ESPECIALES LSR

América Yamilet pasaría 8 meses de formación en el buque Cuauhtémoc; ya fue sepultada

América Yamilet, cumpliría 21 años en junio próximo; cursaba el séptimo semestre de la carrera de Ingeniería en Sistemas Navales; había partido por 8 meses para estar en 22 puertos, de 15 países, como parte de su formación

Al grito de justicia dan último adiós a América Yamilet, cadete xalapeña que murió en buque Cuauhtémoc
Al grito de justicia dan último adiós a América Yamilet, cadete xalapeña que murió en buque CuauhtémocCréditos: Especial LSR Veracruz
Escrito en VERACRUZ el

XALAPA, VER.-  América Yamilet, cadete de la Heróica Escuela Naval de Anton Lizardo, llegó puntual a su último viaje. En su féretro blanco pasó lista al arribar a su última morada: Xalapa, Veracruz. La joven que fue una de las dos personas que falleció en el buque Escuela Cuauhtémoc el pasado 17 de mayo, fue acompañada de decenas de amigos, vecinos, cadetes, sus padres y su hermano menor, que lanzaron tres hurras para despedirla.

La ceremonia luctuosa fue el marco para que los padres de América, los señores Rocío y Herminio, pidieran a sus amigos y conocidos no dejarlos solos y apoyarlos para exigir justicia tras la muerte de su “niña”.

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO

Fue la melodía del mariachi, la letra de México Lindo y Querido, o tal vez ver bajar el ataúd de su hija en la sepultura, lo que los llevó a exigir que se esclarezca el accidente del buque escuela Cuauhtémoc, que cobró la vida de la cadetes América Yamilet, de sólo 20 años, y del marino Adal Yair Maldonado Marcos, de 22 años.

“Qué viva América”, dijo don Herminio, y acto seguido exigió justicia para la mayor de sus hijos. Su esposa, Rocío, también alzó la voz: “ayúdenme por favor, ayúdenme por favor a que esto no se quede así, porque no fue un accidente”, alcanzó a decir antes de romper en llanto.

Decenas de personas dan el último adiós a América Yamilet

Ni el tráfico de la ciudad de Xalapa, ni las altas temperaturas impidieron que las personas cercanas a la joven cadete de la Heroica Escuela Naval Militar le acompañaran al camposanto, para darle un último adios.

Pasadas las 3:20 de la tarde llegó el cortejo fúnebre al panteón Parque Memorial Bosques del Recuerdo, en Xalapa, el ataúd rodeado de una bandera de México, símbolo patrio que se coloca para honrar a los cadetes que cayeron en el cumplimiento de su deber, fue cargado por su familia para depositarlo al lado de la sepultura.

La joven recibió aplausos de quienes, antes que ella, habían llegado al cementerio. El espacio donde quedará su sepultura se llenó de familiares y amigos que la rodearon de inmediato para escuchar el rosario.

Decenas de coronas y pequeños arreglos florales fueron colocados uno a uno cerca de la sepultura, por momentos jóvenes tomaban rosas o ramos de nube que entregaron a los asistentes al funeral, para colocarlos sobre su tumba.

Luego de que los asistentes recitaron los cinco misterios del rosario, empezó a tocar un mariachi que entonó al menos seis o siete canciones para decirle adios a la joven cadete xalapeña.

Fue Amor Eterno, la primera melodía que entonó el mariachi. Cielito Lindo, México Lindo y Querido, y Las Golondrinas formaron parte del repertorio del conjunto musical que se escuchó en lo más alto del cementerio.

Después de que entonaron las canciones, los jóvenes cadetes interpretaron el Himno de la Escuela Naval y el Himno Mexicano, además, de gritar res hurras, mientras lanzaban globos, en forma de estrella, para acompañar en su camino al cielo al a joven cadete.

¿Quién era América Sánchez?

La descripción común de la mamá y la abuelita de América Yamileth coinciden: “era una excelente niña”. Ambas afirman que la joven -que el mes próximo cumpliría 21 años- era un soldado, muy disciplinada y una persona muy feliz.

La joven cadete cursaba el séptimo semestre de la carrera de Ingeniería en Sistemas Navales. Su abuela, Guadalupe Sayago platicó a medios de comunicación, que antes de irse a Veracruz, América daba clases a niños que tenían promedios bajos.

América, dice su abuela, era aficionada a la natación. A los ocho años empezó a practicar la disciplina que le permitió conseguir varias medallas, incluso, formó parte del equipo “Veracruz Norte” del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), con sede en Xalapa.

“Siempre estaba haciendo algo y si no lograba ir a correr, a las 6:00 de la tarde estaba haciendo ejercicios ella solita, siempre echándole ganas a la vida, muy alegre, iba a cumplir 21 años el 11 de junio”, relata la adulta.

La primera de sus nietos, dice doña Guadalupe, era una buena estudiante, y sería la primer mujer de su familia en convertirse en militar naval. Sus aptitudes escolares le permitieron, ser coordinadora del escuadrón naval que participó, el año pasado, en el desfile del 15 de septiembre en la Ciudad de México, lo que le permitió estar cerca del expresidente Andrés Manuel López Obrador.

“Ella estaba contenta porque participó en el desfile de septiembre, estuvo a 20 metros de AMLO y (Claudia) Sheinbaum, nos mandó un video”, recordó la abuela de América.

América tenía habilidades para de la construcción, por lo que al egresar del preparatorio decidió estudiar ingeniería. Presentó examen en el Instituto Tecnológico Superior de Xalapa (ITSX) y en la Heroica Escuela Naval Militar, quedó en las dos instituciones educativas, pero optó por seguir su instrucción en el Puerto de Veracruz.

Doña Guadalupe recuerda que su nieta era muy apegada a su familia, sin embargo, su aspiración por concluir su formación profesional, la llevaron a cursar siete semestres de Ingeniería en Sistemas Navales, donde se mantuvo en el cuadro de honor.

“A veces lloraba porque es complicado; luego por las desveladas, pararse a las cuatro de la mañana y descansar hasta las 11:00, quizá 12:00 de la noche. Sus papás iban a visitarla cada ocho días, los demás, cada 15 o cada mes. Y cuando ya empezó a tener permisos, ella era la que venía a Xalapa”.

América mandó fotos a su familia antes de zarpar en NY

En el relato de la familia, confirmaron que envió fotografías de Nueva York, desde Central Park y les comunicó que el domingo partirían a Islandia. América cumplía una misión naval como parte de sus estudios, debía realizar el viaje a los 22 puertos de 15 países con una duración de ocho meses.

Cuando se enteraron de la noticia del accidente del buque, que chocó con el puente Brooklin en Nueva York, les comunicaron que tres cadetes estaban lesionados, y aunque se preocuparon tenían la esperanza de que América no estuviera en la lista, no obstante, después de algunas horas fue el personal de la Naval Militar quienes le confirmaron la lamentable noticia: su “niña” había muerto.

lm