XALAPA, VER.- El gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez reconoció que existen dos casos de asesinatos de periodistas en los que no se ha logrado esclarecer quién fue el autor intelectual.
En conferencia de prensa reconoció que el caso de Regina Martínez, asesinada en abril del 2012, al interior de su vivienda, la versión de la Fiscalía del Estado estuvo muy “manoseada”.
Es lo que llevó a la Fiscalía General de la República a atraer el caso, y al igual que el presidente está muy interesado en que se pueda dar con los responsables materiales e intelectuales del crimen.
“Recuerden que fue alimentado por todo tipo de acciones para ocultar (pruebas) de gobiernos anteriores, de resolverlo y de que no quedara nada claro. Sacaron dos culpables que obtuvieron amparo, fue un manoseo y por eso se dio la atracción, entonces está en manos de la FGR”.
En ese sentido, pidió a la Fiscalía General conocer cómo va el caso y se aclare no sólo quién la asesinó, sino por qué.
“Tendrían que decirnos cómo va, tenemos interés de que avance y se aclare” dijo y mencionó que desde el primer contacto con la ahora Fiscal General del Estado, pidió que en los asesinatos de los comunicadores siempre se considere la profesión como una de las principales líneas de investigación.
Inclusive, dijo, se ha pedido que las investigaciones no se queden solo en el tema de los autores materiales, se debe establecer la responsabilidad intelectual de cada caso.
Comparó la muerte de Regina Martínez y de Rubén Espinosa, asesinado en la ciudad de México en 2015, con el caso de Luis Donaldo Colosio en donde se presentó al asesino, pero nunca se dijo quién planteó el crimen.
“Es el caso de Regina, que duele y el de Espinosa, fotógrafo, porque en ambos casos nunca se quiso dar con las autoridades intelectuales, como el asesinato de Colosio”, planteó.
mb