Reconocer los problemas, el acierto de Nahle
Rocío Nahle García, gobernadora de Veracruz, se ha distinguido por una característica que resulta incómoda a la clase gobernante: reconocer los problemas de la entidad que gobiernan. Le pasó a Cuitláhuac, a Yunes y a Duarte. La mandataria reconoció la mafia de las grúas y les quitó las concesiones. Reconoció el video de dos oficiales de tránsito pidiendo “moche” en el norte del estado y los dio de baja. Lo mismo pasó con el cobro de piso; lejos de negarlo reconoció que el delito que no cesa y que solicitará endurecer las sanciones, muy en sintonía con la presidenta Claudia Sheinbaum. No negó el desabasto de medicamentos, las obras mal hechas que heredó. Hoy propone cambiar las tarifas de taxis, problema que no reconocieron sus antecesores durante 23 años. Una manera distinta de hacer política. “La gobernadora soy yo”, dijo este lunes al asegurar que también será ella quien hable en temas de seguridad.
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