XALAPA, VER. - El pasado 10 de junio, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez y la gobernadora electa, Rocío Nahle García, se reunieron para acordar cómo será el proceso de entrega-recepción, para la nueva administración que iniciará el 1 de diciembre y hasta el 30 de noviembre del 2030.
En el encuentro, donde se acordó que el contralor Miguel Ángel Olivares Martínez y el alcalde de Martinez de la Torre, Rodrigo Calderón Salas, serán los responsables del proceso de entrega-recepción, por el cambio de gobierno, García Jiménez destacó que se dejarán 7 mil millones de pesos en la tesorería estatal, al concluir su gobierno.
Ese dinero permitirá a la gobernadora electa, Rocío Nahle, hacer frente al pago de nómina y prestaciones de fin de año a la burocracia que, desde la administración de Javier Duarte (2010-2016), se pagaban con créditos a corto plazo que se contrataban en los meses de noviembre y diciembre.
Te podría interesar
Y si bien, el nuevo gobierno contará con recursos para hacer frente a los pagos de lo inmediato por el cierre de año, también cargará con una deuda con bancos, proveedores y pagos pendientes de más de 66 mil 304 millones de pesos.
De ese total, 46 mil 576 millones se deben a la banca privada, contratados a largo plazo -20 años-, y que, cada año, obligan a programar más de 8 mil millones del presupuesto estatal para abonar a las instituciones de crédito, no obstante, se prevé que en un periodo de dos años se disparará el monto destinado al pago de interés y capital a la banca privada y banca de desarrollo, lo que ahorcará las finanzas del estado.
En el mes de febrero de 2024, el titular de la secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), José Luis Lima Franco, no descartó que la administración que entrará el 1 de diciembre se vea obligada a renegociar con los bancos los créditos a largo plazo, para reducir el monto que se tendrá que destinar para el pago de interés y abono a capital de la deuda de Veracruz.
Los datos del primer informe trimestral 2024
Recientemente se publicó el Primer Informe Trimestral del año 2024, con corte al mes de marzo, donde detalla que los pasivos actualmente son de 68 mil 971 millones de pesos, de ese monto, 47 mil 83 millones corresponden a deuda con la banca privada.
El mismo informe reporta que el monto de deuda con los bancos se incrementó en relación al primer trimestre del año 2023, cuando se debían 42 mil 465 millones de pesos. Lo anterior, porque se contrató un nuevo crédito simple con Banobras, por 4 mil 173 millones de pesos que se debían por concepto de Bono Cupón Cero del Fondo de Reconstrucción y ahora se pasó a deuda de largo plazo.
“Se permitió trasladar el registro contable de las cuentas de orden a las cuentas de pasivo de largo plazo”, se lee en el primer informe trimestral, por lo que la deuda con bancos se incrementó este 2024 a 47 mil 80 millones de pesos.
Por concepto de provisiones a largo plazo se detalla que se debía a marzo, al menos 7 mil 277 millones de pesos; cuentas de orden, 12 mil 328 millones de pesos; y cuentas por pagar a corto plazo por mil 187 millones de pesos; además, del bono cupón cero con un pasivo de 583 millones 294 mil pesos.
En el informe trimestral también se reporta que este 2024 se destinaron 8 mil 414 millones de pesos para el pago de deuda; de ese total 3 mil 66 millones son para amortizar, es decir, es el monto que se reduce a los pasivos con los bancos. Además, se etiquetaron 4 mil 148 millones de pesos para “intereses” y 43 millones 680 mil para gastos de la deuda pública, lo que representa la ganancia para el banco.
Otros mil 156 millones se etiquetaron por concepto de adeudos de ejercicios fiscales anteriores, conocidos como Adefas; ese dinero se gastará a lo largo del 2024, por lo que se incluyen el primer pago que hará la administración de Rocío Nahle, gobernadora electa, en el mes de diciembre, cuando rinda protesta de ley.
Cuitláhuac redujo deuda en 20 mil millones
El 3 de mayo pasado, en conferencia de prensa, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez detalló el monto de los pasivos que heredó y anunció que dejará una deuda de 66 mil 304 millones de pesos, que implican 20 mil millones menos de lo que recibió el 1 de diciembre del 2018.
Acompañado del titular de Sefiplan, informó que cuando llegó a la administración estatal recibió una deuda con bancos de 41 mil 854 millones de pesos; 10 mil 21 millones de pesos por provisiones a largo plazo; 7 mil 777 millones de pasivo a largo plazo; más 21 mil 571 millones de pesos de deuda en proceso de operación y 5 mil 981 millones por deuda bursátil.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Para diciembre del 2024, dijo se entregarán pasivos por 66 mil 304 millones de pesos, 20 mil 903 millones menos de lo que le heredó el panista Miguel Ángel Yunes Linares, gobernador de 2016-2018.
Cuitláhuac dejará más deuda con bancos, de la que recibió
La deuda que dejará a Rocío Nahle, gobernadora electa, quedará integrada de la siguiente manera: 46 mil 597 millones deuda con bancos, monto mayor a lo que recibió en 2018, por más de 4 mil millones de pesos.
También dejará pasivos por mil 234 millones de deuda bursátil; además de 7 mil 286 millones de pesos de provisiones a largo plazo; mil 552 millones de pesos por pasivos circulantes, 9 mil 633 millones de pesos por operaciones en proceso de aprobación.
Al concluir la actual administración se habrán pagado poco más de 23 mil millones de pesos a la banca privada y de desarrollo por concepto de interés y de ese total sólo 2 mil 345 millones se abonaron al banco, es decir, por cada 100 pesos que se destinaron a la deuda, solo 10 pesos sirvieron para reducir los pasivos.
En 2018 y 2019 el actual gobierno renegoció la deuda pública con bancos, se pactó para un periodo de 20 años. García Jiménez pagó en promedio 11 millones de pesos diarios por concepto de deuda pública.
El monto de interés y capital que se pagó habría alcanzado para construir 100 hospitales nuevos y equiparlos; o se habrían edificado mil escuelas con 15 aulas cada una y se habrían equipado.
mb