XALAPA, VER. - Ha pasado casi una década desde que Antonio Luna Andrade invadió y repartió terrenos a unas 300 familias xalapeñas. Los espacios de 4 metros de largo por 7 fueron una especie de premio a los seguidores más fieles del Partido Cardenista en Veracruz, sin embargo, hoy con el partido sin registro los propios ex militantes, acusan al político de querer arrebatárselos.
La colonia ubicada en la periferia de Xalapa fue bautizada como “Antonio Luna”. El declive del partido actualmente extinto y deudas ante el Sistema de Administración Tributaria (SAT), provocaron una disputa entre el exdirigente y sus antiguos seguidores por las tierras ocupadas años atrás (de manera ilegal) bajo el consentimiento de las administraciones priístas y panistas.
Y es que el instituto político, que en cada proceso electoral estatal logra su registro sin mantenerlo tras los resultados de los comicios, atraviesa una crisis y sus militantes iniciaron una desbandada. En respuesta, el exdirigente ahora amaga con despojarlos de sus terrenos y acompañado con grupos de choque les exige dejar los espacios en donde construyeron sus casas.
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Por años, los colonos han pagado trámites y realizado gestiones para regularizar sus lotes ante Patrimonio del Estado, pero sin tener escrituras temen quedarse sin un lugar para vivir. Exponen que en su momento apoyaron con marchas, con su voto y con movilizaciones al político autoproclamado defensor de diabéticos, madres solteras, discapacitados, desempleados y jubilados, por lo que consideran que ya se ganaron el derecho a habitar la colonia sin tener que seguir atendiendo los llamados del dirigente.
COLONIA MARGINADA
La colonia Antonio Luna de Xalapa, ubicada hacia la zona de El Castillo, se ha convertido en un mercado inmobiliario pese a que carece de servicios como drenaje y agua potable. Luna Andrade lleva semana con semana “a gente nueva” prometiendo terrenos e incluso casas, que resultan ser de las personas que por casi 10 años han ido estableciendo ahí su patrimonio.
En entrevista “Rosa” explica la situación y pide anonimato para evitar represalias del dirigente, detallando que Luna Andrade, en contubernio con un comité creado por unas mujeres identificadas como María Luisa, Octavia Morales y otras personas, los presionan para dejar la colonia pese a que la mayoría no tiene a dónde ir.
“Le hicimos su bolsillo gordo. Ya están -los terrenos- más que ganados con los plantones que hacíamos en Xalapa; si teníamos que salir, salíamos y algunos soltamos dinero cuando nos pidió”, acusa en entrevista la mujer a quien quieren despojar de su casa.
Relata que tras años de apoyar a Luna Andrade y en el ocaso de su organización política, ahora busca nuevamente negociar los terrenos que sus correligionarios invadieron hace años, pese a que muchos de estos ya están en vías de ser regularizados. La ocupación se oficializó en la administración de Javier Duarte y con Américo Zúñiga como alcalde de Xalapa.
“Ya es hostigamiento y un daño moral”, agrega la mujer, que reprochó además que para sus fines Antonio Luna se valga de personas de la tercera edad y minusválidos, quienes cierran las calles de la colonia e insultan a los lugareños durante los fines de semana para exigirles que se marchen.
Indicó que el lugar está compuesto por aproximadamente 400 lotes de terrenos, la mayor parte de ellos ya habitados por diversas familias y otros que si bien no tienen pies de casas o viviendas, están encaminados hacia la regularización.
Los vecinos del lugar temen que el conflicto vaya a terminar en una tragedia, puesto que no están dispuestos a dejar lo que ganaron a pulso tras participar en protestas y mítines. Algunas personas iniciaron ya procesos en la oficina de Patrimonio del Estado, ante la Comisión Federal de Electricidad e incluso el ayuntamiento de Ricardo Ahued Bardahuil, para conseguir los servicios municipales.
“Nos acusan de traidores, nos acusan de invasores cuando él mismo nos otorgó esos espacios. Ya están en Patrimonio los papeles en proceso y cada fundador de la colonia está registrado”, asegura Rosa.
“QUE NOS DEJEN TRANQUILOS”
En la colonia Antonio Luna, ya conocen el proceder del dirigente, que ha hecho carrera en la política de Veracruz por décadas aliándose con partidos como el PRI. Precisamente por eso temen que la historia se repita ahora con sus antiguos seguidores como víctimas.
