XALAPA, VER.- Natural o artificial, de madera o en la pared, no importa como lo prefieras, en la actualidad es imposible no reconocer el emblemático árbol de Navidad. Año con año, las familias adornan sus hogares con el colorido arbolito de navidad, en donde los niños reciben los regalos de San Claus.
Sin embargo, pese a que es tan conocida la tradición aún es posible que desconozcas algunos datos sobre el famoso pino navideño, es por eso que aquí te contamos algunos.
1.- Origen
A lo largo de la historia los árboles se han considerado como símbolos de paz, sabiduría, fertilidad y regeneración, es posible que por esta razón sea un árbol el máximo símbolo de la Navidad.
Cómo comenzó la tradición de los árboles de navidad?
Cuanta la leyenda que el árbol navideño se origina en el siglo VIII en Alemania, cuando San Bonifacio taló un roble dedicado al Dios Thor en la región de Hesse y, tras leer el Evangelio, ofreció un abeto, un árbol de paz que representaba la vida eterna, adornándolo con manzanas y velas.
2.- Significado
El árbol representa el Paraíso, en donde Adán y Eva comieron de los frutos, dando origen al pecado original, pero al mismo tiempo para recordar que Jesús vino a la tierra para conceder el perdón.
Su forma triangular hace referencia a la Santísima Trinidad (padre, hijo y espíritu santo), las esferas de colores y adornos simbolizan los dones que Dios dio a los hombres.
Las luces representan la luz de Cristo y la estrella en la punta es la fe que guía la vida del cristiano, también se relaciona a la estrella de Belén que ayudo a los reyes magos a llegar al lugar del nacimiento de Jesús.
3.- Martín Lutero y los adornos de Navidad
Martin Lutero fue de los primeros en ponerle frutos al árbol. Se dice que este teólogo fue quien puso los frutos secos y manzanas como adornos, recordando el árbol del Paraíso.
Antes de usar esferas, se colocaban manzanas. Representaban la tentación.
4.- Pino de Navidad en México
La Navidad llegó a México con Maximiliano de Habsburgo y fue tras la decoración del árbol en el Castillo de Chapultepec que la aristocracia mexicana adoptó la tradición, sin embargo, tras el fusilamiento del Maximiliano todas las costumbres que él trajo, incluyendo el pino de navidad se abandonaron.
Años más tardes, Miguel Negrete retomó la tradición en 1878. De acuerdo con “El libro de los porqués y qué onda con...”, el rival de Porfirio Díaz, tras una foto que fue publicada en todas las revistas en la que se le ve acompañado de un enorme árbol, todas las personas de México quisieron tener este adorno en su casa.
5.- Primer árbol público en México
El primer gran árbol público se puso en Liverpool Insurgentes, en la Ciudad de México. En el mismo Libro de los porqués se cuenta que el árbol (ya con características estadounidenses) se colocó en este lugar durante los años cincuenta.