León.- La mayoría de los 46 municipios de Guanajuato fueron fundados en lugares poblados por comunidades indígenas, quienes en sus lenguajes nombraron cada uno de estos lugares, de acuerdo a características que rodeaban las zonas donde habitaron.
Chichimecas, otomíes y purépechas, principalmente, habitaron dichos poblados, antes de la llegada de los colonizadores españoles, de ahí que todavía algunos municipios conservan sus nombres indígenas, con ligeras modificaciones castellanizadas.
La Silla Rota ha preparado este reportaje especial, que tiene como objetivo el que todos los guanajuatenses conozcan algo de sus raíces, de manera especial el lugar donde nacieron los 46 municipios de la entidad, así como los nombres con los que fueron conocidos desde sus inicios y hasta la actualidad.
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Por lo extenso de la información, la hemos dividida en 3 partes, por lo que empezamos hoy con los primeros 15 municipios, atendiendo al orden alfabético.
Abasolo: “Lugar de zorrillos”
El nombre original de Abasolo fue Cuitzeo, que en lengua purépecha significa "Lugar de zorrillos". Posteriormente, se le añadió "de los Naranjos", pasando a ser Cuitzeo de los Naranjos. Finalmente, en 1852, el Congreso del Estado lo nombró Cuitzeo de Abasolo, en honor al héroe insurgente José Mariano Abasolo. Y en 1963, se eliminó la parte de "Cuitzeo", quedando solo Abasolo.
Aunque en diversas épocas tuvo en total 9 nombres: Cuitzeo (1527 a 1559), Estancia de Cuitzeo (1559 a 1598), Santa Misión de San José de Ojo Caliente (1598 a 1684), Hacienda de Cuitzeo de los Naranjos (1684 a 1850), Congregación de Cuitzeo de los Naranjos (1850 a 1852, Pueblo de Cuitzeo de Abasolo (1852 a 1870), Villa y Municipio de Cuitzeo de Abasolo (1870 en delante), Ciudad de Cuitzeo de Hidalgo (1953 a 1963) y Ciudad de Abasolo (Desde 1963).
Se desconoce una fecha exacta de su fundación, por lo que se tomó como referencia cuando fue considerado como Municipio, el 12 de enero de 1870.
Acámbaro: “Lugar de Magueyes”
El 13 de agosto de 1521, los españoles al mando de Hernán Cortés, junto con sus aliados tlaxcaltecas y otros grupos indígenas, capturaron al último rey azteca (Tlahtoani) de México-Tenochtitlan, Cuauthémoc, fecha en que se conoce como la Conquista de México y 5 años después, el 19 de septiembre de 1526, el cacique Don Nicolás de San Luis Montañez, fundó la primera población en el estado de Guanajuato, con el nombre de San Francisco de Acámbaro, aunque Don Nicolás, cacique natural de Tula y Jilotepec, y hombre de todas las confianzas de Cortés, firmó el acta de fundación el 25 de noviembre de 1535.
El nombre de lo que fue el primer municipio de Guanajuato prevaleció hasta nuestros días con el nombre de origen tarasco, Acámbaro, que significa "Lugar de magueyes" o "Lugar donde crecen los magueyes".
Apaseo el Alto: “Lugar de Manatiales”
El poblado donde se fundó Apaseo el Alto, originalmente se llamaba Atlayahualco, que significa "Lugar de manantiales" o "Por donde el riego rodea la tierra" en lengua otomí. Posteriormente, los purépechas lo denominaron Apatzeo, y finalmente, con la llegada de los españoles, se castellanizó a Apaseo.
En 1531, llegaron a la región los primeros españoles que le dieron el nombre de San Andrés Apaseo el Alto. En 1947, por decreto de la Legislatura del Estado de Guanajuato, se le concedió la categoría de municipio con el nombre de Apaseo el Alto.
El 8 de noviembre de 1802, se repartieron los solares entre los pobladores de Apaseo el Alto, por lo que esta es su fecha de fundación jurídica.
18 de diciembre de 1947: Fue creado el Municipio de Apaseo el Alto.