Las personas relataron que los terrenos de ese lugar les costaron con su voto, ofreciendo sus credenciales de elector “que el señor pedía” para el registro del instituto.
Reconocieron también que en tanto Luna Andrade los utilizó, los vecinos se vieron obligados en algunas ocasiones a poner diversas cantidades de dinero, para que ahora sean otros a los que se les están prometiendo los espacios conseguidos.
“Entonces que al señor le pongan ya un alto, no acepta que ya no es partido, ya que nos dejen tranquilos”, demandan.
Alertando que la propia gente de Antonio Luna realiza “rondines” de seguridad, pero en realidad han terminado por incrementar la cifra de robos a casa habitación en la colonia, no sería esta la primera vez que Antonio Luna está implicado en acciones fraudulentas.
En 2017, uno de sus seguidores, Roberto Ramírez Sandoval desconoció al político y evidenció que al igual que los ahora quejosos, Luna Andrade obtuvo ganancias millonarias de personas que esperaban ser regularizados.
En ese entonces, Ramírez acusó que unas mil 400 familias fueron defraudadas por el político veracruzano, pues aunque se comprometió a brindarles apoyo a cambio de dinero, la respuesta nunca llegó.
“Tenemos más de 18 años financiando su carrera política, yendo a Xalapa a pelear esos predios y ya tenemos más de 10 años habitándolos y no podemos todavía regularizarnos”, afirmó.
En 2018 ocurrió otra acusación en el mismo sentido. En ese año fue el exsecretario de la organización en Naolinco y representante de la asociación civil “Nahuaiollin Unidos Por Ti”, Fernando López Velázquez, quien alertó que al menos 200 familias habían sido amenazadas con quitarles sus lotes “por desobedecer” al dirigente estatal.
Hasta 2020 se estimaron unas 30 colonias cardenistas en la entidad, la mayoría en espacios invadidos como ocurrió en Xalapa con la lotificación irregular ubicada en el predio “La Palma” de la congregación El Castillo, ocupando aproximadamente 7 hectáreas.
Desde 2014 el desarrollo de la colonia Antonio Luna fue criticado por el actual alcalde de Xalapa, Ricardo Ahued Bardahuil, quien como ex diputado local del tricolor alertó hace una década que no tenía factibilidad de servicios públicos de primera necesidad.
La colonia no puede albergar un colector pluvial, ni una planta de tratamiento de residuos, violentando los requisitos indispensables que exige la Secretaría de Medio Ambiente.
“Yo estaría temblando porque los funcionarios tanto estatales como municipales el día en que en esa zona exista una desgracia irán a la cárcel por 15 años”, afirmó Ahued Bardahuil el 3 de mayo de 2014, citando la Ley de Desarrollo Regional y Urbano del Estado de Veracruz.
SATÉLITE DEL PRI
Aliado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) desde tiempos de Fidel Herrera Beltrán, Antonio Luna Andrade inició un movimiento que desde el principio tuvo claro su objetivo. En 2004, su organización, con el reconocimiento de asociación política estatal empezó a acceder a fondos públicos de la entidad.
Así, acompañó la búsqueda de la gubernatura de Javier Duarte de Ochoa, sexenio durante el cual alcanzó la denominación de partido político estatal. La alianza que Antonio Luna hizo con gobiernos priistas le sirvió para que, a la fecha, cerca de una treintena de colonias cardenistas estén regadas a lo largo y ancho de la geografía veracruzana.
Sin embargo, cuando Duarte salió de la gubernatura y el PAN tomó las riendas del poder, su alianza tricolor quedó atrás para apoyar a Miguel Ángel Yunes Linares. Con Morena ya no tuvo el mismo impacto, aunque intentó acomodarse al cambiar el nombre por el de Frente Cardenista de Regeneración Nacional.
Su partido perdió el registro y desde entonces, sus aspiraciones han ido de fracaso en fracaso. De hecho, buscó ser diputado, gobernador de la entidad y presidente municipal de Xalapa. En la contienda que participó, para el periodo de 2018 a 2021, solamente obtuvo 2 mil 950 votos, contendiendo como candidato independiente.
Ha sido en este último reducto que también se ha hecho acreedor a sanciones de tribunales electorales tanto de Veracruz como a nivel federal, por actos anticipados de campaña y recientemente el SAT confirmó que el partido desapareció de la escena política de Veracruz sin liquidar un crédito fiscal, aunque sin precisar el monto.
mb
