VERACRUZ, VER.- Después de 6 años del asesinato de Margarito Alfaro y Pedro Cruz Domínguez, ex obreros de la empresa Tenaris Tamsa, en un enfrentamiento entre facciones del Sindicato Nacional Unidad y Progreso (SNUP) ocurrido en una colonia de Boca del Río, Veracruz, sus familiares reclamaron a la Fiscalía General del Estado (FGE) que no existe ninguna persona detenida por el caso.
Pascual Lagunes Ochoa, quién era líder del sindicato al momento de los hechos ocurridos el 24 de marzo del 2017, y señalado como autor intelectual, fue absuelto en marzo del 2019, luego de que una juez determinó que no se presentaron pruebas suficientes para comprobar su participación en los homicidios; mientras que, Cándido Canseco, quien es actualmente líder sindical de la empresa Tenaris Tamsa, no fue vinculado a proceso tras su detención en diciembre del 2017.
Ángeles Cruz Valencia, hija de Pedro Cruz Domínguez, aseguró que en la Fiscalía Regional de Veracruz les fue informado que el caso no tendría ningún avance, debido a que se perdieron pruebas que se contaban para actuar en contra de uno de los presuntos implicados. Se trataría de ojivas de balas que se habrían levantado en la escena del crimen después de los hechos y que eran claves para la vinculación a proceso del actual líder del sindicato de Tamsa, detalló la entrevistada.
Te podría interesar
"Extraviaron unas ojivas que eran para vincular a proceso a Cándido Canseco, me pregunto cómo es que van a perder algo así, esto fue hace a penas como tres meses que dijeron que habían perdido esas ojivas, son unos ineptos, los únicos que tienen justicia son quienes tienen dinero, pero uno que no tiene nada queda a la deriva".
Mercedes Valencia, viuda de Pedro Cruz Domínguez, afirmó que la juez que llevó el caso, desde el inicio favoreció al exlíder sindical, Pascual Lagunes Ochoa, ya que a pocos días de estar en prisión se le concedió arraigo en el área privada del Hospital Regional de Veracruz y posteriormente en su domicilio, antes de ser liberado y exonerado de los señalamientos. Mientras que el otro implicado, el actual líder del sindicato de Tamsa, Cándido Canseco, ni siquiera fue vinculado a proceso.
Del mismo modo, la Fiscalía General del Estado, primero a cargo de Jorge Winckler Ortiz y ahora con Verónica Hernández Giadáns, ha permitido que el caso se mantenga impune, ya que no ha dedicado esfuerzos para esclarecer el homicidio de su esposo y de Margarito Alfaro.
La madrugada que mataron a Margarito y Pedro
Margarito Alfaro y Pedro Cruz Domínguez fueron convocados la noche del 23 de marzo del 2017 por el líder disidente del SNUP, José Carlos Guevara, para tomar posesión de instalaciones del sindicato en la colonia Casas Tamsa de Boca del Río, de acuerdo con lo relatado por sus familiares.
Horas después de atender a esa convocatoria, durante la madrugada, fueron emboscados por un grupo de obreros de la misma empresa, encabezados por el entonces líder, Pascual Lagunes Ochoa. De acuerdo con la información que fue difundida en ese entonces por la propia Fiscalía General del Estado, en la confrontación el grupo que atacó al contingente en el que se encontraba Margarito y Pedro, portaban armas de fuego y tubos.
Los dos obreros no fueron los únicos que fueron alcanzados por los balazos, pero sí fueron los que fallecieron en el lugar. Testimonios de obreros, afirman que fueron movilizados desde la empresa Tenaris Tamsa en autobuses para participar en el enfrentamiento, alentados por el entonces secretario general del SNUP, Pascual Lagunes Ochoa, y su colaborador Cándido Canseco.
Para Ángeles Cruz, hija de Pedro, la Fiscalía General del Estado deslindó de su responsabilidad no solo al líder sindical y a su hombre más cercano y actual dirigente, al no presentar las pruebas que se tenían para inculparlos, sino que también encubrió a la empresa que permitió que los trabajadores abandonaran sus puestos de trabajo para participar en la disputa sindical.
Protestan en sede de la Fiscalía Regional de Veracruz
Con dos ataúdes en los que fueron inscritos los nombres de Pedro Cruz Domínguez y Margarito Alfaro, familiares de los dos ex trabajadores de la empresa Tenaris Tamsa, se manifestaron este viernes 24 de marzo en el exterior de las oficinas de la Fiscalía Regional de Veracruz, ubicadas en la carretera libre federal Veracruz-Xalapa.
Antes de llegar al lugar, marcharon desde la empresa donde ambos trabajaban, reclamando justicia a las autoridades y al cumplirse 6 años del crimen, ocurrido durante la madrugada del 24 de marzo del 2017 en la colonia Casas Tamsa de la ciudad de Boca del Río.
Las viudas de las víctimas fueron atendidas en las oficinas de la Fiscalía Regional. Luego de salir del lugar compartieron que las autoridades se comprometieron a revisar el caso y dar información sobre los señalamientos que hacen respecto al extravío de pruebas. Del mismo modo, afirmaron que la carpeta de investigación seguía abierta y se encontraba radicada en la Fiscalía Regional ubicada en la ciudad de Boca del Río.