XALAPA, VER.- Luego de tomar valor y exhibir a Guillermo “N”, el hombre que las acosó en sus locales o en plena vía pública de Xalapa exhibiéndoles sus genitales y ofendiéndolas, víctimas se dicen decepcionadas del trabajo de la Fiscalía General y algunas confirman que se desistirán del proceso penal abierto en contra del exhibicionista, al temer represalias debido a que quedó en libertad.
Desde hace meses el sujeto vinculado a proceso por el delito de ultrajes contra la moral pública comenzó a acosar a dueñas de locales, trabajadoras y transeúntes que circulaban por avenidas como Adolfo Ruiz Cortines, Orizaba y Circuito Presidentes, entre otras, las cuales son utilizadas por corredoras y ciudadanas que se ejercitan.
Guillermo se hacía pasar por un trotador vistiendo pans y sudaderas con el objetivo de acercarse a mujeres para mostrarles sus partes íntimas o acosarlas. Con valor, algunas optaron por tomarle fotografías e incluso grabarlo hasta que las imágenes se volvieron virales.
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Una locataria señala que ella misma decidió grabar por primera vez al acosador y difundir el video. Pasaron varias semanas hasta que el material comenzó a ser compartido y comentado por otras mujeres violentadas hasta que Guillermo fue detenido el pasado 17 de noviembre, una vez que otra mujer acosada decidió grabarlo y perseguirlo hasta captar parcialmente rostro, el cual intentó cubrir con un cubrebocas.
En total, cuenta otra de las agraviadas, se juntaron 18 denuncias en contra de Guillermo “N” tras su detención, algunas por intento de abuso sexual, acoso, robo a casa habitación y robo a taxis. Exponen que el acosador tiene antecedentes penales y en otras ocasiones ya fue sometido a proceso, pero siempre queda libre.
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“La Fiscalía hizo todo para que saliera; no sabemos si tiene influencias para quedar libre”, dijo la agraviada. Reconoció que, ante esta situación, la mayoría comenzó a desistirse de colaborar con las autoridades porque las denuncias previas a la detención recibieron un “carpetazo” o porque temen por su integridad debido a que Guillermo quedó en libertad.
CELULARES CONTRA ACOSO
El rostro de Guillermo “N” se dio a conocer el pasado 16 de noviembre, cuando fingiendo hacer deporte -incluso ataviado con su vestimenta característica para este fin- acosó a una joven a la que incluso ofreció dinero.
La joven sacó su celular y encaró al hombre. “¿Me puedes repetir lo que me dijiste?”, le increpó en la zona del supermercado Soriana sobre la avenida Xalapa.
Descaradamente, el tipo responde: “que si me venderías tu esa por 2 mil pesos”, se alcanza a escuchar en la grabación. Luego el hombre le pide “disculpas” para luego echarse a correr entre los vehículos y perderse entre los árboles.
Antes, el 14 de octubre, portales informativos y páginas como Tendedero Xalapa alertaron de este acosador quien, de acuerdo con víctimas y testigos, tiene más de dos años violentando a mujeres en las zonas de La Isleta, Los Lagos, Circuito Presidentes, Sauces, Zona Universitaria y parte del centro de la ciudad.
De su proceder, la misma página indicó que seis meses atrás ya se había registrado una denuncia pública en su contra.
Los videos y fotografías sobre su comportamiento abundan. En todos los que se han subido a redes se observa el mismo modus operandi. Se pasea por las calles con ropa deportiva, generalmente mallones, tenis, playera, sudadera y gorra, portando cubrebocas para cubrir su rostro.
El sujeto optaba por desplazarse con las manos en sus genitales, los cuales muestra a las mujeres que se cruzan con él. Otro video también en redes muestra cómo se acerca a ellas, las acorrala y les muestra sus partes íntimas. Al menos 18 víctimas se sumaron a las denuncias por este tipo de actos de exhibición obscena al identificarlo en redes sociales.
“Hay denuncias, pero cuando se hicieron justifican que como no había nombre, dirección, no había nada más que hacer. Casi todas quedaron como ‘a quien corresponda’ y al final no está pasando nada”, lamentó la propietaria de un local, añadiendo que algunas agraviadas decidieron no seguir colaborando con la Fiscalía por su falta de resultados.
Las mujeres se pusieron en contacto tras acudir a declarar en contra de Guillermo y consideran que lo que se tenía que hacer ya se hizo, procediendo legal y mediáticamente, pero siendo objeto de amenazas e insultos como respuesta, principalmente a través de las redes sociales.
