XALAPA, VER.- Familiares de los Jorge y Alberto Cortina, habitantes de Totalco que fueron asesinado en el desalojo de la carretera Puebla-Perote el jueves 20 de junio, acudieron al palacio municipal de Perote a una mesa de diálogo que sería con el titular de la Subsecretaría de gobierno del Estado, Sergio Montes Guzman.
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La reunión se había pactado a las 11 de la mañana, sin embargo, solo llegaron funcionarios de la comisión de Víctimas, quienes ofrecieron atención psicológica a los familiares de las Jorge y Alberto, que murieron a manos de los policías, así como becas para los seis menores y una indemnización.
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“Yo vengo a platicar con ustedes sobre la atención que podemos brindar desde nuestra institución para brindar atención al caso que hoy nos atiendo”, dijo el representante de la Comisión de Víctimas.
“A qué venimos, directo, a qué venimos. Sí me molesta desde que entré, porque no veo al subsecretario de gobierno, que dijo que iba a estar aquí, me agarraron de pendejo. Di la cara por ustedes, hasta por el gobierno del estado, usted a qué viene, qué solución nos viene a dar”, cuestionó Pedro Romero, agente municipal de Perote.
La reunión no duró más de 40 minutos, pues ante la ausencia del subsecretario de gobierno los habitantes de Totalco pidieron al representante de la Comisión de Víctimas llamarlo para obligarlo a acudir al palacio municipal, pero este no atendió la petición y las familias se salieron del salón.
Los pobladores criticaron la postura del gobierno que llegó a ofrecer dinero para los deudos, cuando lo que están pidiendo es justicia y que se dé a conocer quienes son los responsables del asesinato de los dos pobladores.
Incluso, plantearon que ante la cercanía de la conclusión de la actual administración es probable que si no se da solución de inmediato el tema se pueda olvidar por el nuevo gobierno.
Expusieron que no es posible que el gobernador Cuitláhuac García o el titular de la Secretaría de Seguridad Pública no tengan claro quién accionó el arma, cuando ellos dieron la orden de ir a desalojar a los manifestantes, por lo que pidieron conocer el nombre de los policías que dispararon contra los hermanos.
Dijeron que si bien se ordenó la disolución de la Fuerza Civil, solo van a cambiar de uniformes y seguirán los mismos elementos que fueron los que accionaron sus armas contra los pobladores, por lo que dijeron no confiar en la fuerza civil.
Aseguran que viven con miedo, pues las personas que fueron lesionadas y golpeadas por los policías están amenazados, incluso, se suspendieron las clases en la comunidad tras la irrupción de los policías en las viviendas.
El agente municipal Pedro Romero señaló que el subsecretario dio su palabra de estar presente para firmar la minuta, con la idea de que las personas liberaran la carretera estatal en días pasados, sin embargo, presumen que solo lo hizo para permitir que Granjas Carroll reactivaran su actividad económica y valoraron la cita en las instalaciones del palacio municipal como una tomada de pelo.
Recriminaron la falta de atención a los pobladores tras pasar la época electoral:
“Que tal que hubiera sido en época de campaña, disculpen la palabra, pero como perros habrían venido todos y después de que les dimos el voto nadie se apareció. A dónde está el gobernador, que anduvieron pidiendo el voto y ahorita que se necesita el apoyo dónde están”.
Valoraron como una burla que el gobernador dijera, en conferencia, de prensa que ya había hablado con las familias directamente, cuando ellos no han tenido contacto con el, “a nosotros nadie nos ha apoyado, más que el pueblo que hoy exige justicia”.
fm