León.- De acuerdo con datos históricos, en 1810 León era una villa habitada por entre 10 y 15 mil personas, cuando en ese tiempo el Templo del Señor de la Paz (Construido en 1625), en la esquina de las calles actuales Francisco I. Madero y Motolinía, se encontraba en la orilla de la ciudad, sitio donde los arrieros se persignaban al salir de la ciudad.
En el Archivo Histórico de León, existen documentos que señalan que también estaba en los límites de la ciudad, en 1810, el Templo de San Juan de Dios, construido en 1642 por los misioneros juaninos y que en sus inicios fue destinado a ser un hospital que se encontraba afuera de la Villa de León.
Otro de los sitios emblemáticos de León en los tiempos del inicio de la Guerra de Independencia, era el Puente del Coecillo, que ya existía desde 1580 (Primer puente construido 4 años después de la fundación de la ciudad), y que era la única entrada en tiempos del Virreinato a una ciudad conformada por sólo 24 cuadras.
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Otros edificios eran la Excárcel en la zona centro (En la esquina de las calles Justo Sierra y Belisario Domínguez) y la casona de Ignacio de Obregón (Esquina de Pedro Moreno y 5 de Mayo).
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Cabe señalar que desde ese tiempo, los principales trabajos a los que se dedicaban los leoneses, aparte de la agricultura y el pastoreo de ganado, funcionaban talleres para la elaboración de una diversidad de artículos para la elaboración de sillas, zapatos y rebozos, además de la curtiduría, en los que laboraban principalmente mulatos, mestizos e indios.
León en la Lucha por la Independencia
Luis Alegre Vega, cronista de la ciudad, manifestó que León es un pueblo que sí participó y tiene una historia real en las dos etapas de la Independencia:
“A partir del 27 de septiembre de 1810, esta fue una de las villas insurgentes, que por más de tres meses contó con un gobierno libre. En una segunda etapa, que es la que se conmemora en 1821, fuimos otra de las villas que sí se unió de una manera firme y muy decidida a la lucha por la libertad, lo que se traduce en un orgullo muy profundo para los guanajuatenses”, comunicó
Destacó que Guanajuato fue el primer estado en obtener su libertad, y esto lo consiguió sin ejercer violencia. “Este fue el primer territorio libre de la Nueva España, hace 200 años, y fue sin violencia, sin un disparo, siendo la primera entidad que se declaró formalmente libre”.
Los primeros insurgentes
En 1810, los principales insurgentes leoneses que apoyaron a Hidalgo fueron José Ramón de Hoyos y José Manuel de Austri, quienes ya habían sido alcaldes y eran muy respetados por os pobladores de la villa, quienes los siguieron cuando comenzó la lucha independentista.
El 18 de septiembre de 1810, el segundo intendente de Guanajuato, Juan Antonio de Riaño, conociendo ya la insurrección de Hidalgo, solicitó al subdelegado de León, José Mazorra de Vegas, que acuartelara, armara y montara las tropas del regimiento de Dragones del Príncipe a su mando. Días después, tomó el cargo de subdelegado José Ramón de Hoyos y el capitán Manuel de Austri levantó su tropa en favor de la insurgencia. Los habitantes de la villa en forma voluntaria les manifestaron su adhesión y los convirtieron en las primeras autoridades independentistas de la villa.
La Villa de León, pacíficamente tomada en favor de la insurgencia (…), presenció el 4 de octubre de 1810 la entrada del comisionado del ejército americano, José Rafael de Iriarte y sus fuerzas insurgentes. Entre sus primeros actos, el comisionado de Hidalgo, liberó a los reos de la cárcel.
Rafael de Iriarte estuvo en León hasta el 8 de octubre de 1810. Antes de salir dispuso que los prisioneros europeos fueran conducidos ante Hidalgo por un escuadrón al mando del coronel Manuel de Austri. Ese mismo día, Hidalgo envió desde Guanajuato un oficio al ayuntamiento de la villa, para comunicar el nombramiento del brigadier José Francisco Gómez como intendente, corregidor y comandante de armas (León, cinco siglos contra viento y marea)”.
Semanas después, el ejército insurgente fue tomando plaza tras plaza, conquistas que el subdelegado de León les hizo saber al pueblo el 17 de noviembre (Por instrucciones del capitán Ignacio Allende) y ordenó celebrar los triunfos "con iluminaciones, cohetes y música".
Aunque el 3 de diciembre, el brigadier realista Félix María Calleja, comandante en jefe del ejército de operaciones contra los insurgentes, nombró al leonés Manuel José Gutiérrez de la Concha como subdelegado de la villa, quien dictó un bando concediendo un plazo de 24 horas para que los forasteros abandonaran el pueblo.
Calleja llegó a León a mediados de diciembre para atender las necesidades de su ejército de más de cinco mil hombres. Se hospedó en la casa de don Ignacio de Obregón (Pedro Moreno y 5 de Mayo) y desde allí remitió al virrey Francisco Xavier Venegas su plan de operaciones para abatir a Hidalgo en Guadalajara.
Miguel Hidalgo y otros jefes independentistas fueron capturados en Coahuila el 21 de marzo de 1811. Los primeros fueron pasados por las armas el 26 de junio;y a Hidalgo lo fusilaron el 30 de julio. El 12 de octubre llegaron a León las cabezas cercenadas del Padre de la Patria, junto con las de Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Jiménez, las cuales fueron exhibidas durante varios días en la plaza principal, hasta que fueron llevadas a la ciudad de Guanajuato y colocadas dentro de jaulas, cada una en una esquina de la Alhóndiga de Granaditas, donde permanecieron por 10 años.
Para saber
El nombre de León de los Aldama surgió en honor a los hermanos Ignacio y Juan Aldama, quienes vivieron en León y participaron en la conspiración que detonó la lucha independentista.
Ignacio Obregón era el hombre más rico de la Villa de León al inicio del siglo XIX, un personaje muy importante, amigo íntimo de José de Iturrigaray, quincuagésimo sexto Virrey de la Nueva España. Además, era hijo natural de don Antonio de Obregón y Alcocer, El Conde de la Valenciana. Le dio hospedaje a Calleja en 1810 y a todo su ejército e su casona en León, donde planearon enfrentar a los insurgentes en Guadalajara. Y en el 1821 en el sitio se alojó también Agustín de Iturbide, quien se quedó como jefe del Ejército Trigarante.