HUICHAPAN.- Hidalgo está lleno de lugares secretos que se pueden visitar en familia, amigos, pareja y hasta en solitario para así tener un fin de semana o unas vacaciones completamente distintas y un sitio de esos es una cueva donde se dice nunca anochece e incluso era un posible centro ceremonial.
Hay una discusión sobre si se trata de una formación natural o hecha por la mano humana, pues posee una iluminación bastante optimizada que además de que el interior nunca queda en penumbras, algunos pasillos son cubiertos con la luz del Sol, por lo que es un lugar que atrae a muchos visitantes quienes quedan maravillados.
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La cueva que da titulo a esta nota informativa se encuentra dentro del bioparque Los Arcos-El Saucillo en el municipio de Huichapan, donde es posible ver otros increíbles atractivos turísticos como un acueducto con esquinas y hasta se pueden practicar algunos deportes extremos o en contacto con la naturaleza.
Por lo que te invitamos a leer este texto para que sepas todos los detalles que necesitas saber, para luego ahora sí poder hacer las maletas y lanzarte a conocer lo que será tu siguiente destino favorito que es la caverna secreta en el estado de Hidalgo donde se dice que prácticamente nunca anochece.
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Una cueva natural o hecha por humanos
Aunque no posee un nombre específico, la cueva es bastante llamativa, pues cuando se visite siempre se encontrará iluminada, independientemente de la posición del Sol en el cielo, razón por la cual algunos paseantes piensan que es hecha por humanos, aunque otros más defienden a la Tierra y aseguran es completamente natural.
Sobre el primer argumento, la construcción se atribuye a grupos indígenas ancestrales como los aztecas u otomíes, quienes usaban el interior como un centro ceremonial donde practicaban su fe religiosa al hacer ofrendas principalmente y algunos ritos que aún son desconocidos por los pocos estudios hechos.
Como referencia, la cueva considerada como única se localiza a unos metros del acueducto El Saucillo, aunque se debe tener cuidado, pues no está insertada entre montañas, sino debajo del suelo; aunque está señalada y posee un barandal con ramas. Adentro se percibirá un olor a humedad, pero vale la pena la visita.
Si se baja con cuidado, se podrá llegar a lo más profundo que alberga algunas columnas que sostienen el suelo; algunos turistas recomiendan prestar atención, pues las bases tienen formas como un elefante y más. Se puede caminar con seguridad para llegar a más corredores o cámaras que se iluminan con el Sol.
¿Más cuevas? Busca las cavernas trogloditas
Si la cueva secreta de Hidalgo donde nunca anochece no es suficiente, igual en Huichapan se puede ir a las llamadas cavernas trogloditas que son bastante curiosas, pues algunas sí fueron hechas por humanos, pero otras son producto de la erosión al estar cerca de una presa, aunque está un poco seca por el estiaje.
Huichapan tiene el acueducto más alto de Latinoamérica
Ya en los atractivos turísticos que solo Huichapan tiene para los paseantes, destaca el acueducto El Saucillo que es considerado como el más alto de Latinoamérica y que estar abierto al publico totalmente gratis e incluso se puede caminar sobre el canal, ya que antes servía como puente para personas y ganado.
Esa obra arquitectónica data del año 1732 y perteneció a la hacienda El Saucillo que fue mandada construir por Manuel González Ponce de León para que hubiera una fuente de agua y con su tamaño abastecía otras fincas de la región; un secreto más es que posee esquinas debido a su diseño.
En más para visitar, queda El Chapitel, donde se conmemoró por primera vez en 1812 el aniversario de la Independencia de México; se puede ir al museo de arqueología e historia que guarda testigos desde lo prehispánico a lo moderno; está su parroquia de San Mateo construida entre 1753 y 1763, entre otros lugares.
Así llegas
Pata visitar la cueva secreta de Hidalgo donde nunca anochece es preferible llegar a la cabecera municipal de Huichapan, que queda a una distancia de 127 kilómetros (km) desde Pachuca, que en promedio se transita en 2.10 horas en automóvil; para ir desde CDMX, las cifras suben a 167 km o 2.51 horas.
cem