Bajo la sombra de dos árboles, apoyados de sillas de plástico, banquitos y mesas que los padres de familia traen desde sus casas, toman clases los estudiantes de la Escuela Telesecundaria Carmen Serdán en la ciudad de Veracruz.
Un terreno baldío, rodeado por una barda, ubicado en el fraccionamiento El Coyol, es el espacio que ocupan los maestros para dar sus clases a más de cien alumnos de tres grados escolares.
De acuerdo con los padres de familia, desde hace un mes toman clases a la intemperie debido a que la escuela donde antes estaban sufrió de robos y vandalismos durante la suspensión de clases por la pandemia de la covid.
Desde que inició la pandemia se tiene el registro de 130 escuelas que sufrieron robos y vandalismo, algunas hasta en dos o tres ocasiones para sumar en total 248 eventos de robos.
Además del saqueo, desde hace varios años sufrían de inundaciones en temporada de lluvia, por lo que la zona fue catalogada como no apta para que los estudiantes tomaran clases.
Por estas razones fueron reubicados a este predio, sin embargo, la construcción de las aulas escolares se detuvo desde hace un año.
{"quote":"“Tenemos el terreno pero no tenemos aulas, por la pandemia estábamos en línea, pero era necesario que los niños regresaran presenciales”, contó Vianey Hernández, una de las madres de familia."}
Vianey espera a su hija, junto a otras madres, resguardan el espacio que será la salida de la escuela.
Aseguraron que por la inseguridad les da miedo dejar a sus hijos, ya que el espacio no cuenta con protección, solo la barda que divide el perímetro.
No obstante, era necesario el regreso, pues muchos padres no cuentan con los recursos suficientes para realizar recargas o pagar el servicio de Internet para continuar las clases a distancia.
Este es el caso de Vianey, ella pagaba cien pesos a la semana de recarga, una cantidad difícil de cubrir con la escasez de trabajo.
{"quote":"“Era mucho trabajo estar con las clases en línea, luego tenías que estar pagando Internet, los que no teníamos internet teníamos que meter saldo para que los niños estuvieran en clases”, contó."}
Debido a las condiciones del tiempo, solo acuden a la escuela los días lunes, miércoles y jueves en un horario de 8:00 a 10:00 de la mañana, pues no cuentan con baños, ni techo para quedarse más horas.
Por falta de escrituras no pueden seguir con construcción
El pasado 26 de mayo los padres de familia decidieron manifestarse por la falta de aulas, aseguraban que desde hace un año personal de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) les había prometido el apoyo que otorga el programa “La Escuela es Nuestra”, pero no veían avances.
Al respecto, la delegada de la SEV región Veracruz, Diana Santiago Huesca, señaló que en febrero del 2021 acudieron al lugar para revisar la situación en la que se encontraban los alumnos y maestros de la escuela.
En conjunto con personal de Instituto Veracruzano de la Vivienda (Invivienda), acordaron donar el terreno donde los alumnos toman clases, para posteriormente iniciar la construcción de la escuela.
Sin embargo, los retrasó la falta de escrituras de lugar, debido a que les falta una cédula catastrar que el Ayuntamiento de Veracruz no les ha entregado.
{"quote":"“Invivienda no tiene respuesta por parte del Ayuntamiento de Veracruz, esto desde la administración pasada. Ellos argumentan que por alguna razón en su registro el terreno parece que tiene dueño. Nos dieron el nombre de una empresa que no existe y que dio un domicilio fiscal falso”, indicó la delegada."}
Aseguró que desconocen la manera en la que se hizo el trámite para que esta empresa pusiera su domicilio en un terreno que le pertenece a Invivienda.
Tras esto volvieron a visitar a los alumnos y maestros de la escuela, para ver en qué forma se podría solucionar la falta de aulas.
También señaló que se habían destinado cuatro aulas móviles para colocarlas en el terreno en lo que la escuela se construía, pero los padres prefirieron esperar a que terminaran la construcción.
Actualmente los padres volvieron a solicitar las aulas móviles, sin embargo, solo hay dos disponibles, ya que durante la pandemia fueron robadas y vandalizadas, por lo que no se encuentran en las condiciones para ser ocupadas.
Santiago Huesca indicó que se buscan la manera de rehabilitar las aulas móviles para entregarla a los alumnos.
Por último, comentó que se espera que a principios de agosto comience la construcción de la primera etapa.
Los padres de familia de la escuela Carmen Serdán esperan que las autoridades educativas les cumplan con construir las aulas, pues aseguran que sus hijos merecen tener salones dignos donde puedan tomar clases sin preocuparse por la lluvia ni el sol.
mb