22 de agosto de 1949: El Congreso del Estado le impuso el nombre de Villa Tres Guerras al pueblo y Municipio de Apaseo el Alto.
10 de agosto de 1951: Mediante Decreto No. 87, el Gobierno del Estado le restituyó su legítimo nombre al pueblo de Apaseo el Alto.
Apaseo el Grande: ”Lugar de comadrejas”
Apaseo el Grande, en purépecha le llamaban Apazueca, que significa “Lugar de Comadrejas”, en su territorio habitaron en distintas épocas los nahuas, mazahuas, chichimecas, otomíes y purépechas, y su primer nombre, según algunos historiadores, era Dee (“Gavilanes”), luego lo nombraron Atlayahualco (“Lugar donde el riego rodea la tierra”), Apatzeo (“Flor Amarilla”) y posteriormente Apezecua, hasta la llegada de los conquistadores españoles en 1525.
Es la segunda población más antigua del estado. Sibre su fundación hay distintas versiones de los historiadores. Se dice que fue fundada por el cacique de Tula, don Fernando de Tapia Conín y por Nicolás San Luis Montañez, cacique de Xilotepec, ambos aliados de los españoles, quienes llegaron en 1525, cuatro años después de la caída de Tenochtitlán. Al poco tiempo, hecha la distribución del “botín de guerra”, Hernán Cortés otorgó la Encomienda de la zona a Hernán Pérez de Bocanegra, quien fundó la ciudad entre 1530-1533. Finalmente se oficializó la fundación el 24 de junio de 1536.
Otros nombres de esta ciudad fueron Andehe (En otomí) ), que significa "junto al agua" y otro más usado por el virrey Antonio de Mendoza era Atlayahualco, del náhuatl, que significa "junto al lago".
Atarjea: “Lugar donde abreva el ganado”
El nombre de este municipio significa en lengua otomí “Lugar donde abreva el ganado”.
En 1539 Don Alejo de Guzmán (El explorador) funda Atarjea, siendo Virrey de la Nueva España Don Luís de Velasco; dicha fundación obedeció a la existencia de yacimientos minerales en el lugar. Alejo de Guzmán a su llegada a la región encontró que los indígenas que habitaban el lugar se dedicaban a la extracción de oro, plata y mercurio, principalmente, motivo por el cual se interesó y los ayudó para que la explotación fuera más productiva.
Hay datos históricos de que Fray Juan de San Miguel acompañado de Don San Nicolás de Montañez penetró a la Gran Chichimeca en el año de 1542 hasta llegar al peligroso terreno de Rio Verde, San Luis Potosí. Fray Juan de San Miguel fue uno de los primeros religiosos franciscanos que llegaron a Nueva España en la misión del 1527.
En 1798 se le denominó Real y Minas Jesús María de la Targea. En 1905 se le llamaba Jesús María de María de Atarjea, en 1915 se le denominó Mineral de Atarjea y en la actualidad se le llama simplemente Atarjea.
Celaya: “Debajo del mezquite”
Celaya fue fundada el 12 de octubre de 1570 en lo que era un poblado indígena llamado Nattahí, que en lengua otomí significa “Debajo del mezquite” o “A la sombra del mezquite”, tuvo como primer nombre oficial el de Villa de la Purísima Concepción de Zalaya (En vasco: “Tierra Llana”), cuando varios españoles de las villas de Apaseo y Acámbaro se instalaron en el lugar, quienes inicialmente empezaron a llamar a la comarca como “El Mezquital de los Apatzeos”.
En 1570, los chichimecas incursionaron peligrosamente por el Atlayahualco (Apaseo el Grande), obligando al virrey a que urgiera al Ayuntamiento de la capital para que equipara un ejército, el cual saliera a someterlos y castigarlos.
