OPINIÓN LSR

¿Cambio real en la política veracruzana?

Créditos: LSR Veracruz
Escrito en VERACRUZ el

Esta semana inició la nueva legislatura en Veracruz, con lo que podemos decir que oficialmente terminó el proceso electoral en el estado. Hace unas semanas, el Organismo Público Local Electoral del estado de Veracruz (OPLE), validó los diputados plurinominales que formarían este congreso estatal en un evento donde podemos decir hubo de todo un poco. El foco de todos los medios y partidos (excepto MC que buscó confrontar a MORENA), estaba en el caso del PT y su primera dupla para ocupar el curul estatal. El tema era que, Vicente Aguilar, dirigente estatal del partido, ocupaba el primer puesto como pluri en la lista, pero por motivos de género, la expriista y exalcaldesa de Xalapa, Elizabeth Morales, impugnó que por motivos de género, le correspondía a ella pues en el congreso pasado el primer lugar lo ocupó un hombre y según está marcado, en esta nueva legislatura, el PT debía tener una mujer como primera en la lista pluri. 

Luego de un evento de más de 2 horas, donde todos los representantes de los partidos ante el organismo electoral veracruzano se encontraban a favor del dirigente Vicente Aguilar con argumentos como “que con Vicente de diputado, habría 26 mujeres y 24 hombres”, “la modificación del orden de la lista de pluris fue después de las elecciones y eso sería aplicar la ley retroactivamente”, y “que el dirigente del PT es adulto mayor, entonces se privilegia más a una mujer que a un adulto mayor”.  Pero nada de esto sirvió y con 5 votos a favor y 2 en contra, Elizabeth Morales fue elegida como diputada plurinominal. Días después, el Tribunal Electoral le quitaría a Morales la diputación para otorgársela a Vicente, para que nuevamente, a la semana siguiente, se le regresara a Elizabeth Morales la diputación plurinominal.

La designación de Elizabeth Morales como candidata plurinominal en Veracruz abre un debate necesario sobre el estado actual de la política en la entidad. Morales, con una larga pero no precisamente buena trayectoria en la política local, ha sido una figura controversial por su paso por la alcaldía de Xalapa y la delegación del ISSSTE en Veracruz. Enfrentó acusaciones de corrupción y cuestionamientos sobre su desempeño. A pesar de estas controversias, su inclusión en la lista plurinominal sugiere una falta de renovación y un reciclaje de figuras políticas que ya han ocupado espacios de poder.

Las críticas hacia su gestión fueron numerosas. Se le acusó de uso inadecuado de los recursos públicos, en particular durante la construcción de algunas obras, que según denuncias, presentaban costos inflados y baja calidad. La falta de transparencia en el manejo del presupuesto municipal también fue motivo de señalamientos, lo que minó la confianza de algunos ciudadanos en su gobierno.

Además, su administración enfrentó cuestionamientos por la percepción de priorizar la apariencia de la ciudad sobre las necesidades básicas de la población. Los proyectos de embellecimiento urbano fueron vistos por algunos como superficiales, mientras que los problemas estructurales, como el desempleo, la inseguridad y la falta de servicios en algunas colonias, persistían sin ser atendidos de manera efectiva. Esto sin contar sus famosos viajes nacionales e internacionales mientras se encontraba en funciones como alcaldesa que justificaba como “viajes de trabajo para impulsar el turismo”.

Haciendo zoom… El curul ocupado por Elizabeth Morales simboliza una oportunidad perdida para dar paso a nuevas voces y construir una clase política más representativa y conectada con las necesidades actuales de la sociedad. El reto de los partidos políticos en Veracruz y en todo México es romper con las prácticas que perpetúan la falta de credibilidad en la política y apostar por perfiles que realmente encarnen un cambio en la forma de gobernar. En lugar de ser una herramienta para diversificar la representación en el Congreso, las listas plurinominales suelen ser utilizadas para premiar lealtades o mantener cuotas de poder. La inclusión de Morales en este contexto podría interpretarse como un ejemplo más de este fenómeno, lo cual desanima a quienes esperan un cambio real en la política veracruzana.

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