Acaxochitlán.— En el Centro Cultural Corazón de Barro Rojo se llevó a cabo la presentación de actividades del Festival Universitario del Hongo y la Manzana, en su novena edición, que se realizará del 16 al 18 de agosto con el propósito de fomentar el turismo y preservar el patrimonio cultural de pueblo mágico.
El festival es un evento que se ha consolidado como un proyecto social y colaborativo entre el municipio de Acaxochitlán y la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) desde el 2012, con el objetivo de reconocer y visibilizar a las nanakateras y cocineras tradicionales y su conocimiento como patrimonio cultural vivo.
El regidor Alejandro González recordó que el inicio del proyecto colectivo fue rescatar el consumo de los hongos silvestres y con su evolución —además de difundir la biodiversidad—, se ha logrado ampliar la oferta gastronómica, académica, artísticas y cultural. Este año como novedad se realiza el primer concurso de tapetes de aserrín, que se suma al de fotografía y gastronomía.
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“Hay un compromiso de la universidad no sólo con las nanakateras sino también de generar acciones para preservar la biodiversidad en Acaxochitlán, por eso se lleva a cabo un programa que concientice a la sociedad sobre la importancia que tienen los hongos, por sus propiedades que aporta a los ecosistemas y a un futuro sustentable”, indicó Otilio Acevedo Sandoval, coordinador del Festival Universitario del Hongo y la Manzana.
Habrá comida, libros, bebida y más
El programa tendrá más de 30 actividades culturales: presentaciones editoriales, proyecciones, conferencias con académicos, conversatorios, talleres y cursos con nanakateras, actividades con representantes del Consejo Estatal de Biodiversidad de Hidalgo, la callejoneada y conciertos de trova en la cabecera municipal.
Asimismo, el titular de Turismo y Cultura municipal, Arturo Castelán Zacatenco, mencionó que un elemento igual de importante en el festival será la manzana, ya que forma parte de la identidad del pueblo mágico, por la producción de esta fruta que se comercializa en diferentes productos elaborados localmente como conservas, sidras y refrescos.
Para esta edición se estima una afluencia de 12 mil asistentes, con una derrama económica por consumo de 130 pesos por persona, que se distribuye en el municipio entre artesanos, comerciantes, cocineras tradicionales y otros prestadores de servicios; también se espera el aumento en pernota de un 80 a 90 por ciento en la ocupación hotelera.
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