En Veracruz ya se siente el calor intenso de la primavera y verano, lo que lleva a los jarochos a buscar alternativas para minimizar el efecto del clima cálido mientras se encuentran en exteriores, entre estas, el uso de ropa de colores claros y alejarse de la ropa oscura, pero, ¿qué hay de cierto?
De acuerdo con el conocimiento popular -y un poco de ciencia- los colores claros como el blanco, reflejan la mayoría de la luz y por ende, la radiación solar durante el día, por lo que es común escuchar la recomendación de ponerse ropa clara en épocas de calor.
Pero existen personas que viven en condiciones de calor extremas y tienden a usar ropa oscura o negra.
Las tribus beduina, touareg y bereber, que habitan en diversas partes del desierto africano y del medio oriente, son personas que viven en condiciones de calor extremas, con poca sombra, poco acceso a gua y que además deben caminar grandes distancias.
Sin embargo, en fotografías y documentales sobre algunas de estas tribus, la mayoría se observan usando ropas largas negras o de color oscuro, las cuales los ayudan a sobrevivir en altas temperaturas, contrario a lo que se cree de la ropa clara.
Ropa negra, ¿refrescante?
De acuerdo con la física, la luz se compone de energía de diferentes frecuencias, las cuales se absorben o reflejan dependiendo la constitución química y física de un objeto, además del color.
El color blanco refleja todas las frecuencias de luz y absorbe nada o muy cantidad de energía, por lo que la ropa blanca sería un protector perfecto para el calor, sin embargo, las personas no solo reciben calor desde el exterior.
El cuerpo humano produce calor cuando gasta energía, y este calor también se disipa hacia el exterior, en un proceso llamado termorregulación.
De acuerdo con un estudio publicado en la revista Narkive Newsgroup Archive, los científicos Walsberg, Campbell y King demostraron que la ropa blanca además de reflejar el calor del sol hacia afuera, también estaría regresando el calor propio del cuerpo hacia el interior.
Si una persona se encuentra en un ambiente muy caluroso y realiza esfuerzo físico, como caminar bajo el sol por varias horas, la ropa blanca sí estaría protegiendo contra el sol, pero estaría acumulando el calor del cuerpo dentro de la ropa, lo que a la larga podría producir problemas de salud.
Por el contrario, la ropa oscura absorbe el calor exterior, pero al mismo tiempo impide que el calor del cuerpo regrese hacia el interior.
Esto combinado con el aire del exterior, hace que la ropa oscura se convierta en un “radiador” ya que absorbe todo el calor externo e interno, pero deja ir esa energía al contacto con el aire, por lo que no acumula la temperatura.
Las tribus del desierto mencionadas anteriormente aplican esta ciencia, al utilizar ropa larga y holgada, despegada del cuerpo, y además en capas, lo que permite que el calor externo no toque la piel, y el calor del cuerpo pueda disiparse por mayor superficie.
Así que si buscas tener una primavera y verano más frescos, una posible opción es seguir los pasos de la gente del desierto y llevar algunas capas de ropa delgada, suelta y oscura. Además de menor calor, te verás más cool.
mb