Este 1 de enero de 2022 el alcalde Humberto Alonso Morelli dejará la administración boqueña con cuatro temas pendientes que cobraron relevancia porque se presentaron en su momento como grandes proyectos o porque deberán cumplirse forzosamente por su sucesor Juan Manuel Unanue.
Juan Manuel Unanue
A inicios de su administración Alonso Morelli lanzó su Plan de Desarrollo Municipal 2018-2021, entre los cuales contemplaba abarcar proyectos en distintos sectores como salud, asistencia social, vivienda, participación ciudadana, educación y cultura.
Alonso Morelli
Algunos de estos proyectos no lograron realizarse o quedaron inconclusos, debido a la falta de tiempo o factores externos que complicaron la recepción de ingresos al municipio.
Cabe recordar que a inicios del 2019 hubo un recorte en el presupuesto por parte de la Federación, lo que incluía la desaparición de diversos programas regionales para los municipios del país.
Ante esto muchos alcaldes mostraron su inconformidad, pues este recorte impediría la realización de obras.
Uno de ellos fue el alcalde Alonso Morelli, quien aseguró a medios locales que esto complicaría la realización de obras municipales.
Buque Guanajuato
A inicios de su administración, en el 2018 Alonso Morelli anunció el rescate del buque Guanajuato, tras años de permanecer en el olvidó por administraciones pasadas, lo que originó un desgaste y notorios daños en la embarcación que se encuentra encallado frente a Plaza Velas.
Este buque sirvió como uno de los atractivos turísticos para Boca del Río, la importancia que recae en esta embarcación llamada ARM Guanajuato C-07, se debe a que durante 70 años dio servicio a la Secretaría de Marina -Armada de México y participó en la Segunda Guerra mundial.
Fue donado al Gobierno de Veracruz en el año 2001, por el entonces presidente Vicente Fox Quesada, como un homenaje a los marinos que perdieron la vida durante la invasión norteamericana de 1914.
Para el año 2007 el Gobierno del Estado solicitó al Congreso Local la entrega del buque por un periodo de seis años al municipio de Boca del Río.
Después fue entregado en comodato a la Sociedad Ecológica Aqua, Terra Ventus SC, durante este periodo tuvo un desgaste en su infraestructura, debido al poco mantenimiento que se le dio.
Tras el vencimiento de la concesión, el buque Guanajuato fue entregado de nueva cuenta al Ayuntamiento de Boca del Río, el cual lo incluyó en los más de 10 proyectos museográficos.
La inversión que se requería era de 50 millones de pesos, sin embargo, el Ayuntamiento solo contaba con nueve millones para iniciar la rehabilitación.
Por lo que se había conformado una mesa de coordinación colegiada para su rescate, con participación de la Secretaría de Marina –Armada de México.
El cañonero Guanajuato continuaría siendo el primer buque museo de América y la rehabilitación concluiría a inicios del 2020.
Un proceso que paró con la entrada de la pandemia de la covid-19, pues con el confinamiento se detuvieron las reuniones que el municipio tenía con personal de la Secretaría de Marina.
En el mes de marzo de este año, el alcalde confirmó que el proyecto de rescate del buque seguía en pie, pero que no podría terminarse en esta administración debido a que la Administración Portuaria Integral de Veracruz (Apiver) no entregó las tabalaestacas que se necesita para anclar el buque.
Parque ecológico Arroyo Moreno
Entre los proyectos que también se anunciaron en el Plan de Obras de 2018 para el municipio de Boca de Río, se contemplaba la realización del Parque Ecoturístico del manglar en la zona de Arroyo Moreno, con una inversión de 60 millones de pesos que invertiría el Gobierno Estatal, en ese entonces a cargo del panista Miguel Ángel Yunes Linares.
La intención de este parque era rescatar el ecosistema y convertirlo en un área recreativa y de protección ambiental.
Aunque no se dio mayores informes sobre este proyecto, meses después ambientalistas y ejidatarios se opusieron a la realización del parque, pues señalaban que atentaba contra leyes ambientales y se devastarían áreas de manglares que se encuentran protegidos.
Además, se pretendía engañar a los ejidatarios para que vendieran sus hectáreas a un precio mucho más bajo de lo que valían, añadió Carlos Alberto Butrón Valenzuela, regidor de Boca del Río.
Debido a esto interpusieron una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa).
“Querían iniciar un proceso remediación, supuestamente, para lo cual bajaron 64 millones de pesos, los cuales desaparecieron porque se les hizo una auditoria para ver que habían hecho, únicamente pudieron justificar 10 millones y lo demás no se sabe dónde quedó”, aseguró Butrón Valenzuela.
Infraestructura para ciclistas quedó a deber
El Plan de Desarrollo Municipal también incluía mejorar las condiciones de movilidad de los ciudadanos boqueños, en el cual señalaba que se realizarían proyectos y políticas públicas enfocadas a ciclistas.
Aunque la administración del panista realizó proyectos para esta parte de la población, usuarios indicaron que solo se concentran en zonas turísticas y comerciales y no en toda la ciudad como debería de ser.
Además los proyectos realizados en el camellón del bulevar Adolfo Ruiz Cortínez, que fue remodelado colocando una pista para la circulación de estos vehículos, no son exclusivos para los ciclistas, sino que son utilizados como paseo turístico.
Los escasos 1.5 km de longitud que se supone deben de ser utilizados por los ciclistas, son poco transitados debido a que se encuentran en medio de dos vías de circulación de carros.
Otro de los puntos clave que indicaba el Plan de Desarrollo Municipal era la adopción de bicicletas como medio de transporte, por medio de una aplicación de celular donde se rentaban por horas para realizar el traslado.
Aunque en un inicio este proyecto fue catalogado como exitoso por parte del mandatario, tras algunos meses la demanda de las bicicletas disminuyó.
El robo y vandalismos acabó con desparecer el proyecto, actualmente fueron retiradas de los espacios públicos.
Laudos laborales
Una deuda que se vino heredando desde administraciones pasadas fueron los laudos laborales.
Morelli recibió la alcaldía con 85 laudos laborales que procedían desde hace 12 años, algunos de ellos eran por despidos injustificados o condiciones laborales no arregladas.
En marzo del 2020, otros 10 trabajadores denunciaron que el Ayuntamiento boqueño debía pagar 10 millones de pesos y reinstalarlos en los puestos que desempeñaban desde antes del 2014.
Fue en ese mismo año que el Tribunal de Conciliación y Arbitraje les dio un laudo a su favor, ya que fueron despedidos injustificadamente durante la administración de Miguel Ángel Yunes Márquez, por lo que obligaba a reinstalarlos a sus funciones.
Hasta el momento el Ayuntamiento de Boca del Río ha pagado 25 de estos compromisos laborales, el cual asciende a más de 20 millones de pesos, dejando un total de 60 laudos pendientes para la administración de Unanue Abascal, quien deberá continuar y resarcir estos daños laborales.