El propio virrey de la Nueva España, Don Martín Enríquez de Almanza, encabezó a su ejército para someter a los belicosos indígenas y llegó hasta el lugar donde actualmente se levanta la ciudad de Celaya, razón por la que, el 12 de octubre de 1570, ordenó que se fundara una Villa y se poblara con algunos vecinos de lo que hoy conocemos
El 20 de octubre de 1655, la Villa se erigió en Ciudad, nombrándola “Muy Noble y Leal Ciudad de la Purísima Concepción de Celaya”.
Ciudad Manuel Doblado: “Piedra Gorda”
Mucho antes de ser nombrado Ciudad, en Ciudad Manuel Doblado habitaron indígenas otomíes, chichimecas y toltecas que dejaron vestigios en el cerro de Chiquihuitillo, en 1568 ya había en lugar españoles que tuvieron autorización del virrey don Martín Enríquez de Almanza para establecerse en el cerro de Santa Inés.
Se desconoce el nombre indígena de esta esta ciudad, aunque una vez establecidos los primeros pobladores en lo que es hoy este municipio, lo nombraron primero Piedra Gorda (1681-1693), posteriormente lo llamaron San Pedro Piedra Gorda (1693-1899) y desde el 1 de diciembre de 1899 se le dio el nombre que prevalece hasta la actualidad, Ciudad Manuel Doblado.
De acuerdo con versiones de los dobladenses que se han transmitido degeneración en generación, se le llamaba Piedra Gorda debido a que en lugar existía una piedra de gran tamaño y gruesa en forma de banco, en donde se sentaban los gobernantes prehispánicos para sus actos públicos.
En 1693 se le agregó al nombre San Pedro Piedra Gorda, después de que Tomás Manrique de la Cerda solicitara al Virreinato erigirse ahí como una congregación.
El 1 de enero de 1899, se le dio el nombre de Ciudad Manuel Doblado, en honor al jurista y general liberal Juarista Manuel Vicente Ramón Doblado Partida y el 16 de noviembre de ese mismo 1899 se le reconoció oficialmente como Ciudad.
Comonfort: “Lugar de ruinas”
El nombre indígena de Comonfort, fue Chamacuero. Esta palabra es de origen purépecha y significa "lugar de ruinas" o "lugar de cerca caída". Los purépechas encontraron este lugar en ruinas cuando llegaron a la región, posiblemente después de que otros grupos lo hubieran abandonado.
Más tarde, los españoles adoptaron el nombre Chamacuero y lo utilizaron para referirse a la zona. En 1562, se estableció formalmente una Villa española con el nombre de San Francisco de Chamacuero. Finalmente, el nombre actual, Comonfort, se adoptó en honor al general Ignacio Comonfort.
Fue declarado municipio el 7 de noviembre de 1861 y el 9 de noviembre de 1874 se le denominó Chamacuero de Comonfort, en homenaje al general y presidente Ignacio Comonfort.
Actualmente, el municipio lleva solamente el nombre de Comonfort y desde 2018 fue denominado como Pueblo Mágico del estado de Guanajuato.
Coroneo: “Lugar entre cerros”
Con el nombre de Coru-heo, que en legua otomí significa “lugar entre cerros”, debido a que el poblado se encontraba en la cuna de una loma rodeado por grandes cerros, fue fundado lo que hoy es el municipio de Coroneo.
La población fue fundada en 1537 por el pueblo otomí y posteriormente fue asimilada al dominio español con la instalación del convento de la Orden Franciscana, aunque su fundación oficial fue el 8 de diciembre de 1572, por orden del Conde de Paredes, y se llevó a cabo a petición de un indígena tarasco. Estuvo integrado a la Alcaldía de Celaya.
En 1885 la población pasó a ser parte de Jerécuaro., en 1891 se crea el municipio de Coroneo, en 1984 la localidad recibe la categoría de Ciudad.
Cortazar: “Raíz jabonosa”
Antes de la llegada de los españoles, el territorio en que se asienta el municipio de Cortazar fue una aldea Ñahñu (Otomí) llamada “Degnó Amole” y “Jali-Hui” (o Iah-hiu”) que significa “raíz jabonosa”. Esta aldea pasó después a formar parte del dominio de los mexicas, quienes la llamaron “Amolli”, voz náhuatl que significa “raíz que se talla y produce espuma”.
