VERACRUZ, VER. - Cafété es un lugar cultural con apenas 2 años de historia que busca romper el estigma de que en el puerto de Veracruz no existe cultura o espacios para fomentarla.
Desde la calle Isabel La Católica esq. Fray Berdardino de Sagahún, Cafété brinda un espacio de expresión cultural para aquellos que buscan un lugar donde disfrutar del arte acompañado de un buen café. En esta casa de dos pisos, artistas independientes del puerto de Veracruz o de la ciudad de Xalapa encuentran un espacio para visibilizar sus creaciones.
Su dueño, Efren Rubio, inspirado por su amor al arte, a la cultura y a la música, realiza en Cafété clubs de conversación, proyección de películas de autor y lecturas eróticas, entre otras actividades, que posicionan a Cafété como una de las pocas cafeterías culturales de Veracruz-Boca del río.
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Efren Rubio, originario de la Ciudad de México, fotógrafo y egresado de Comunicación y Periodismo de la UNAM, tuvo el deseo de un lugar así desde que conoció el Centro cultu-bar “Bar El Hijo del Cuervo”, ubicado en la Ciudad de México, del poeta mexicano Alejandro Aura. Sin embargo, tras 27 años de ejercer la comunicación, de viajar por América y de ahorrar, es que finalmente Efren pudo crear su café cultural.
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"Aquí hay que hacer lo que sabes hacer": el inicio de Cafété
Cuando Efren decidió establecerse en México, sus planes iniciales eran vivir en Tulum; sin embargo, tras encontrar esta casa en el fraccionamiento Reforma, en la ciudad de Boca del Río, decidió invertir sus ahorros junto a su hija y siempre compañera: Karen.
Cuando ella conoció la casa, la conversación fue: “la casa está muy grande, ¿qué vamos a hacer aquí?”, preguntó Efren. “Aquí hay que hacer todo lo que sabes hacer”, le contestó Karen. Lo que saber hacer Efren, es difusión cultural.
Durante sus años en medios de comunicación, Efren se dedicó a la producción en radio en proyectos como Mujer, Casos de la Vida Real y programas culturales, además de colaborar en el Centro Cultural José Martí en Ciudad de México a petición de Alejandro Aura. Estas experiencias previas y su particular interés en el erotismo, lo llevaron a crear Cafété.
Tras cinco meses de remodelaciones, Cafété abrió sus puertas el 9 de enero del 2023 con espacios para la lectura, el cine, el foro y presentaciones artísticas.
El Club de Desyree
Entre una de las actividades del café, se encuentra el club de conversación de francés de Desyree, quien llegó atraída por una noche de cine. Al visitar Cafété por primera vez, le encantó la experiencia.
“Efren es una persona que busca fomentar la riqueza cultural en todas las áreas posibles, ya sea en música, en fotografía, en cine, en los idiomas e incluso en lo culinario. Tú hablas con él y te das cuenta de que es una persona que ayuda a realizar eventos y actividades que justo hagan esto: engrasar el engrane de la comunidad”, explica Desyree.
El club que realiza Desyree una vez en Cafété es completamente gratuito y apoyado por Efrén, quien agradece que haya escogido su espacio para realizar este tipo de actividades. “La verdad es que Efrén es una persona que te ve y te dice que sí se puede. Cuando hablas con él, te das cuenta que es una persona que de verdad busca ayudar a los demás en la cultura y el arte”, dice Desyree.
Para ella, Cafété es más que una cafetería. Para ella, Cafeté es un lugar que le permite llegar a más personas como si fuera un trampolín. “Cada quien tiene diversas formas de acercarse a la cultura, como es con la literatura, música o fotografías, pero esta es una casa donde podemos compartir mucho de lo que tenemos para ofrecer a la comunidad, donde puedes compartir de forma cultural”.
"No es un restaurante con variedad, ni una cafetería con variedad, ni un bar con variedad"
Las actividades realizadas en Cafété son tan diversas como los días de la semana y los meses del año. Entre ellas, se encuentra el cine de autor: películas que más que un fin comercial, tienen un fin artístico enfocado principalmente en el estilo visual, la narrativa, los temas profundos o personales y la exploración de emociones o ideas complejas.
La lectura en voz alta “es un ejercicio que se hacía en la antigüedad, y la experiencia de lectura en voz alta es una muy bonita que te da mucho acercamiento a la literatura, pero depende mucho de quién lea por el tono, los matices, la puntuación y el ritmo de la lectura”, por lo que, asegura, no hay muchos quienes se atrevan a realizarla; razón por la que es de las actividades menos desarrolladas en el café.
Durante los miércoles Cafété suele tener presentaciones artísticas de saxofonistas o pianistas, lo que ha trascendido a Bohemia en casa: una actividad donde se presentan músicos con una percusión, una guitarra y una voz. “Tú vienes y los músicos están como en tu casa. Te dicen ‘¿cuál quieres?’ ríen, juegan un poco y nos divertimos con música de todas las épocas”.
Dependiendo del mes, Cafété presenta actividades como el microteatro, donde se interpretan obras de un autor español sin escenografía, solo con imaginación y libreto en mano. “Lo que sí me puedo adjudicar, es el impulso de la representación del Jazz en el puerto de Veracruz”, dice orgulloso.
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"A los jarochos sí les gusta la cultura"
La misión principal de Efren Rubio con su café cultural, es que, primero, se reconozca que en Veracruz sí existe la cultura, y segundo, que este modelo de negocio se replique:
“Sí ha costado trabajo (mantener el negocio), pero no mucho, porque yo creo que hemos cumplido un nicho de mercado que nadie está cubriendo”, dice. Efren recuerda que, cuando llegó a Veracruz, sus oídos se llenaron de “no, tu lugar no va a pegar”, “no, esto unos meses y van a cerrar”, “no, no te dediques a eso, aquí pura cerveza a reguetón”, lo que insiste, es común de escuchar.
“Me parece que despreciar de esa manera a una ciudad tan importante y a sus habitantes, es irresponsable, hecho a la ligera y sin compromiso”, insiste. Según cuenta, a sus 56 años él también disfruta del reguetón y le gusta la cerveza “pero Veracruz es más que eso”.
Cuando escucha comentarios sobre que restaurantes de este tipo, con un concepto similar solo se ven en Xalapa, Efren se cuestiona molesto “¿por qué solo en Xalapa? ¿Por qué tenemos que ir hasta Xalapa?”.
Con sorpresa, no entiende cómo la gente puede decir que en Veracruz no existe cultura cuando “a cada restaurante que vas, ves a un músico”. Además, insiste, también están actores, actrices, fotógrafos y músicos.
"Solo si la gente viene a este tipo de negocio y viene a lo que nosotros presentamos culturalmente, llegaremos a lo que es el éxito y a que en un momento se diga ‘sí se pudo, en Veracruz sí les gusta la cultura’".
MB