La traición de Augusto Pinochet fue abominable, es una mancha que no se borra ni con toda el agua de los océanos. Andrés Manuel López Obrador. Santiago de Chile, 10 de septiembre de 2023.
Hoy, 17 de septiembre de 2023, se cumplen 50 años del asesinato de Don Eugenio Garza Sada, un empresario ejemplar.
En dos columnas anteriores me he referido a Don Eugenio. El amable lector puede consultarlas, si el tema le es de interés en los enlaces que aparecen al final.
El trabajo, el ahorro, la eficiencia, la puntualidad, la frugalidad, la innovación y la importante responsabilidad social con los empleados y con la comunidad son algunas de las características que marcaron la vida de quien fue el más importante líder empresarial del siglo pasado en nuestro país.
El 06 de septiembre de 1943, Don Eugenio fundó el Tecnológico de Monterrey, institución de la que se dice era el mayor orgullo de este empresario, su hijo preferido pues. El 06 de septiembre de 1993, hace 30 años, FEMSA, y el Tecnológico de Monterrey establecieron el Premio Eugenio Garza Sada, para reconocer a “quienes con su compromiso, pasión y dedicación contribuyen al desarrollo de México mediante acciones que elevan el nivel de vida y bienestar de las comunidades”.
El 06 de septiembre pasado, FEMSA y el Tecnológico de Monterrey, entregaron los galardones de la edición número 30 del Premio Eugenio Garza Sada, al tiempo de celebrar el aniversario número 80 del Tecnológico y recordar la obra de don Eugenio, así como el 50 aniversario de su muerte.
El orador principal en la ceremonia de entrega de los premios fue José Antonio Fernández Carbajal, Presidente Ejecutivo del Consejo de Administración y Director General de FEMSA.
Resumió las principales ideas de Don Eugenio en tres conceptos: Desarrollo Económico y Social, Cultura y Educación y Liderazgo y Humanismo:
“En su 50 Aniversario Luctuoso, seguir su ejemplo y trabajar por nuestra comunidad es la mejor forma de recordarlo y mantener su legado vigente entre las nuevas generaciones” afirmó Fernández Carbajal.
El centro Eugenio Garza Sada, publicó en Enero de 2017 el libro “DON EUGENIO GARZA SADA. IDEAS ACCIÓN LEGADO”, escrito por la Dra. en Historia por el Colegio de México, Gabriela Recio Cavazos.
En el epílogo de la obra, página 313, aparece el siguiente párrafo:
“… El fuerte enfrentamiento que tuvieron los empresarios regiomontanos con los presidentes Lázaro Cárdenas y Luis Echeverría convencieron a Don Eugenio de que la voz y visión empresarial de Monterrey debían difundirse y darse a conocer en un país con crecientes rasgos autoritarios. Consciente de los riesgos que corría en términos financieros y personales, tomó la decisión de invertir en distintos medios de comunicación como los periódicos, la radio y la televisión para ofrecer al público otra visión de la realidad mexicana. Al final de su vida con más de ochenta años, la Liga Comunista 23 de Septiembre lo asesinó justo una semana antes de concretar la compra de la cadena periodística del Coronel García Valseca, que para efectos prácticos ya estaba en manos del gobierno del presidente Echeverría.”
En la edición 2019 del libro “Nadie supo nada. La verdadera historia de del asesinato de Eugenio Garza Sada” el periodista Jorge Fernández Menéndez, en un análisis muy completo sobre el tema, critica la postura de Pedro Salmerón, quien en septiembre de 2019 calificó de “jóvenes valientes” a los asesinos de Don Eugenio. Al respecto, en los nuevos libros de texto hoy en circulación, se describe el brutal asesinato de Don Eugenio como una “retención”, una acción en la que, simplemente, perdió la vida un empresario.
Fernández Meléndez, tras un riguroso análisis del Archivo General de la Nación (AGN) encuentra que el ataque donde murió el líder empresarial fue una acción consentida, conocida previamente y realizada con el consentimiento implícito del gobierno que encabezaba Luis Echeverría. Afirma que por lo menos un año y medio antes del intento de secuestro, La Dirección Federal de Seguridad (DFS), quien tenía personal infiltrado en los diferentes grupos guerrilleros, sabía que ocurriría.
En página 29 del libro citado se encuentra la siguiente cita:
“La conclusión es un poco obvia: los documentos en nuestro poder, certificados por el AGN, confirman que el gobierno de Luis Echeverría sabía que se cometería el secuestro de Garza Sada y que tenía, desde año y medio antes, información detallada, vía infiltración, de las actividades de esos grupos. Entonces ¿cómo una dependencia como la DFS, que tenía un control riguroso de las actividades de un grupo armado de estas características, que lo tenía infiltrado, que tenía información precisa hasta de lo que se hablaba en sus reuniones….
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¿Qué tanta responsabilidad tuvo el gobierno de Luis Echeverría, por acción u omisión, en el asesinato de Eugenio Garza Sada?”
Por la coincidencia de fechas entre el golpe militar de Chile 11 09 1973 y el asesinato de Don Eugenio 17 09 1973 es imposible dejar de hacer algunas comparaciones.
En su conferencia matutina del jueves 7 de septiembre en Palacio Nacional, López Obrador reconoció el apoyo que, a través de la embajada de México en Chile, se otorgó a los ciudadanos chilenos perseguidos por Augusto Pinochet.
Posteriormente, AMLO realizó una gira internacional, durante la cual el 10 de septiembre pronunció un discurso en Chile, donde afirmó que Salvador Allende “Fue un humanista, un hombre bueno, víctima de canallas. ” Que “La traición de Augusto Pinochet fue abominable, es una mancha que no se borra ni con toda el agua de los océanos. Casi para finalizar su discurso definió a “Salvador Allende, apóstol de la democracia de la República de Chile y ejemplo de dignidad en el mundo”
Para concluir se plantean tres preguntas:
Dada la simbiosis de López Obrador con Echeverría (Ignacio Ovalle Fernández), ¿La antipatía de Luis Echeverria por el sector empresarial prevalece?
¿Se dará un tiempo hoy, López Obrador, para recordar el asesinato del empresario cuyo legado ha generado más de 350 mil empleos en México y en 17 países?
Como se sabe, durante los 17 años de dictadura de Pinochet, se registró un saldo de más de 3 mil detenidos-desaparecidos. De mil 469 personas que desaparecieron durante el régimen militar chileno entre 1973 y 1990, solo 307 de ellas han sido encontradas e identificadas. Otro saldo negativo para Pinochet son los por lo menos 200 mil chilenos que se fueron al exilio, muchos de ellos a México.
Un solo muerto o un solo desaparecido no están justificados en gobierno alguno. Entonces habría que preguntarle al presidente López Obrador, si la mancha por los más de 165 mil muertos en nuestro país por el crimen, los más de 111 mil desaparecidos y los más de 4 mil feminicidios en lo que va de su gobierno, ¿podrá ser borrada con toda el agua de los océanos?
https://lasillarota.com/veracruz/opinion/2023/6/5/don-eugenio-garza-sada-431953.html
ch