El hallazgo de una osamenta en la zona donde se localizaron vestigios arqueológicos en el fraccionamiento Lomas de Río Medio 4, de la ciudad de Veracruz, sorprendió a especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y vecinos.
Los restos fueron encontrados por Fernando Morales, quien dio el primer aviso a la dependencia federal el 18 de abril, sobre la localización de diversos fragmentos de piezas de cerámica en los alrededores de una de las dunas ubicadas al fondo del fraccionamiento.
Fernando decidió realizar el resguardo de un cráneo y dos huesos más que vio en el sitio mientras caminaba, ya que en ese momento se percató que varias personas escarbaban en el lugar y se llevaban consigo diversas piezas arqueológicas que se encontraban enterradas.
El saqueo de los fragmentos de piezas prehispánicas fue denunciado por el vecino desde el jueves 28 de abril, al día siguiente personal del Centro INAH-Veracruz acudió a su domicilio para resguardar las primeras piezas de cerámica que había encontrado, entre ellas dos cabezas talladas en arcilla.
Aunque en ese momento se prometió que se resguardaría el sitio, fue hasta este miércoles 4 de mayo que se acordonó el área, se colocaron letreros de advertencia y se pidió el resguardo de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Especialistas del INAH acudieron este mismo día al domicilio de Fernando para resguardar la osamenta que encontró y validar que se trata de restos de un entierro prehispánico, que por sus características tendría entre mil 200 y mil 500 años de antigüedad.
De acuerdo con arqueólogos, los vestigios hallados en Lomas 4 pertenecen a la civilización denominada como Cultura del Centro de Veracruz, contemporánea de los Mayas y antecesora de los pueblos Totonacos.
El arqueólogo del INAH, Luis Heredia, explicó que dicha cultura no tenía concepto de cementerio y acostumbraba a enterrar a sus familiares fallecidos dentro de sus viviendas, como una costumbre que les permitía rendirles tributo y convivir con ellos.
La explicación del arqueólogo ofrecida mientras realizó el resguardo de las primeras piezas, adelantaba que en el lugar podrían encontrarse restos humanos.
Según explicó, la empresa constructora que realizaba la extracción de tierra ofreció las facilidades para suspender sus obras, en tanto se realizaba la exploración y estudio del terreno, para realizar el rescate arqueológico.
mb