“Le pedimos al gobierno e inversionistas que rescaten nuestra historia, que no se pierda nuestra identidad”, dicen Miguel Gómez y Hortencio Rincón, representantes de las facciones Imperio Rojiazul e Independientes, que junto con otras cuatro agrupaciones forman parte de “La Banda del Pirata”, la porra de Los Tiburones Rojos del Veracruz.
Enfundados en el tradicional uniforme rojo y azul, recorren el estadio Luis “Pirata” Fuente, el lugar que vio las victorias y derrotas del equipo rojiazul y que, después de su desafiliación de la Liga MX en 2019, pasó a ser sede de las campañas de vacunación contra el virus que provoca la covid-19.
Tras el reciente anuncio del titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefipla), José Luis Lima Franco, de que a mediados de este año iniciarían los trabajos de rehabilitación del estadio y con ello el regreso del fútbol a Veracruz, los aficionados no se encuentran tan emocionados.
Temen que el regreso implique la imposición de un nuevo equipo, de nuevos colores y que pretendan borrar la historia de los Tiburones Rojos del Veracruz.
{"quote":"“Hay sentimientos encontrados, por un lado, el secretario de Finanzas, José Luis Lima Franco, anuncia la remodelación y usa gif's de Tiburones, el señor gobernador dice que no se puede llamar Tiburones Rojos, que será una nueva historia y meses anteriores el delegado Manuel Huerta anunció que el próximo año habría Tiburones Rojos. No sabemos qué creer y por ello no hay tal emoción”, dice Miguel. "}
Lo mismo opina Hortencio Rincón y las tres mil personas que conforman las distintas facciones de la porra “La Banda del Pirata”.
Todos ellos los une un mismo sentimiento y pasión no solo por el fútbol, sino por su equipo y los colores que representan los más de 70 años de historia que tiene en este deporte.
“Los colores representan mi ciudad, mi estado. Tiene una historia muy bonita, que el “Pirata” Fuente fue el primer mexicano en jugar en cinco países diferentes que fue en España, Uruguay, Argentina, México y eso te marca. Tiburones Rojos le ganó al Real Madrid, aunque sea en partidos amistosos, pero yo no he visto otro club mexicano que le gane”, cuenta Hortencio.
Luis de la Fuente y Hoyos, mejor conocido como “El Pirata”, fue el jugador más representativo del equipo escualo durante la década de los 30 y 40; además, uno de los deportistas del balompié nacional que marcó historia.
Fue el primer jugador mexicano en contratado en Europa al fichar por el Racing de Santander, en 1999 lo incluyeron entre los mejores jugadores del siglo XX en Concacaf por la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol (IFFHS) de la FIFA.
Así como la historia del “El Pirata”, existen muchas otras que alimentan el espíritu de la afición jarocha que pese a las malas rachas se mantienen fiel al equipo.
Intentos fallidos por revivir el fútbol en Veracruz
{"quote":"“La marca de los Tiburones Rojos puede ser más redituable para los empresarios que una nueva marca que nadie conoce”, asegura Miguel. "}
Estas palabras del “El Toro”, como le dicen sus amigos de la barra, tienen un antecedente inmediato, ya que a finales del 2019 se presentaron los equipos Club Deportivo Atlético de Veracruz y el Club Veracruzano de Futbol Tiburón, como la posibilidad del regreso del fútbol profesional al puerto de Veracruz, luego de la desafiliación del equipo escualo.
Un año después anunciaron su salida de la Liga Balompié Mexicano (LBM) y desaparecieron, debido a que la afición no apoyó estos nuevos equipos.
También se vieron envueltos en varios escándalos como adeudos con jugadores o proveedores, suspensiones de partidos, dificultades para contar con un estadio de fútbol profesional y renuncias por incumplimientos o desacuerdos.
Todo lo anterior sin el arropo de una afición que diera apoyo moral, como ocurría con los Tiburones en los momentos de mayor dificultad.
{"quote":"“Nosotros queremos que regresen los Tiburones Rojo, para que no se pierda la tradición. Muchos van a decir que antes se llamaba cuando inicio Club Deportivo Veracruz, sí, pero se mantenía Tiburones Rojo, no se tenía ningún otro color ni otro símbolo”, dice Hortencio. "}
Ambos aficionados tienen más de 20 años de ser parte de las barras que apoyan al “tibu” y que lo hicieron parte de su andar cotidiano.
En el caso de Miguel, se unió a la barra desde niño, cuenta que asistía con sus amigos y familiares, recuerda la emoción y adrenalina de participar en cada partido, de viajar a otros estados para apoyar a su equipo y de seguir al pie del cañón.
“Esto no es un gusto, es un estilo de vida, esto es lo que representa el barrismo de Los Tiburones Rojos”, dice Miguel.
Hortencio, incluso, hizo de este deporte su lugar de trabajo, pues cuenta con un centro de formación de futbolistas, con el cual llegó a viajar a Colombia para armar una franquicia de los Tiburones Rojos.
Actualmente, los aficionados se reúnen esporádicamente en fechas importantes para el equipo, la más reciente fue el 4 de abril de este año, los integrantes de las barras pintaron la barda del estadio.
También están por realizar un mural con jugadores representativos del equipo denominado “Sangre Jarocha”, esto en la Unidad Deportiva Salvador Campa.
Historia y escándalos
Los Tiburones Rojos del Veracruz comenzaron a escribir su historia el 9 de abril de 1943, en aquel tiempo se llamaban Club Deportivo Veracruz, tiempo después el cronista deportivo veracruzano, Manuel Seyde, bautizó al equipo como se conoce actualmente y adoptó al tiburón como su mascota oficial.
Los colores que identifican al club son el rojo y el azul. El rojo es el color adoptado por los equipos de la entidad veracruzana como símbolo de fuerza, pasión, coraje y azul representa el océano.
Durante todos esos años desfilaron distintos jugadores reconocidos como Luis ''Pirata'' de la Fuente, Jorge Comas, Cuauhtémoc Blanco, Ubiracy Mariano Da Silva, entre otros.
En su historia cuenta con cinco descensos y logró ganar dos campeonatos de liga en 1945-1946 y 1949-1950.
En sus vitrinas se encuentra la Copa México que ganó en 1947-1948, así como la Copa MX que logró en el torneo Clausura 2016 con el chileno Carlos Reinoso.
Por problemas económicos y políticos, mientras jugaba en la Primera División de México, la Federación Mexicana de Futbol (FMF) desafilió al equipo de todas sus competiciones, en diciembre de 2019.
Esto fue un golpe duro para la afición, pero lo aceptaron con resignación, pues aseguran que ya le hacía falta un respiro al equipo escualo.
Desde entonces la incertidumbre de saber qué pasaría con el equipo llenó los pensamientos de la afición, pues no sabían qué pasaría con la franquicia.
En mayo, el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, dijo en conferencia de prensa que antes de que acabara su sexenio podría regresar el equipo Tiburones Rojos con ayuda del empresario regiomontano Carlos Bremer, quien ayudaría a quitar el bloqueo legal con la FMF.
Los aficionados como Miguel y Hortencio esperan que estas promesas se cumplan y regrese el tibu a jugar al Pirata, pues no están dispuestos a renunciar a la historia que envuelve a Los Tiburones Rojos del Veracruz.
am