El 9 de octubre de 1718 se dio la orden virreinal para la fundación de Amoles, concedida por el virrey Don Baltasar Zúñiga Sotomayor y Mendoza, “Marqués de Valetro, Duque de Arión”, aunque no fue sino hasta el 5 de mayo de 1721 en que se realizó la fundación legal con el nombre de San José de Amoles.
En 1856 el pueblo de San José de los Amoles, que hasta entonces dependía de la jurisdicción de Celaya, es erigido municipio integrando a su territorio los pueblos del El Guaje (Hoy Villagrán), La Cañada y San Isidro de Culiacán, el primero pertenecía a Celaya y los dos últimos a Salvatierra.
El 21 de octubre de 1857, el Congreso de Guanajuato determina que el municipio se llame Villa de Cortazar, en honor del militar insurgente cuyo nombre completo era Luis Gonzaga Crispín Ignacio José María Andrés de la Santísima Trinidad de Cortazar y Rábago.
En dos ocasiones el municipio de Cortazar perdió territorio a causa de la creación de nuevos municipios: En 1877 el Congreso de Guanajuato dispuso que la Hacienda de Culiacán se integrara a la nueva demarcación de Jaral del Progreso. Y en 1930 se erige el actual municipio de Villagrán con cabecera en el pueblo de El Guaje, por lo que éste y 50 localidades más dejan de pertenecer a Cortazar.
Cuerámaro: “Al abrigo de los pantanos”
Cuerámaro, es un vocablo tarasco que significa "Al abrigo de los pantanos". En 1531 los españoles conquistadores llegaron a este lugar y el 12 de agosto de 1532 el Rey Carlos V, donó el territorio al indio cristianizado Diego Tomás Quesichihua.
En la época prehispánica, el territorio de lo que ahora es este municipio estaba habitado por los chichimecas, a la llegada de los españoles, los dividieron en varios grupos: los Guachichiles, Pames, Zacatecos, Caxcanes y Guamares, este último grupo, es el que dominaba la zona de Cuerámaro.
El Municipio se estableció el 12 de noviembre de 1869, abarcando el territorio que tenían las haciendas de Cuerámaro, Tupátaro y San Gregorio. Al mismo tiempo, la Congregación de Cuerámaro fue elevada al rango de pueblo y cabecera municipal, con el nombre oficial de Cuerámaro de Degollado. Y a partir de 1969 oficialmente le fue ratificado su primitivo nombre de Cuerámaro.
Doctor Mora: “Charcas”
Doctor Mora, fue denominado en el siglo XVII como el Agostadero de Charcas, en el siglo XIX (1898) Mineral de Charcas y en el siglo XX (7 de agosto de 1949) se le otorgó el nombre de Villa Doctor Mora a lo que era una comunidad de la Sierra Gorda, que siempre se le dominó mayormente como Charcas.
Llegó a pertenecer a los municipios de Victoria (Xichú de Indios), San Luis de la Paz y San José Iturbide (Ciudad Álvaro Obregón) y el 7 de agosto de 1949 logró la categoría de Municipio Libre Dr. Mora, fecha considerada como la fundación del municipio más joven de Guanajuato
Este municipio tiene el nombre en honor del ideólogo de la Reforma el Dr. José María Luis Mora, quien nació en 1794, en Chamacuero (Actualmente Comonfort).
Dolores Hidalgo: “Lugar de tórtolas”
Este municipio tuvo sus orígenes en el corazón de la nación chichimeca que vivieron por la antigua Comacoran que significa “Lugar de Tórtolas”, también conocida como Cocomacan que en náhuatl se traduce como “Lugar donde se cazan tórtolas”.
La zona formaba parte de la Confederación Guamare, una alianza tribal Chichimeca que apareció a finales del período posclásico mesoamericano como respuesta a la presencia cercana de mexicas al este y de purépechas al sur hacia el año 1,400 aproximadamente.
En 1610 la población adquiere el rango de Ranchería, con el nombre de San Cristóbal.