QUE ESTO YA NO LES PASE A OTRAS
En agosto pasado Fernanda Malpica se topó con Guillermo en Circuito Presidentes. Ella se dirigía a su trabajo cerca del parque Los Berros cuando comenzó a acosarla. La joven también lo denunció, sin embargo, ella no contempla desistirse porque considera que así se podría evitar que haya más víctimas en el futuro.
“Yo lo reconocí por otra denuncia en redes (…), amigas a quienes había alertado me empezaron a etiquetar (…). Yo escuché como que me dijeron cosas, pero me seguí y ya después como que escuché que el señor me venía diciendo todavía cosas y reconocí que era desde una talachería.
“Después fingió una llamada y me empezó a decir cosas como en tercera persona, pero gritaba según haciendo su llamada. Yo me seguí y fue cuando me lo encontré de frente, sin percatarme de que era la misma persona”, relató Fernanda.
El sujeto hizo un rodeo para toparse de frente a la joven, quien por miedo sacó su teléfono y le tomó fotografías justo en el momento en que se descubrió el pene. Con miedo, ella se dirigió a su trabajo “en shock” por la mala experiencia que acababa de vivir.
“Si me hubiera querido dar un golpe, embarrar su pene o si me hubiera querido echar su semen, lo hubiera poder hecho; creo que eso era lo que buscaba, tener esa cercanía de frente conmigo”, mencionó en entrevista, en la que lamentó que por vacíos legales este tipo de agresores queden en libertad al no perpetrar delitos graves.
Fernanda reitera que ella no va a desistirse en su denuncia, pues considera que Guillermo “N” puede escalar en sus agresiones y en el futuro podría haber más víctimas si no existen denuncias formales. Ella no forma parte del grupo que optó por desistirse de la denuncia contra el exhibicionista, pues su proceso lo sigue otro abogado.
Reconoció que la falta de tiempo es difícil proceder y dedicar días completos para acudir a la Fiscalía, pero de su parte está dando todas las facilidades para que las investigaciones prosperen. Fernanda reconoce que tuvo que cambiar su rutina y ahora evita trasladarse en ropa deportiva, pues no es la primera vez que vive acoso.
“Ya había tenido acoso en la calle, pero después de lo que pasó con este señor cambié cosas de mi día a día. No puedo salir con mi ropa de deporte a la calle, tengo que andar cargando ropa y no paso junto a algún sujeto que se parezca físicamente; si hay hombres en la calle con cubrebocas que pasen junto a mí en la banqueta mejor me cruzo. Es frustrante que legalmente no lo puedan retener y pues la verdad, claro que tengo temor de que quiera tomar alguna represalia”, añadió.
ACUSACIONES NO PROSPERARON
La presión social derivó en la detención de Guillermo “N”. Su aprehensión fue cuando, en la colonia Juan de la Luz, acosaba a otra mujer.
En esa ocasión, se le acusó no solo por acoso, sino también por portación de estupefacientes, propiamente dosis de mariguana.
Sin embargo, las acusaciones no prosperaron y la Fiscalía General, si bien logró imputarlo por delitos contra la salud y la moral pública, en la vinculación solamente se hizo por ultrajes contra la moral pública, un delito que no amerita prisión preventiva ni oficiosa, ni justificada.
De hecho, ultrajes a la moral pública, reglamentado en el artículo 284 del Código Penal, ni siquiera tiene una penalidad alta. La ley señala que se impondrán de seis meses a dos años de prisión y multa hasta de 50 días de salario “a quien públicamente ejecute o haga ejecutar actos obscenos”.
El delito, al ser de una penalidad menor a cinco años de prisión, alcanza algún sustitutivo de la pena, por lo que es probable que el sujeto, de ser encontrado culpable, ni siquiera pise la cárcel para purgar su pena.
Si, en cambio, la FGE hubiera podido acusarlo de acoso sexual -artículo 190-, la pena de prisión habría sido hasta de 8 años si se comprobare que alguna de las víctimas es menor de edad.
En los hechos, Veracruz no ha reportado un solo caso de acoso sexual durante este 2022. En cambio, sí ha reportado el inicio de mil 265 carpetas de investigación por “otros delitos que atentan contra la libertad y la seguridad sexual”, sin que quede especificado de qué se tratan estos casos.
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