Los estragos de la inflación siguen golpeando la economía de las familias mexicanas, las amas de casa y comerciantes tienen "otros datos" respecto a lo que se dice en cuanto a que la inflación ha aminorado, pues señalan que el dinero no les alcanza para comprar lo indispensable para la semana o para pagar las cuentas del servicio de luz, transporte, o la renta misma, entre otros.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
El alza de precios a productos de la canasta básica, los gastos en servicios como energía eléctrica, agua, gas, y en muchos casos renta de viviendas, tiene a las familias en serios aprietos, al grado que amas de casa se han visto obligadas a trabajar y/o emprender para ayudar a sus esposos en el sustento del hogar.
Te podría interesar
En noviembre, la inflación general anual en México se aceleró nuevamente y rompió con una racha de 9 meses consecutivos de descensos, así lo informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La inflación general repuntó en noviembre a 4.32% respecto al mes anterior, cuando se ubicó en 4.26 por ciento anual en octubre, impulsada por el repunte de la no subyacente, integrada por agropecuarios, pecuarios y energéticos; así como de la resistencia de los servicios a descender.
TAMBIÉN PUEDES LEER: Profeco alerta a los usuarios que viajan en autobús
De acuerdo con datos del Inegi, los precios al consumidor aumentaron 0.64% mensual en noviembre de este año. Ante estas variaciones, la inflación en el país acumuló 33 meses fuera del objetivo de estabilidad de precios del Banco de México, de entre 3.0 y 4.0 por ciento.
Amas de casa en apuros
Mujeres consultadas se han autoempleado en la venta de aguas, dulces, perfumes y otros productos, cuyas ganancias les sirven cuando menos para la comida del día o uno que otro gasto, y reconocen "una crisis económica" que "la pone cada vez más difícil".
Olga Sánchez tiene 56 años, trabaja en una empresa que vende productos de ácidos y solventes y hace servicios de contabilidad. Adicional a ello, Olga decidió vender en su lugar de trabajo aguas de sabor, "para ayudar un poco más con los gastos".
"Las cosas cada vez son más caras y no hay dinero que alcance, tengo dos niños y gastos siempre hay, así que decidí vender aguas de sabor de a litro. Por las mañanas mi esposo me pasa a dejar con una hielera que me compré y comencé a decirles a mis compañeros y compañeras y por WhatsApp me van haciendo los pedidos".
Los hogares que más resienten la situación económica, son aquellos donde el jefe de la familia no tiene un salario fijo o servicios de seguridad social, y principalmente donde en el hogar solo hay la figura de mamá.
Tal es el caso de Sonia Vidal. Su esposo Alejandro es albañil y actualmente trabaja en una construcción cerca del metro Morelos. Diariamente viaja desde Jilotzingo, en el estado de México hacía la ciudad de México. A él le pagan semanalmente 2,200 pesos, pero de ahí tiene que administrar los gastos diarios del pasaje, para la comida Sonia le prepara un par de tortas.
Alejandro al igual que el 50% de los trabajadores que laboran en la informalidad, no cuenta con una cuenta Afore, prestaciones laborales ni con seguridad social, y lo que es peor, tiene Diabetes.
Otro caso es el de Ángeles Oropeza, ella es secretaria y trabaja en una secundaria en el norte de la ciudad de México. Es madre soltera de una hija adolescente y con la crisis del covid-19 se vio obligada a emprender: "Mi niña y yo tenemos gastos, así que le dije que había que entrarle". Consiguió un préstamo con sus familiares y sus pocos ahorros los invirtió en una purificadora de agua.
En el caso de Leti, ella es recepcionista y hace de todo un poco en la empresa donde trabaja. Pero sabe que todo es muy caro y el dinero de poco alcanza, así que vende perfumes, colchas, zapatos por catálogo y también dulces. "A mi no me da pena vender, pena es robar o no tener para comprar, así que hay que buscarle".
Costo al alza
El 2023 pinta para terminar con precios al alza en los alimentos centrales para la dieta de los mexicanos, los cuales aumentaron 4.98% anual en noviembre de 2023, variación mayor a octubre que fue de 4.54%.
De acuerdo con un análisis sobre inflación realizado por el colectivo de economistas, México ¿Cómo Vamos? se destaca que esta situación aún es preocupante, ya que 4 de cada 10 mexicanos se encuentran en situación de pobreza laboral.
Entre los productos que han registrado incrementos en las últimas semanas están:
- Tortillas
- Huevo
- Pan de Caja
- Lácteos
- Azúcar, entre otros
¿Por qué si ya bajó la inflación, siguen altos los precios?
La inflación es la tasa de crecimiento de los precios. Esto implica que en una inflación positiva los precios siguen subiendo. Si la inflación se desacelera, cómo está sucediendo en México, los precios crecen a un menor ritmo, pero siguen creciendo, de acuerdo con Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Grupo Base. La economista explicó a La Silla Rota que, para que los precios cayeran se necesitaría una deflación, es decir una inflación negativa.
"Sería algo negativo. Una deflación no es algo deseable. Generalmente sucede bajo ante una contracción severa de la demanda interna", dijo.
Juana Montiel es ama de casa. Su grado máximo de estudios es la primaria y desde que era una adolescente llegó a la ciudad de México, proveniente del municipio de Hueypoxtla en el estado de México. Toda su vida ha vendido comida en escuelas o hecho aseo en casas. La hora de ir al mercado "es la hora de lo bueno. Todo está muy caro, entre semana vendo comida en una escuela y los fines de semana vendo tamales. El jitomate, tomate y cebolla que era lo más barato, hoy está por los cielos, los martes compro en Walmart porque me sale un poco más barato y los miércoles hay un tianguis cerca de mi casa, hay que buscarle para que den las cuentas".
Por lo que, los precios así seguirán. "Pero seguirán subiendo cada vez menos. No se esperan disminuciones sostenidas en precios en comparación anual".