Permisos de aplicaciones: cómo mejorar la seguridad de mi teléfono
Los teléfonos inteligentes son prácticamente omnipresentes en la actualidad, tanto que incluso hay personas que cargan toda su vida pública y privada en los archivos de sus smartphones, sin embargo, los hackers y ladrones de datos siempre están al acecho.
En sí, los celulares actuales son difíciles de hackear debido a la programación de sus sistemas operativos, sin embargo, algunas aplicaciones maliciosas utilizan la función de los permisos para acceder a información sensible
¿Qué son los permisos de aplicaciones?
Todas las aplicaciones de celular necesitan acceder a algunas funciones del celular para funcionar, por ejemplo Instagram necesita acceder a la cámara para grabar historias, y al almacenamiento para buscar fotos tomadas anteriormente.
Otras aplicaciones pueden solicitar el acceso a la ubicación, la función del teléfono, el micrófono.
Sin estos permisos, muchas aplicaciones no podrían funcionar.
Aplicaciones engañosas
De acuerdo con el sitio web We Live Security, creado por la empresa de seguridad informática y antivirus ESET, algunos programas para celular diseñados con fines maliciosos, solicitan permisos que exceden sus funciones.
Se han descubierto cientos de aplicaciones dañinas, que además de incluir virus y otros códigos peligrosos, roban información usando los permisos del celular.
Por ejemplo, algunos juegos son diseñados con una doble función secreta que es robar información, y solicitan utilizar los permisos para cámaras, micrófonos, ubicación, almacenamiento, contactos y estatus del teléfono.
Con esto, al instalarlo y no revisar los permisos que solicita, el usuario permite que la compañía que brinda dicho juego se adueñe de toda esta información, la cual luego es vendida en el mercado negro cibernético, y puede ser usada para estafas, extorsiones o robo de identidad.
Incluso, se ha descubierto que algunas aplicaciones pueden utilizar las cámaras y micrófonos sin que las personas se den cuenta, e invadir la privacidad de los usuarios obteniendo fotos y conversaciones de forma ilegal.
Asimismo, otras aplicaciones roban las fotografías guardadas en el dispositivo, que en caso de contener material íntimo o comprometedor, estarían en manos de desconocidos que pueden utilizarlas de forma maliciosa.
¿Cómo me protejo?
La primera barrera contra las aplicaciones maliciosas es el sentido común. No es necesario rellenar el teléfono con aplicaciones y juegos, ya que además de presentar un riesgo de seguridad, también llenan el espacio del teléfono.
Asimismo, algunos juegos adictivos se vuelven distractores que pueden ocasionar accidentes en la calle o en sitios de trabajo.
Al momento de instalar una aplicación se debe observar qué permisos solicita y desistir en caso que utilicen demasiada información.
Por ejemplo, el famoso juego Subway Surfers, el cual se encuentra en el Top 10 de juegos recomendados en la Play Store, solicita permisos para acceder a la ubicación, tarjetas bancarias, actividad del teléfono, datos del teléfono e información personal.
Estos permisos corresponden a funciones que el juego necesita, como la compra de nuevo niveles y el contacto entre jugadores de otros lugares. Sin embargo, si un juego solicita permiso para acceder al almacenamiento, micrófono o cámaras, el usuario deberá pensarlo dos veces.
Se recomienda hacer una revisión completa de todas las aplicaciones instaladas y revisar qué datos recopila, y en caso de observar un uso excesivo de permisos, es preferible borrar la aplicación que arriesgar los datos personales.
mb