BOCA DEL RÍO, VER.- María Luisa Diliegros Calles planeó pasar la tarde noche del jueves 20 de abril con su hijo Luis Farid, de 2 años, y su esposo Luis Ángel, en un restaurante de la cadena McDonald's, pero murió luego de que la moto en la que viajaban fue embestida por un automovilista cuando esperaban el cambio de luces en el semáforo ubicado en el cruce de las avenidas Donato Casas y Ejército Mexicano, en la ciudad de Boca del Río.
Su esposo relató a la familia que no tuvo tiempo de nada. Observó que el automóvil que venía detrás no reducía su velocidad a pesar del color rojo del semáforo y sin tener tiempo de moverse le pegó. Del golpe los tres salieron proyectados al pavimento, a él le destrozó los huesos del hombro, pero su esposa María Luisa había llevado la peor parte.
Aturdido trató de incorporarse para ver como estaban ella y su hijo Luis Farid. Ambos estaban inconscientes, María Luisa ya no despertó, paramédicos de Bomberos Conurbados la trasladaron a un hospital en donde más tarde falleció por las heridas causadas por el golpe del automóvil.
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Luis Ángel cuenta que en el último instante antes del accidente, María Luisa alcanzó a cubrir con su cuerpo y sus brazos a su hijo. Cuando los alcanzó para ver como estaban, ella todavía lo sostenía con fuerzas. Le salvó la vida, afirma su prima Monserrat Calles, quien está convencida, al igual que toda su familia, que fue un acto de amor.
Luis Farid es el hijo más pequeño que deja María Luisa, dos menores más, de 10 y 14 años, se quedaron huérfanos. El menor solo tuvo raspones del accidente, pero desde entonces no deja de ver y abrazar la fotografía de su madre, que fue colocada junto al ataúd en el que es velada.
No queremos linchamiento, queremos justicia
El responsable de embestir con el auto a María Luisa y su familia cuando estaban sobre su motocicleta esperando el cambio de luces en el semáforo, fue identificado como Eduardo OM, quien presuntamente conducía en estado de ebriedad. El hombre se encuentra detenido y enfrentaría cargos debido a que al momento de los hechos huyó del sitio.
Eduardo OM fue detenido a varios kilómetros de distancia, en el fraccionamiento La Tampiquera, sólo porque en la huida causó diversos accidentes, el último habría detenido la marcha de su automóvil Accord Honda. Los hechos provocaron el linchamiento mediático en redes sociales, en donde se difundió su identidad y la de su familia, para exigir a las autoridades justicia.
La familia de María Luisa exige que las autoridades hagan justicia por la responsabilidad que haya tenido Eduardo OM en la muerte de la joven, pero rechaza que exista algún acoso o linchamiento en contra del hombre que conducía el automóvil o sus familiares.
"La gente está muy molesta, yo obvio, son sentimientos encontrados, lo que nosotros queríamos es que se hiciera justicia, que las autoridades nos ayuden a que todo se haga de manera justa, nosotros no queremos que se ejerza violencia contra el señor ni contra su familia, solo que se exija justicia", agrega Montserrat Calles.
Era chida y trabajadora
María Luisa Diliegros Calles tenía 30 años, tenía su residencia en la colonia Patricio Chirinos, en la ciudad de Boca del Río, en donde era conocido por vecinas y vecinos porque procuraba saludar siempre. Con algunos tenía una amistad de varios años y en ocasiones se detenían a conversar.
Este sábado 22 de abril, en medio de la versión sobre la liberación de Eduardo OM, quien habría causado su muerte, se reunieron en su funeral para mostrar el apoyo a la familia y manifestar a las autoridades la exigencia de justicia, para que el responsable asuma las consecuencias de sus actos. En los alrededores de su casa, en donde es velada, fueron colocadas cartulinas en las que se pide justicia por María Luisa.
Su prima Montserrat Calles se dice consternada por la pérdida de María Luisa, pero agradecida por el apoyo que vecinos, que a pesar de sus ocupaciones se tomaron el tiempo de organizarse para sumarse a la exigencia de justicia para la familia, reunida alrededor del féretro donde es velada.
Montserrat Calles dice que María Luisa será recordada siempre porque era una joven alegre, inquieta, trabajadora porque le gustaba siempre tener un poco más. Este fin de semana, será la primera vez en mucho tiempo que ya no la acompañará al puesto de ropa americana que tienen en el tianguis de la colona Carranza.
"Mi prima nunca se conformó, siempre buscaba un poquito más, muy trabajadora. Era una persona muy chida. Nosotros no teníamos idea de todo lo que ella iba a generar. Siempre le decíamos que se debería lanzar al estrellato, que se hiciera influencer, pero les decía que qué triste que se hiciera viral sin ella estar aquí", agrega.
vtr