INCENDIOS FORESTALES

Daños por incendio en Altas Montañas causarán estragos en producción agrícola

Autoridades de los municipios afectados señalan que además de campos de cultivo, se destruyeron 50 hectáreas de pino que acababan de ser reforestadas

Escrito en VERACRUZ el

XALAPA, VER. - Los incendios que se registraron en la zona de las Altas Montañas han dejado un saldo rojo para los productores locales, así como para familias que se dedican a la siembra de árboles. En el informe de Protección Civil del Estado del 29 de marzo, se reportó la liquidación del incendio de Soledad Atzompa, controlado; y 95% de liquidación en Huiloapan-Mendoza; 90% de control y 70 por ciento de liquidación en Maltrata.

Desde el domingo 24 de marzo se reportaron incendios forestales en los municipios de Soledad Atzompa, Nogales, Maltrata, Huiloapan de Cuauhtémoc, y Texhuacan, desde esa fecha se han realizado trabajos para controlarlos. El miércoles 27 de marzo, se habló que el fuego ocasionó afectaciones en mil 650 hectáreas.

Agentes municipales y productores han dado a conocer que parte de los daños que generó el fuego tendrán impacto en la alimentación de decenas de pobladores de la región.

Entre las afectaciones se calcula que más de 700 hectáreas de rábano, calabaza, quelites, acelgas y espinacas de los municipios de Nogales, Huiloapan y Ciudad Mendoza se quemaron. Sumado a que el área se usaba para el pastoreo de ganado y se producía follaje para la manutención de animales de granja.

El 67 por ciento de los productos de los municipios se usaban para el consumo de las familias, en tanto, que el otro 33 por ciento se comercializa, lo que les garantizan ingresos a los pobladores.

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En el municipio de Rafael Delgado, el agente municipal de Omiquila, José Fernando Cortés Santoyo confirmó que se perdieron 50 hectáreas de pino patula, que se sembraron hace 20 años, cuando se realizó una reforestación en la zona.

El productor mencionó que en el pasado Semarnat y Conafor les daban hasta mil 570 pesos por hectárea para el cuidado de los árboles, sin embargo, al perderse al quemarse las especies, perderán los ingresos.

Solo 6 familias de las 300 que habitan en el municipio son beneficiarias del programa Procampo; jamás recibieron recursos de Sembrando Vida, informó el agente municipal.

mb