ORIZABA, VER. - En el corazón de Orizaba, el barrio de Cerritos guarda secretos ancestrales que emergen poco a poco a la luz del día. ¿Sabías que este barrio recibe su nombre debido a los montículos que alguna vez lo poblaron?
Con el paso del tiempo, muchos de estos montículos, también conocidos como teteles o pirámides, han sido destruidos, como el ubicado en la Norte 5 entre Poniente 10 y 12. Sin embargo, aún perduran dos de ellos, ofreciendo una ventana al pasado en la intersección de las calles Madero entre Oriente 13 y 17.
La historia de estos vestigios remonta a décadas atrás, cuando el arqueólogo Alfonso Medellín Zenil identificó cinco montículos en Cerritos en 1952. Aunque se pensó inicialmente que eran construcciones del antiguo pueblo prehispánico de Ahulizapan, del cual se deriva el nombre de Orizaba, no se pudo determinar con certeza su fecha de construcción.
Te podría interesar
Según los escritos del cronista José María Naredo, Cerritos se extendía hacia el norte hasta las calles Oriente 31 y Poniente 32. Otros dos montículos se ubicaban cerca del centro de Orizaba, delimitados por las calles Oriente 13 y Oriente 15, y las avenidas Madero y Norte 2. Estos vestigios históricos también fueron registrados en un plano elaborado por Manuel María López Bueno en 1810.
La presencia de estos montículos podría indicar la existencia de un antiguo pueblo llamado Ixhuatlán, que se extendía desde el barrio homónimo hasta las faldas del Tepostetla. La fundación del barrio de Ixhuatlán en 1601 abarcaba desde el Cuartel de San Antonio hasta la Oriente 31.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Además de los montículos en Madero Norte, se especula sobre la existencia de otras construcciones similares en el área. En el siglo XIX, algunas calles del barrio eran conocidas como "del Cerrito" en la Poniente 10, y la Poniente 20 formaba la avenida de "Tetelilla", sugiriendo la presencia de montículos aún no descubiertos o ya desaparecidos.
Asimismo, se han documentado hallazgos arqueológicos en Tlachichilco por parte del arqueólogo José García Payón en 1971, ampliando el panorama de la riqueza arqueológica en la región.
Se espera que estos vestigios arqueológicos, al igual que los túneles descubiertos recientemente, sean objeto de investigación y eventualmente puedan ser accesibles al público para su admiración, enriqueciendo así el patrimonio cultural de Orizaba.
Si quieres saber más de esto, mira este video: https://vm.tiktok.com/ZMMso3u35/
mb