarandacuao y que es 'lugar por donde entra el agua', y de la cual se piensa podría ser en referencia a que el río “Tololotlán” (después río Grande, ahora río Lerma) penetraba a ésta región que en la época prehispánica controlaban los tarascos; o que también podría ser en alusión a los manantiales que existen en el municipio y a los que conocemos como Ojo de Agua; no existe dicha definición. Cabe decir que decir que de dicha interpretación nunca se ha dado su fuente de referencia y de la cual sólo se sabe, comenzó a difundirse a mediados del siglo pasado, es decir del siglo XX, cuando el Gobierno del Estado comenzó a solicitar información relativa a la historia mínima de los municipios, pero no tiene sustento documental alguno. Lamentablemente, a fuerza de uso las palabras se imponen sobre los conceptos; pues no se encontró una definición relacionada o parecida con lugar por donde entra, corre ó pasa el agua en los estudios lingüísticos citados ni en otros no citados. Es decir no existe en sí esa definición".

Sólo resta mencionar que la fiesta grande de Tarandacuao, que se celebra desde la segunda década del siglo XVI, es en honor al Apóstol Santiago, patrono de la ciudad, la cual se festejaba el 25 de julio y desde 1935 la cambiaron al 25 de octubre.

| Con datos del cronista de Tarandacuao, Jaime García Ríos