VERACRUZ, VER. - Hilario Herrera González tiene 15 días postrado en cama con el riesgo de perder su pierna derecha si no consigue 40,000 pesos para una cirugía que requiere, esto luego de haber sufrido una trombosis y después de que en el hospital donde fue atendido no le retiraran todos los coágulos que se le habían acumulado en su pelvis y parte de su tobillo, asegura su esposa Cecilia Muñoz Díaz.
El martirio de Hilario comenzó el 14 de enero del 2024 cuando acudió a un consultorio de una farmacia por un esguince. En ese momento le recetaron unos desinflamatorios, pero la hinchazón del pie no bajaba, por lo que la familia lo llevó a la Cruz Roja Veracruz.
Fue en ese lugar que les dijeron que lo que tenía no era normal y que podría ser una trombosis externa, por lo que era necesario llevarlo a un hospital. La familia decidió acudir al Hospital Regional de Alta Especialidad de Veracruz; sin embargo, ahí les comentaron que no contaban con un angiólogo, que es el especialista que se encarga del estudio de los vasos del sistema circulatorio y del sistema linfático.
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“En el Regional nos dijeron que no contaban con esa especialidad y que solo había en Xalapa y que tendrían que hacer el trámite para trasladarlo a Xalapa, que tardaba de tres a cinco días, pero mi esposo les dijo que no, que él llegaba por su propio pie a Xalapa, les firmó. Llegamos al regional de Xalapa y ahí le dijeron que también se tardaban de tres a cinco días por la región”, cuenta su esposa.
En hospital de Xalapa le querían amputar el pie
Hilario se quedó hospitalizado en el Centro de Alta Especialidad "Dr. Rafael Lucio" el martes 17 de enero, en ese lugar le realizaron todos los estudios, para que al siguiente día lo operarán. La intervención fue en la tarde.
Cecilia asegura que los doctores no les explicaron el procedimiento que le iban a hacer a su esposo, el cual era retirarle los coágulos por medio de una intervención quirúrgica con una sonda. Comenta que después de la intervención el dolor seguía, además de que los doctores no retiraron todos los coágulos, por lo que le dijeron que necesitaría una amputación del pie.
Pero Hilario no acepto que le amputaran la pierna, por lo que decidió tomar la alta voluntaria y regresarse a Veracruz a buscar una segunda opinión. Cecilia agrega que tras llegar a su casa buscaron la atención de un especialista privado.
“Aquí busqué un angiólogo y me dijo que como llevó una cirugía ya necesitaba un cirujano vascular y me dio un número de su colega. Marque y me atendió un doctor y hoy me atendió, le hizo un ultrasonido y le encontró un coágulo a la altura de su pelvis y otro abajo al lado del tobillo y me enseñó donde lo operaron y me dice el cirujano que por esos coágulos el pie se le entume y no tiene circulación y le duele la herida. Me dijo que normalmente en la primera cirugía los pacientes quedan, pero no se explicaba como no le retiraron todos los coágulos”, narra Cecilia.
El cirujano particular le comentó que sí podría hacer la intervención para salvarle la pierna, pero el costo de la operación sería de 40 mil pesos. Dinero con el que la familia no cuenta.
Dolores constantes
Desde que Hilario le detectaron la trombosis apenas y puede conciliar el sueño, el dolor que tiene tras la operación no lo deja dormir y la desesperación de no poder tener el dinero para pagar un cirujano particular no lo deja en paz.
La familia se sostenía de lo que el hombre de 44 años gana como cargador en una ferretería de la ciudad, teme perder su pie y después no poder desempeñar su antiguo trabajo o cualquier otro.
“Yo solo quisiera que me apoyaran con lo de la operación, porque el pie ya lo tiene muy feo y a cada rato llora porque teme que le corten, porque ya no está bien, sí lo mueve y lo siente, pero lo siente entumido y ya no duerme”, lamenta Cecilia.
mb