En 1643, se eleva a la categoría de Congregación y en 1790 a la de Pueblo, con el nombre de Pueblo Nuevo de los Dolores, desligándose de la dependencia que existía con la Villa de San Miguel el Grande.
EY e 15 de diciembre de 1947, el Congreso del Estado decretó que Dolores pasaría a llamarse Dolores Hidalgo, Cuna de la Independencia Nacional.
Guanajuato: “Lugar montuoso de ranas”
Guanajuato es una ciudad rodeada de montes, elevaciones rocosas y cuevas, fue una urbe con bonanza económica en tiempos de la Nueva España, sin embargo, el significado de su nombre, va más atrás en el tiempo, en la época prehispánica, pues a los purépechas les perecía que la forma de sus cerros parecían ranas.
El nombre procede de Quanaxhuato, que en lengua purépecha significa “Lugar montuoso de ranas” o “Lugar de muchos cerros”.
Se le llamó primero Cuanaxuato, después Guanaxuato, posterior a la conquista se le llamó Real de Minas Guanajuato, Santa Fe Real de Minas de Guanajuato y Santa Fe de Guanajuato, de la misma forma que “Lugar montuoso de Ranas” derivó en “Ciudad de las Ranas”.
En 1546 fue establecida como Pueblo, en lo que antes se considerada como su fundación y se le nombró Real de Minas de Guanajuato, por los descubrimientos de vetas de plata.
Y en 1548, a la llegada de Perafán de Rivera, primer alcalde del ayuntamiento, toma el nombre de Santa Fe Real de Minas de Guanajuato.
El Pueblo, fue transformado en Alcaldía Mayor en 1564, el 26 de octubre de 1679 mediante un documento del virrey fray Payo Enríquez Afán de Ribera la población fue elevada a la categoría de Villa y en 1741 el rey Felipe V le otorgó el título de muy noble y leal ciudad de Santa Fe y Real de Minas de Guanajuato.
Aunque fue en 1570 cuando se reconoce legalmente la fundación de la ciudad, con el nombre de Santa Fe de Guanajuato.
Huanímaro: “Lugar de trueques”
En la época prehispánica, en lo que es ahora la ciudad de Huanímaro, se asentó una comunidad indígena que con el tiempo sería elevada a Pueblo y el 12 de diciembre de 1877, el Congreso del Estado le otorgó el título de Cabecera Municipal.
Aunque no se tienen suficientes datos históricos para colocarle una fecha de fundación, se sabe que formaba parte de la Villa de León, fundada el 20 de enero de 1576.
El nombre de Huanímaro proviene del vocablo tarasco Cuímaro, que significa "Lugar de trueques" o "Lugar fragoso de palomas", aunque algunos historiadores también le dan el significado de "Lugar donde se tuesta maíz". De lo anterior, sólo se conoce el significado, pero no el motivo por el cual los purépechas le pusieron ese nombre.
Se sabe que, en la época prehispánica se asentó, en lo que hoy es la cabecera municipal, una pequeña comunidad indígena dedicada a la agricultura que más tarde fue elevada a la categoría de Pueblo, y el 12 de diciembre de 1877, por decreto número 46 del VII Congreso del Estado, se le dio el título de Cabecera Municipal.
Por el nombre tarasco, se puede decir, que este municipio fue un lugar más de las conquistas de los guerreros purépechas que dominaron casi la totalidad del ahora territorio guanajuatense, desterrando a los grupos que lo ocupaban, como los otomíes y chichimecas, aunque esto no está documentado históricamente para lo que concierne a Huanímaro.
No hay suficientes datos históricos sobre los orígenes de este municipio para establecer una cronología de su proceso de formación como pueblo, fecha de fundación, cuándo dejó de pertenecer a la Villa de León y después al municipio de Abasolo, cuando se le otorgó su nombramiento como Cabecera Municipal el 12 de diciembre de 1877, fecha ésta que cada año celebran los huanimarenses como de su fundación.
(Continuará)
Fotos: Estado de Guanajuato, México
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